CULIACÁN.- La vida de Edriel, de 14 años de edad, era la de un adolescente feliz: iba a la escuela, salía de paseo con su familia y jugaba con sus amigos. Sin embargo, todo le cambió de repente, cuando lo diagnosticaron con cáncer, por lo que actualmente se encuentra internado en un hospital, luchando contra la leucemia.
De acuerdo con una historia publicada por Debate, la vida de Edriel cambió hace un poco más de un año, cuando de repente se presentaron fuertes dolores en su espalda. El primer diagnóstico de los doctores fue que una contractura muscular; sin embargo, al paso de los días no había un medicamento que lo hiciera sentirse mejor, el dolor y su sufrimiento era cada vez más grande, hasta el punto del llanto.
Su familia lo siguió llevando al médico para saber qué tenía Edriel; sin embargo, seguían sin encontrar la razón de su dolor. Uno de los galenos, incluso, se atrevió a decir que el dolor era algo psicológico, que era el propio menor quien se imaginaba el dolor.
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La desesperación de sus padres era tal que acudieron al hospital de especialidades del IMSS, en la ciudad de Obregón, al sur de Sonora, sin citas ni recomendaciones. Ahí fue en donde después de una serie de estudios, se le detectó leucemia linfoblástica aguda, un diagnóstico que cayó como balde de agua fría a la familia.
Sin dinero, los papás de Edriel se mantuvieron afuera del hospital hasta que lo estabilizaran; hubo días en los que no comieron y otros en los que tuvieron suerte y podían comerse un pan.
Actualmente el objetivo de los papás es más grande: salvar la vida de Edriel.
“Le comenzaron a dar quimioterapias y después radiaciones, mi esposa ahí estuvimos afuera del hospital, lejos de nuestros otros hijos, con el temor de dejarlos solos”, narró Ramiro, el papá del adolescente.
Edriel logró recuperarse un poco, por lo que los vecinos de El Ranchito, de Mochicahui, en Sinaloa, donde vive la familia, comenzaron a vender algunos enseres, dinero que no alcanzó para cubrir los gastos que se generan al estar fuera de casa. Y es que, aunque en el hospital le brindan todo el tratamiento, la familia no tiene a veces ni para comer, mucho menos para poder rentar un cuarto cerca mientras Edriel está hospitalizado, fuera de Sinaloa.
Y aunque la familia está agradecida por el buen corazón de muchas personas que les han ayudado, los papás de Edriel necesitan apoyo, ya que no trabajan porque su tiempo y fuerza están puestos en la recuperación de Edrie, quien pese a su condición no deja de sonreír.
La familia busca conseguir un poco de dinero boteando en la carretera Mochis-San Blas, pero apenas les alcanza para su traslado a Ciudad Obregón.
Por lo anterior, si usted desea ayudar a esta familia puede hacer un depósito en la cuenta Bancoppel 4169 1604 9390 9023 o bien comunicarse directamente con Edriel al 6683 22 23 30.
De acuerdo con el papá de Edriel, este miércoles tienen nueva cita en el IMSS de Obregón para recibir tratamiento.