Las filtraciones de datos, desgraciadamente, se han convertido en algo muy común. No faltan casos tanto de empresas como de bancos. Trascendió que se filtraron miles de datos de usuarios de Walmart, Invex, Inbursa y Sers.
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La información financiera y datos personales obtenidos a través de hackeos se venden entre cinco a más de 100 dólares en la llamada dark web, que es el conjunto oculto de sitios a los que sólo se puede acceder mediante un navegador web especializado, de acuerdo con una publicación de El Universal.
Según Privacy Affairs, detalles de la tarjeta de crédito, con información del saldo, se pagan hasta en 110 dólares en el mercado negro. En tanto, una cuenta hackeada de gmail alcanza 60 dólares y el PIN de una tarjeta VISA o Mastercard se comercializa hasta en 20 dólares.
Según expertos, mucha de la información que se obtiene de usuarios de servicios financieros por parte de ciberdelincuentes es a partir de medios públicos como redes sociales o por intrusión, particularmente hackeos.
Otros datos financieros y personales que se cotizan en el mercado negro
- licencia de conducir personalizada, con un valor de 35 dólares,
- información sobre mil seguidores en una página empresarial en Linkedin, por 5 dólares.
- Por el mismo precio, una cuenta de Walmart con tarjeta de crédito adjunta y por 25 dólares, una cuenta hackeada de Facebook o Instagram.