Las promociones agresivas y las facilidades crediticias extendidas buscan que el mercado automotor mexicano mantenga un ritmo positivo en la recta final de 2025, pese al contexto de estancamiento económico e incertidumbre, indicó Guillermo Rosales Zárate, presidente ejecutivo de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
“Las promociones se encuentran presentes de manera muy agresiva porque casi todas las marcas colocan el vehículo con un menor precio o subsidian la tasa de interés. Incluso se difiere el inicio del pago del crédito por algunos meses”, explicó el líder del sector.
En conferencia de prensa Rosales indicó que las armadoras y distribuidoras han desplegado en los últimos meses estrategias comerciales intensas, que incluyen bonos directos, subsidios a tasas de interés, pagos diferidos y programas de financiamiento más amplios.
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Contexto: Este año ha estado marcado por la incertidumbre económica, derivada, principalmente de los aranceles impuestos por Donald Trump, pese a la desaceleración, en el acumulado del año se han vendido 1 millón 204 mil 923 unidades, mostrando un incremento de 0.11% respecto al mismo periodo del 2024, y aunque es el menor crecimiento para un mismo periodo desde 2020, buscan que el finalizar el año haya un mayor avance.
Compras a mayores meses
Rosales destacó que la competencia entre las instituciones financieras se mantiene fuerte, lo que ha permitido que más consumidores accedan a esquemas de crédito a 72 meses, mientras que los créditos tradicionales a 60 meses han disminuido.
“El crédito a 72 meses se ha ampliado, y esto tiene un efecto importante porque disminuye el pago mensual y atenúa la presión sobre las finanzas familiares”, detalló.
Según la AMDA, este tipo de financiamiento permite mantener la demanda de vehículos, especialmente en un contexto en el que los hogares enfrentan presiones inflacionarias y bajos niveles de crecimiento económico.
Descartan caída en 2025
Aunque las promociones y el crédito flexible seguirán impulsando las ventas, Rosales anticipó que el mercado automotor no experimentará un crecimiento explosivo, sino una expansión moderada alineada con las proyecciones anuales, sin embargo esta tendencia cambia al cierre del año.
“Prevemos que el cierre de 2025 será positivo, con buenos datos en comparación con el año pasado, pero sin un crecimiento acelerado. Para 2026 esperamos un aumento de alrededor del 2% respecto al cierre de 2025”, señaló.
El directivo precisó que este cálculo incluye las cifras de todas las marcas, incluso aquellas que no reportan públicamente sus ventas, y refuerza la expectativa de un sector sólido pero prudente, condicionado por la evolución económica y el comportamiento del crédito.
Ajuste a la realidad económica
Rosales consideró que las estrategias actuales reflejan una adaptación a la realidad del consumidor mexicano, que prioriza mensualidades accesibles y estabilidad financiera por encima de gastos mayores o créditos más cortos.
“La posibilidad de tener una mensualidad asequible complementa la oferta de precio y tasa para mantener las ventas”, afirmó.
El presidente de la AMDA reiteró que el reto principal del sector será mantener la confianza del consumidor y equilibrar el financiamiento frente a las condiciones macroeconómicas de los próximos meses.