Comprar la despensa se ha convertido en un acto casi automático, parte del ritmo de vida de millones de mexicanos. Se hace cada semana o cada quincena, dependiendo del presupuesto y el tamaño del hogar. Para algunos es rutina; para otros, una especie de paseo necesario que mezcla el deber con la posibilidad de descubrir algo nuevo en oferta.
Ya sea en un mercado tradicional o en alguna tienda de autoservicio, las personas suelen pasearse por los pasillos de su lugar favorito para escoger lo que llevarán a su hogar como parte de su canasta básica; entre verduras, frutas, carnes, abarrotes y lácteos el dinero de la semana o de la quincena comienza a irse “como agua entre los dedos”.
Es entonces cuando las personas suelen darse cuenta como el dinero del gasto de esfuma, y es que al momento de pagar la cuenta final una de las frases más concurrentes es “cada vez alcanza para menos”, por lo que los compradores deben de cuidar cada vez más su dinero.
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¿Por qué son importantes las finanzas personales al comprar la despensa?
En México, la compra de alimentos y productos de uso diario representa uno de los mayores gastos en los hogares. Según datos del INEGI, más del 30% del ingreso mensual de las familias se destina a este rubro, lo que convierte a la despensa en un punto crítico en la gestión de las finanzas personales.
Comprar sin una estrategia puede llevar a decisiones impulsivas: productos duplicados, alimentos que terminan desperdiciando o marcas más caras que las necesarias. Hacer una lista, comparar precios y definir un presupuesto previo puede reducir hasta un 20% del gasto, de acuerdo con datos de Profeco.
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En un contexto de pérdida de poder adquisitivo, cada vez más personas recurren al uso de tarjetas de crédito o préstamos personales para hacer frente a los gastos cotidianos. Sin embargo, esto puede derivar en endeudamiento crónico si no se lleva un control.
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Así puedes perder dinero al comprar tu despensa
Contexto: Comprar la despensa es una actividad rutinaria para millones de familias, sin embargo, muchas de ellas pierden dinero sin darse cuenta durante este proceso. Las fugas económicas pueden ser pequeñas, pero al acumularse mes con mes, representan un gasto significativo en el presupuesto familiar.
Una de las principales razones por las que se pierde dinero es la falta de planificación. Ir al supermercado sin una lista de compras provoca adquisiciones impulsivas, compra de productos innecesarios o duplicados, y olvido de artículos esenciales, lo que obliga a hacer viajes adicionales que implican más gastos.
Entre las muchas otras razones por las cuales las personas suelen perder dinero al comprar su despensa también se encuentran los fraudes o estafas. Si quieres saber cual es el nuevo modus operandi que usan los estafadores para robar dinero al pagar tu despensa, a continuación te compartimos todo lo que debes saber al respecto.
Así es el nuevo fraude por comprar tu despensa
En España, una nueva y peligrosa modalidad de estafa digital ha comenzado a ganar terreno: el llamado “timo del supermercado”. La Guardia Civil ha emitido una alerta pública debido al incremento alarmante de casos reportados en distintas comunidades, donde ciberdelincuentes suplantan la identidad de cadenas comerciales para robar datos personales y bancarios.
Según informó la institución, esta forma de fraude se caracteriza por la recepción de un correo electrónico fraudulento que simula proceder del supermercado habitual de la víctima. El mensaje informa al destinatario que ha resultado ganador de un sorteo exclusivo, haciéndolo creer que ha sido elegido para recibir un premio, generalmente en forma de vales de compra o productos de alta gama.
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El correo está cuidadosamente diseñado: incluye logotipos oficiales, colores corporativos y lenguaje convincente, lo que contribuye a generar confianza y reducir las sospechas. Sin embargo, al hacer clic en el enlace proporcionado, se redirige al usuario a un sitio web falso en el que se le solicita información personal y bancaria, supuestamente necesaria para hacer efectivo el premio.
Una vez que los delincuentes obtienen estos datos, pueden acceder inmediatamente a las cuentas bancarias de las víctimas, logrando en muchos casos vaciarlas en cuestión de segundos. Este tipo de estafa, clasificado como phishing, se vale del desconocimiento y la buena fe de los usuarios, quienes rara vez sospechan de una comunicación proveniente de su tienda de confianza.
Este tipo de fraudes evidencia el creciente ingenio de los estafadores digitales y la necesidad de mayor educación digital y prevención entre los consumidores. Las autoridades trabajan actualmente en la identificación de los responsables, mientras intensifican sus campañas informativas para evitar que más personas sean víctimas de este tipo de engaños.
A pesar de que esta forma de estafa aún no llega a México se recomienda que todas las personas que acuden a hacer su despensa al supermercado de su preferencia no bajen la guardia, y que en el momento en el que reciban un correo electrónico no deseado o sospechoso reporten de inmediato a la policía cibernética, o en su defecto, hagan caso omiso de estos correos electrónicos fraudulentos.
AJA