TIJUANA.- A Kevin Yael González García, el adolescente de 14 años de edad que desapareció a plena luz del día mientras atravesaba un puente en Tijuana el pasado 2 de septiembre, lo mataron a golpes.
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La necropsia practicada por el Servicio Médico Forense (Semefo), al cuerpo localizado el pasado martes 7 de septiembre, encontró lesiones en tórax y abdomen.
“Provocaron lesiones mortales en órganos vitales como los pulmones, hubo fractura de costillas, lesión en el hígado, en el páncreas”, dijo César Raúl González Vaca, director estatal de Semefo.
La familia de Kevin, acudió a recuperar su cuerpo tras las pruebas de ADN realizadas por la Fiscalía General Estatal (FGE), y pidieron a las autoridades esclarecer el crimen.
“Pedimos apoyo a las autoridades municipales y no nos pudieron apoyar, a lo mejor si nos hubieran apoyado en ese mismo ratito, fuera otra historia”, dijo su padre, Erick Fabián González.
La alcaldesa de Tijuana, Montserrat Caballero Ramírez, negó a medios locales cualquier omisión en las labores del municipio y este miércoles dijo que el lugar donde adolescente fue visto por última vez es un foco rojo.
“Ese puente donde sucedió este hecho está tomado por los criminales. Forzosamente tiene que entrar la Guardia Nacional y el estado”, afirmó.
El puente que conecta una zona habitacional con el centro escolar Agua Caliente, donde se encuentran una antigua y reconocida preparatoria federal y una secundaria, pasa sobre la canalización del Río Tijuana, una zona por la que deambulan personas en condición de calle, así como usuarios y vendedores de drogas.
La misma gobernadora de Baja California, Marina del Pilar Ávila Olmeda, dijo que la línea de investigación que sigue la fiscalía es esa.
LOS HECHOS
De acuerdo con su padre, Kevin regresaba a casa después de acompañarlo al trabajo cuando todo sucedió, y el fiscal general, Ricardo Iván Carpio Sánchez, adelantó también que su asesinato habría sido un malentendido
“Pudo haberse debido a una situación enteramente accidental donde una persona, ya que se encontraba él (Kevin) haciendo una videollamada, pudo haber pensado que lo estaba grabando”, dijo un día después de que agentes, familiares y ciudadanos que se unieron a la búsqueda encontraron el cuerpo de Kevin detrás de una compuerta de la canalización.
Junto al cuerpo del adolescente en estado de putrefacción fue localizado otro cadáver del que hasta ahora las autoridades no tienen mayor información.
Erik Fabián dijo que Kevin no vendía gelatinas como se difundió inicialmente, solo ayudaba llevándolas a su lugar de trabajo.
“Era un niño muy noble, trabajador. Le echaba la mano a su mamá, a mí me ayudaba. Estudiaba. Su sueño era ser boxeador, estaba entrenando box. Pero lamentablemente nos lo arrebataron”, explicó.
“Nomás lo que pido es justicia”, añadió.
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