ACAPULCO.- Hace casi un mes, el huracán Otis sorprendió y devastó a Acapulco, Guerrero. El panorama en este puerto es de destrucción de muebles, casas, edificios, negocios y hoteles; entre los sobrevivientes se viralizó uno: un vochito, que quedó aplastado por árboles arrancados por el poderoso ciclón. A pesar de estar prácticamente partido a la mitad, este vochito arrancó su motor y así fue removido.
Este vochito fue encontrado tras el inicio de labores de limpieza en la ciudad. Estaba en el fondo del follaje y escombros. Tenía el parabrisas estrellado, el cofre aplastado por la mitad y la pintura oxidada. Pese a su visible deterioro, y para sorpresa de todos, este carro encendió su motor y avanzó.
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Este milagroso momento en el que el vochito se muestra sobreviviente ante los efectos de Otis fue capturado por su propietaria, Sheila Pérez, quien además de compartir las imágenes en redes sociales, aprovechó para hacer un llamado a la agencia de autos que fabrica este modelo para pedir su apoyo en la remodelación de su carro, pero hasta el momento no ha obtenido respuesta.
Huracán devastador
A las 00:25 horas del pasado 25 de octubre, el huracán Otis impactó en las inmediaciones de Acapulco, en Guerrero. Este huracán llegó como categoría cinco en la escala Saffir-Simpson, el nivel máximo. Era destructor. Según el Sistema Meteorológico Nacional (SMN), se registraron vientos máximos sostenidos de 270 kilómetros por hora con rachas de 330 km/h.
Otis provocó daños cuantiosos, además de dejar hasta el momento 49 víctimas mortales en Acapulco y Coyuca de Benítez, en el estado de Guerrero.
A casi un mes de la devastación en Acapulco, los servicios de electricidad, comunicación y agua potable se han ido restableciendo de manera paulatina, sin embargo, la crisis sanitaria continúa. Los escombros y desperdicios generados a partir de la catástrofe de Otis se han acumulado por todo el municipio.
Acapulco genera entre 700 a 730 toneladas diarias de basura, pero el pasado 19 de noviembre se alcanzó una suma de 9,000 toneladas; lo que supera a la cifra regular de desechos que deja el puerto.