MORELIA.- Jesús Alfredo Gallegos Lara, mejor conocido como el “Padre Pistolas”, ya no cuenta con licencia ministerial por parte de la Iglesia, según anunció el arzobispo de Morelia, Michoacán, Carlos Garfias Merlos.
A través de un comunicado, el arzobispo anunció que Alfredo Gallegos ya no estará al frente de la parroquia de Chucándiro, debido a las polémicas en las que había incurrido el “padre pistolas”, por comentarios en sus misas que se volvieron virales, así como por portar un arma para cuidarse de la inseguridad que se vive en el estado.
El arzobispo explica que tras ser amonestado en repetidas ocasiones, este martes suspendió a Gallegos y por ese motivo ya no tiene expedito el uso de licencias ministeriales, por lo que ya no tiene permiso para seguir dando misas.
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Se detalla que en caso de seguir desempeñandose el ministerio sacerdotal, el “padre pistolas” se hará acreedor a las penas establecidas en el Derecho Canónico, por lo que recomendó a la comunidad Parroquial evitar hacerle invitaciones a celebrar misa o cualquier Sacramento.
¿Quién es el "Padre Pistolas"?
Alfredo Gallegos se ha vuelto famoso por ser un sacerdote que porta un revólver para cuidarse de la inseguridad y da sermones inusuales a sus fieles. El cura llegó al pueblo de Chucándiro hace 17 años.
Se trata de un sacerdote muy querido por la comunidad debido a que construyó un bachillerato para los jóvenes de Chucándiro y también apoyo a levantar carreteras.
En noviembre del año pasado circuló en redes sociales un video en el que, durante su sermón, el “padre pistolas” pidió a los feligreses no tener miedo y los invitó armarse para defenderse de la inseguridad.
“Hazte de un arma, a la chingada el gobierno, porque ellos si traen y nosotros no, es un derecho universal y constitucional, señores gobernantes rectifiquen por eso nos ponen una chinga hay que defender nuestra vida”.
En septiembre de ese mismo año, en la celebración de una misa, Gallegos Lara causó gran indignación por sus insultos y críticas al físico de una mujer con sobrepeso.
En esa ocasión el párroco relató que una mujer acudió a él para pedirle su ayuda, ya que padece artritis, diabetes y problemas cardíacos.
El sacerdote resaltó que la causa de todas las enfermedades que padece es debido a que “se la pasa tragando”.
(djh)