TIJUANA.- La capacidad de la penitenciaría de Tijuana sigue sobrepasada y en los disturbios más recientes estuvieron involucradas alrededor de 800 Personas Privadas de su Libertad (PPL).
En sus primeras declaraciones luego de lo que el sistema penitenciario de Baja California calificó como un conato de riña, la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda reveló que el episodio estuvo encabezado por “dos liderazgos importantes”.
“Empezó un problema entre ellos, un conato de disturbio, lo intentaron. La verdad es que se hizo un buen trabajo por parte de la autoridades penitenciarias en el sentido de que rápidamente se logró controlar la situación”, dijo.
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El conflicto, ocurrido el sábado por la noche, provocó la movilización de fuerzas de seguridad estatal y la fiscalía, pero también del ejército y la Guardia Nacional que se apostaron en los alrededores de la prisión.
“Un celador se vio en medio de la situación al tratar de controlar la gresca, no obstante a los minutos fue puesto bajo un sitio seguro”, informó el sistema penitenciario ese mismo día.
Familiares de algunos internos llegaron preocupados por los reportes y el domingo temprano las visitas fueron reanudadas sin contratiempos.
HACINAMIENTO EN LA MESA
El Cereso La Mesa, por la demarcación municipal en la que se encuentra asentado, fue construido en 1956 y es la segunda prisión más antigua de Baja California, detrás del Cereso de Ensenada que nació en 1890 como cárcel municipal.
“La peni”, como es llamada habitualmente, tiene capacidad para aproximadamente 2,600 PPL, pero en su última recomendación emitida en enero de este año, la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Baja California (CEDHBC), contó 4,500 personas privadas de su libertad.
“Las estancias de los centros penitenciarios de Tijuana, Mexicali y Ensenada, se caracterizan por un alojamiento antihigiénico y con falta de privacidad, aún para realizar actividades básicas como el uso del sanitario”, estableció el organismo.
Emitida el 4 de enero de este año, fue la tercera recomendación del año dirigida a la Comisión Estatal del Sistema Penitenciario de Baja California.
Aproximadamente 15 días después, la comisionada María Elena Andrade Ramírez manifestó mediante oficio que aceptaba las tres recomendaciones.
En ellas además del respeto a los derechos de los PPL, la comisión recomendó no transgredir la dignidad humana de los familiares que van de visita al momento de su revisión.
Esta semana, luego de los disturbios del sábado por la noche, el presidente de la CEDHBC, Miguel Mora Marrufo, dijo que el hacinamiento sigue siendo un problema en la prisión de Tijuana y que en esa prisión suman ya 4 disturbios de 2019 a la fecha.
(djh)