MONTERREY.- Al 23 de enero, Nuevo León tenía ya los primeros 84 homicidios del año, lo que da indicios de que este 2023 podría superar al 2022, con 1,430 homicidios, y le arrebate el título como el “año más violento en la última década”.
El 2 de enero, apenas iniciado el año, un grupo armado atacó a policías estatales y municipales, a los que emboscaron. El enfrentamiento dejó tres uniformados y dos atacantes muertos. Esta refriega se registró en el kilómetro 40 de la carretera a Colombia, pero en territorio del municipio de Salinas Victoria.
Tres días después, el 5 de enero, el ganadero y empresario Gustavo Levy, de 85 años de edad, llegó como todos los jueves a su rancho La Rumorosa, en el municipio de Villaldama; le acompañaba su chofer y amigo Omar de la Garza.
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Al llegar al rancho encontraron que una célula del crimen organizado se había apoderado de la propiedad y mantenía como rehén a una pareja que cuidaba el lugar. Levy trató de defender su propiedad, pero fueron sometidos por los intrusos que, posteriormente, los asesinaron y calcinaron.
Las cifras de la secretaría de Seguridad Pública de Nuevo León y de la Fiscalía de Justicia señalan que 2022 fue el año más violento en una década, con 1,430 homicidios, un promedio de 4 asesinatos cada día. Sin embargo, el inicio de este 2023 reporta ya 84 asesinatos hasta el 23 de enero. El sábado 7 de enero ha sido el más violento del mes: hubo 7 ejecutados.
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De acuerdo con datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública, 2022 superó en violencia a 2011. Con sus 2,003 homicidios superó a 2012, que registró de 1,459.
INGOBERNABILIDAD CON SAMUEL
Pedro Alejo Rodríguez, activista de la organización Juntos Pongamos Orden, considera que, desde que Samuel García asumió el gobierno de Nuevo León (4 de octubre de 2021), no ha existido una estrategia en materia de seguridad y combate a la delincuencia. Afirma que solo hace declaraciones y organiza eventos de relumbrón.
“En el tema de seguridad, en Nuevo León no hay una correcta estrategia, ni planeación, únicamente hay eventos de relumbrón, como compra de patrullas y compra de tanquetas, pero sin una estrategia efectiva de contención".
“Robo a mano armada, cobro de piso, extorsiones y los lamentables hechos de desaparición de mujeres y feminicidios, entonces es una estrategia fallida”, sostiene el activista, conocido como “Fufito”.
Por su parte, Liliana Flores Benavides, del colectivo Nosotros, advierte sobre los riesgos que enfrenta Nuevo León por este aumento de la inseguridad y la violencia, semejante a la que se vivió en los años 2010-2012 cuando la entidad fue epicentro de la disputa entre cárteles de la droga.
“Estaba desatado el crimen organizado en Nuevo León y hoy vemos con mucha preocupación que se realizan homicidios y quedan sin culpables. Ya se volvieron cuestión cotidiana los asesinatos en motocicleta con sicarios, entrar a casas y matar familias”, lamenta.
A su vez, el legislador local Waldo Fernández lamenta que la cifra de homicidios ya rompió récord, y que el estado esté, “a nada”, de alcanzar al sexenio de Rodrigo Medina, como el más sangriento. “¿Qué tenemos que hacer para arreglar la seguridad?, la palabra es coordinación”, expresa.
Recuerda que, si Samuel García fue electo democráticamente y ganó de manera contundente, de la misma forma debe responder a los ciudadanos en el tema de seguridad, porque tiene la responsabilidad de dar respuestas congruentes a los más de 700 mil votantes que lo eligieron y no dejar, a ningún nuevoleonés, en la vulnerabilidad.
Además, el Consejo Cívico, organismo privado, también fijó su postura sobre la seguridad y la prevención social de la violencia.
“Continuamos viendo la misma apuesta de hace 10 años para el combate al crimen sin una perspectiva de prevención que permita identificar factores de riesgo que se viven dentro del fenómeno de la violencia".
"El año 2022 fue uno de los años más violentos en Nuevo León en la última década. Es urgente poner en marcha el Programa Estatal para la Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia 2023-2027, y asignar recursos suficientes para garantizar su implementación”, sugiere.
Todos estos actores urgen al gobernador un plan bien definido para enfrentar a la violencia, que reduzca los delitos y combata los homicidios y feminicidios. Coinciden en que, de no hacerse, este 2023 podría significar un año más violento que 2022 y del primer año completo de Samuel García en el gobierno.
En materia de secuestros, la plataforma ¿Cómo vamos Nuevo León? reportó que en el primer año de gobierno de Samuel García un total de 22 casos por cada 100 mil habitantes, lo que significa un aumento del 29.4 por ciento, con respecto al año anterior.
Además, reveló que la tasa de homicidios tuvo un incremento del 24.6 por ciento, mientras que la violencia familiar aumentó 5.5 por ciento, en tanto que los feminicidios presentaron un crecimiento del 71.4 por ciento.
GRUPOS DELICTIVOS EN DISPUTA
El titular de seguridad Pública estatal, Gerardo Palacios Pámanes, reconoció que a Nuevo León lo acechan por lo menos cuatro grupos delictivos y células criminales independientes.
En los límites con San Luis Potosí y Zacatecas se mantiene una pugna entre el Cártel Jalisco Nueva Generación, el Cártel de Sinaloa, el Cártel del Golfo (CDG) y el Cártel del Noreste (CDN).
A su vez, agregó, en la frontera con Coahuila hay presencia de células del CDN y otros grupos criminales independientes. En la frontera con Tamaulipas también se ha detectado el ingreso del CDG, aunque su incursión no es tan violenta como la del CDN, explica.
El funcionario puntualizó que se ha desplegado en la zona rural y carreteras elementos estatales en tareas de vigilancia, con el apoyo de fuerzas federales, para evitar más emboscadas del crimen organizado.
La violencia se atribuye al crimen organizado que se disputa actividades ilegales como el narcomenudeo, en tanto Fuerza Civil ha enfrentado ataques mortales, como el del 26 de junio pasado, en la localidad fronteriza de Anáhuac, donde murieron siete policías en una emboscada.
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