La monumental puerta de madera de Palacio Nacional, ubicada de lado de la calle Moneda, en el Centro Histórico de la Ciudad de México, resultó severamente dañado tras las protestas del pasado miércoles 6 de marzo, cuando un grupo del movimiento Ayotzinapa intentó derribar la entrada para llegar al presidente Andrés Manuel López Obrador, quien se encontraba adentro dando su conferencia matutina frente a los medios.
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A tres días del incidente, todavía no se tiene un dictamen formal de los daños ocasionados al recinto histórico, el cual fue construido y modificado entre 102 y 1523 y ha sido testigo de eventos importantes de la historia, como la adquisición de la corona de la Nueva España y lugar de encuentro de los poderes ejecutivo, legislativo y judicial (gran parte del siglo XIX), hjasta que, en 2019, volvió a ser residencia del presidente de la república.
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Por ello, su infraestructura debe ser supervisada, reparada y rehabilitada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), encargada de delimitar la gravedad de las fracturas y las alteraciones de sus componentes, en este caso de la puerta, la cual aún no tiene un dictamen oficial.
De acuerdo con Ana Bertha Miramontes Mercado, responsable de la Dirección de Conservación e Investigación de la Coordinación Nacional de Conservación del Patrimonio Cultural del INAH, la reparación de puerta de Palacio Nacional llevará, al menos, tres meses y con un costo al erario de aproximadamente 700,000 pesos.
Portazo a Palacio Nacional
Especialistas aseguran que los daños a la puerta de Palacio Nacional fueron severos, con fracturas que deberán revertirse con colaboración tanto del INAH como de la Conservaduría de Palacio Nacional.
Esto, luego de que un grupo de manifestantes atacara el recinto en demanda de justicia por el caso de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, caso que se ha mantenido en vilo a nivel nacional e internacional.
Los supuestos estudiantes normalistas derribaron la puerta 1 de Palacio Nacional utilizando una camioneta de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para poder ingresar al recinto, donde el presidente Andrés Manuel López Obrador realizaba su tradicional mañanera.