El exgobernador de Tamaulipas, Tomás Yarrington Ruvalcaba, fue sentenciado este miércoles, por un tribunal de Estados Unidos, a 9 años de prisión por lavado de dinero. El fiscal federal Alamdar S. Hamdani informó que el exmandatario fue encontrado culpable de aceptar más de 3.5 millones en dinero de sobornos ilegales y usarlos para comprar propiedades de manera fraudulenta en Estados Unidos. Con la condena, este miércoles terminó la última etapa del juicio contra Yarrington en Estados Unidos.
La jueza de la Corte del Sur de Texas, Hilda G. Tagle, dictó la sentencia. Según el portal Elefante Blanco, la baja pena es producto del pacto judicial por el que Yarrington se declaró culpable solamente por 1 de los 11 delitos (conspiración para cometer lavado de dinero), a cambio de entregar millones de dólares, propiedades e información a autoridades estadounidenses.
El 9 de abril de 2017, la policía italiana detuvo al exgobernador Tamaulipas al terminar de cenar con un hombre polaco en un restaurante del centro de Florencia. Yarrington intentó engañar a los agentes mostrando una credencial de conducir con un nombre falso.
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El político priista resistió a la extradición en el tribunal italiano. Sin embargo, en abril de 2018 fue llevado a Estados Unidos para enfrentar 11 cargos. Dichas acusaciones fueron presentadas en mayo de 2013 en la causa penal B-12-435-S1, informó el procurador federal para el sureste de Texas, Ryan K. Patrick.
EL CÓMPLICE
En el caso de Yarrington también se acusa a Fernando Alejandro Cano Martínez, de 61 años, propietario de la empresa Materiales y Construcciones Villa de Aguayo, quien se asoció con el priista. Ambos fueron acusados de lavar dinero, defraudar y conspirar para hacer declaraciones falsas a bancos estadounidenses.
El centro del caso contra Yarrington fue el narcotráfico, cargo que se vincula con posible fraude bancario y transacciones ilegales de dinero obtenido por sobornos de los principales narcotraficantes que operaban en Tamaulipas. A cambio, supuestamente, Yarrington permitió que operaran libremente.
Según la acusación formal, de 2007 a 2009, el político del Partido Revolucionario Institucional (PRI) presuntamente participó en el contrabando de grandes cantidades de cocaína a través del puerto de Veracruz hacia los Estados Unidos.
Los documentos acusatorios de la Corte Federal del Distrito Sur precisan que el exmandatario de Tamaulipas lavó millones de dólares comprando propiedades en Texas, a través de cómplices entre los que destacan los empresarios Napoleón Rodríguez y Fernando Cano y una mujer de nombre Sindy Chapa.
En una audiencia de media hora en Houston realizada en marzo de 2021, el exgobernador de Tamaulipas se declaró culpable de conspiración para lavado de dinero. El gobierno de Estados Unidos firmó un acuerdo de culpabilidad y desestimó cargos de tráfico de drogas, lavado de dinero, extorsión, fraude bancario, entre otros.