Múltiples enfermedades aquejaron a Emilie Arista y en uno de los procedimientos que le realizaron adqurió una infección nosocomial. Desde su nacimiento se enfrentó a una fractura en sus piernas, en la adolescencia presentó un absceso en la garganta, que fue tratado con neomelubrina, el medicamento tuvo un efecto secundario y presentó aplasia medular, ya no generaba glóbulos blancos y tenía fuertes dolores en el cuerpo.
La aplasia medular que presentaba Emilie fue tratada con cortisona, pero era un fármaco muy agresivo para su organismo, la alternativa fue que su hermano le donara plaquetas centrifugando la sangre, el proceso resultó exitoso. No obstante, las constantes transfusiones le afectaron el hígado y los medicamentos el pancreas.
Siendo una joven adulta, Emilie desarrolló diabetes, malestares en los riñones y varices en el estómago. A los 28 años practicaron una endoscopia en Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, un médico residente fue el encargado del procedimiento, pero le lastimó un pulmón a hacerlo, en ese momento adquirió una infección nosocomial, que también se conoce como una enfermedad adquirida en un hospital.
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La Comisión Nacional de Arbitraje Médico (Conamed) reporta que en 20 años, desde su creación, ha acompañado 450 casos por infecciones intrahospitalarias, en promedio 22.5 por año. De es estadística es parte Emilie que hace 10 años adquirió una bacteria en el hospital que la mantuvo más de 20 días aislada y 60 días hospitalizada, la bacteria afecto severamente a sus pulmones.
De acuerdo con Leticia de Anda Aguilar, directora de Sala Arbitral de la Conamed, 433 casos han sido de pacientes que han llegado a la comisión y se han resuelto en una primera etapa, llamada de conciliación. Los restantes han pasado por el arbitraje. Respecto a los que llegan enviados por la vía de la autoridad -y que inicialmente no pasaron por la Conamed- sólo suman 5.
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“La población llega a quejarse porque su paciente tuvo una infección durante el tiempo que estuvo hospitalizada”, explica en entrevista con La Silla Rota.
De los 433 casos resueltos por conciliación, el 82 por ciento corresponden a instituciones públicas de seguridad social, hospitales estatales y federales y el restante a privadas. De los que han pasado a la etapa de arbitraje ahí se emparejan, ya que 52 por ciento son de institutos públicos de seguridad social y 48 por ciento por parte de los privados.
De Anda Aguilar explica que en los casos en los cuales se ha detectado que ha habido mala práctica, no rebasan más allá de 50 por ciento, pero no son por infección nosocomial, sino por situaciones de atención al paciente. Sobre cómo se dividen los casos por género, la funcionaria afirma que son más las quejas de pacientes masculinos, sin ser una situación fija.
“Va a depender del tema, porque están los casos maternos, los pediátricos, la medicina interna, ortopedia y cada especialidad tiene, y se ve por quién pone la queja, si es el propio paciente, un familiar o tercero”, añade la funcionaria.
La salud de Emilie mermo tras la infección nosocomial, dos años después el azúcar en la sangre alcanzó niveles muy por debajo de lo recomendado, se desvaneció, se golpeo la cabeza y fue encontrada muerta en su domicilio.
¿Qué son las infecciones nosocomiales?
La directora de Sala Arbitral de la Conamed explica que las infecciones intrahospitalarias desde el 2002 son las asociadas a la atención de la salud (IAAS), en las que hay una serie de procesos que el paciente adquiere durante su estancia en el hospital.
“Es una infección que el paciente no traía en el hospital y se manifestó en el hospital”, remarca.
En agosto de 2022 se registraron entre enero y agosto, en las 353 unidades de segundo y tercer nivel 36 mil 425 infecciones asociadas a la atención de la salud, de acuerdo con el boletín IAAS, Red Hospitalaria de Vigilancia Epidemiológica,de agosto de 2022. A pregunta expresa, De Anda enlista las situaciones consideradas infecciones intrahospitalarias. Se trata de enfermedades respiratorias, por vías urinarias, heridas quirúrgicas y por la introducción de catéteres, entre otras.
“Han ido evolucionado estas situaciones porque hace muchos años era por vía urinaria. ¿Qué empezó a ocurrir? Cuando se empiezan a dar cuenta que al colocar la sonda el paciente adquiere infección urinaria, se empiezan a hacer procesos de cotejo, decir ¿qué pasa cuando coloco una sonda como para que el paciente se infecte? Ah, me lavé las manos, no toqué la sonda, la coloqué de manera más estéril, tomé todas las medidas para no introducirla de afuera a adentro, los procesos de observación permitieron que se redujeran, siguen presentes, pero no son la número uno”, afirma.
“Se dieron cuenta que los procesos respiratorios que requieren una intubación tienen varios factores y viene otro componente en paralelo, una cosa es lo que haga el personal de salud que genere un proceso de infección del paciente y otra lo que traiga el paciente mismo”, precisa.
¿Cómo funciona la Conamed?
Los casos en los que interviene la Comisión Nacional de Arbitraje Médico son a petición de parte y los documentos que se emiten se hacen de manera colegiada con participación multidisciplinaria en la que participan médicos, abogados y químicos.
“Llegan de manera indistinta desde la persona que se queja porque le hicieron mal una cirugía hasta la persona que se queja porque le cobraron mucho. Ahí nosotros tendremos que decir algo significativo, la comisión analiza el acto médico, la intervención en atención de un paciente; nada más el último caso no es competencia nuestra”, aclara.
De Anda explica cómo se revisan los casos de infecciones nosocomiales que llegan a la Conamed. “Reitero, cuando son casos que llegan a la comisión nosotros hacemos todo el proceso junto con los abogados, vamos el análisis global y juzgamos bueno, nosotros Comisión Nacional de Arbitraje Médico emitimos un juicio y queda incluso como cosa juzgada, esto qué quiere decir, que con eso un paciente puede decir ‘oye, pues la Conamed, la Comisión Nacional de Arbitraje Médico, dice que hubo mala práctica'”.
También llega a haber casos donde el paciente acude directamente al ministerio público y presenta una denuncia contra un médico, un grupo de ellos o una institución. El ministerio público realiza sus indagatorias. En el caso de instituciones públicas federales como el IMSS o el ISSSTE les piden a la Conamed revisar el caso.
“Nosotros solo hacemos una opinión técnica llamada dictamen médico y en ese sentido es una opinión que ayuda y contribuye a que el juez diga si se hicieron bien las cosas o hubo fallas. A diferencia del laudo, lo que tiene es que aquí se termina el proceso, se juzga”.
-¿Qué pasa con las muertes por IAAS?
-Un dictamen en el cual el delito que se persigue es un homicidio de tipo culposo, se hace el análisis y se ve cuáles son los factores, quizá la familia presente una denuncia y dice se murió por infección, volvemos al pie diabético, si aparentemente fue por eso, pero no vemos detrás que era un paciente con daño renal, hepático, multisistémico, con tratamiento, sin tratamiento o que a pesar de él iba a fallecer.
Las causas del alto promedio de infecciones nosocomiales
Cuestionada sobre por qué México tiene un promedio más alto de infecciones nosocomiales -de 9 por ciento de casos- respecto al promedio mundial, el cual es de 5 por ciento, responde que tiene que ver con que los hospitales están muy dispersos en el país, que cuentan con poco personal y equipo.
“Su infraestructura queda circunscrita a lo indispensable y volvemos a la población, podemos ser una población que tiene poca condición higiénica, nutrimental, su misma condición del estado inmunológico está deprimido”, describe.
Otra explicación es que hay estados donde el promedio se dispara a 17 por ciento. “Depende del estado, del hospital. Hay un estudio que una institución de seguridad social se puso a hacer la investigación, en el que detectaron que había más infecciones en pediatría, cirugía y medicina interna, comparado con ginecología u obstetricia.
“No podemos generalizar y entran cuestiones de cómo ven este problema, no es lo mismo en la Ciudad de México que en Coahuila o Veracruz y en la propia Ciudad de México no es lo mismo en el IMSS, el ISSSTE u hospitales de referencia”, diagnostica la directora de Sala Arbitral de la Conamed.
Las malas prácticas que causan infecciones nosocomiales
Sobre las principales malas prácticas médicas que pueden incidir en las infecciones, respondió que una es el lavado de manos, que en ocasiones no se hace por las premuras y por los tiempos. “Si se las lavan, pero no se cumplen con los tiempos específicos que ahora la pandemia nos permitió tener conocimiento”, puntualiza De Anda.
También lo atribuyó a que en casos como los de la covid19, donde algunos de los pacientes no responden a los tratamientos, como una extubación, debían seguir intubados, lo cual es un proceso invasivo.
“Yo quisiera quitarle la intubación a un paciente, entonces mi paciente no me responde, por eso le digo en infecciones nosocomiales, si bien hay una situación en la que el médico o el personal de salud puede contribuir, no es el detonante único".
Cuando llega a ocurrir que las infecciones se dan por medicamentos, también es porque los mexicanos generan resistencias, debido a la práctica de automedicarse, asegura. Se le pregunta a Leticia de Anda si hay infecciones inevitables. Responde que sí e incluso la Organización Mundial de la Salud así lo ha establecido, al tratarse de un proceso inherente a la atención médica. Explica cuáles son.
“Respiratorias por uso de ventilador, urinarias por catéter, las de herida quirúrgica por cirugía e introducción a nivel sanguíneo. Son las cuatro”.
Pide a la población que tenga sensibilidad, remarca que no todo depende de la institución y del personal médico. “También nosotros contribuimos y ¿por qué lo digo? Me voy a un problema de salud pública, sobrepeso y obesidad claro, le vuelvo a insistir, afortunadamente si lo queremos ver así hoy día con la pandemia, pues algo que aprendimos es que el sobrepeso y la obesidad te da o va a ser justamente algo que nosotros en medicina sabemos desde hace muchísimos años, un estado de inflamación permanente, entonces qué quiere decir, que aunque yo ande por la vida sin tener aparentemente ninguna enfermedad mi organismo, bioquímicamente inmunológicamente celularmente está inflamado”.