El tipo o tasa de interés es un porcentaje que se aplica como concepto de pago por el dinero durante un tiempo determinado. Es el precio del dinero. El interés compuesto aquel que se va sumando al capital inicial y sobre el que se van generando nuevos intereses. El dinero, en este caso, tiene un efecto multiplicador porque los intereses producen nuevos intereses. Sin embargo, en el caso del interés o capitalización simple, los rendimientos siempre se generan sobre el capital original.
En el mundo de la economía se usa para saber el costo de un crédito o la rentabilidad de los ahorros o de una inversión. Así, los intereses son importantes para un inversor. De acuerdo con los expertos, el interés compuesto consiste en acumular rendimientos sobre rendimientos anteriores. Visto de otra forma, es un aliado para acumular riqueza a largo plazo. Este interés se suma al capital inicial, sobre el que se generan nuevos intereses. El dinero tiene en este caso un efecto multiplicador: el capital crece al final de cada periodo al que se le aplica el interés, de forma que el siguiente interés se fijará sobre una base de capital mayor, y así sucesivamente.
Te podría interesar
Cuáles son sus características
- El capital inicial va creciendo en cada periodo porque se van sumando los intereses.
- La tasa de interés se aplica sobre un capital que va cambiando.
- Los intereses aumentan en cada periodo.
- En qué se diferencia del interés simple
- El interés simple no se suma al capital para poder generar nuevos intereses.
- Se calcula sobre el capital que se ha depositado en el inicio, por lo que el interés que se obtiene en cada periodo es siempre el mismo.
Cómo calcular el interés compuesto
De acuerdo con BBVA, la fórmula para calcular este tipo de interés puede resultar enrevesada, por lo que es preferible empezar con un ejemplo:
Ejemplificó:
"Si se tienen 100 euros en una cuenta, a un interés del 10% anual, al cabo de un año se ingresarán en dicha cuenta 10 euros en intereses. De esta forma, el capital inicial pasaría de 100 euros a 110 euros. Al final del segundo año, los intereses generados serán 11 euros que es el resultado de aplicar el 10% sobre 110 euros. De este modo tendría el capital inicial más intereses del primer año y los intereses del segundo año, en total 121 euros… y así sucesivamente", dijo.