Eventos políticos, pista para patinadores y área canina, son algunos de los usos que se le dan a la Plaza de las Tres Culturas en la unidad habitacional Tlatelolco, pero vecinos cuyos departamentos están en los tres edificios colindantes al espacio abierto, señalan que este uso les afecta al vivir a unos metros del emblemático lugar.
“¡Los perros, los perros! O bueno, la gente que viene con sus perros a pasearlos y hagan sus necesidades es de lo que más observo, porque los que ensucian y no levantan las heces ni son de aquí, porque los que vivimos aquí limpiamos porque sabemos que este es nuestro hogar, no vas a ensuciar tu entorno”, dice una vecina del piso 13 del edificio Chihuahua, que prefiere no dar su nombre.
La plaza que reúne elementos de tres momentos de la historia de México, desde la época prehispánica, la conquista y la actualidad; está delimitada por tres edificios del conjunto habitacional: 16 de septiembre, 2 de abril y el Chihuahua, siendo este último el más cercano.
Te podría interesar
La señora Navarro lleva viviendo en el edificio Chihuahua 35 años, ella se dice afectada por los usos que se le dan a la plaza, lo cual ha derivado hasta en peleas, asegura.
“No hay un día que no haya un escándalo, un evento, o un ‘despapaye’, como el día que a un señor le pegaron. Otra cosa que nos pasa es que desde el viernes hasta el domingo en la noche hay danzantes, que se quedan toda la noche con sus tambores”, dice la señora Navarro, habitante del edificio Chihuahua.
“Lo que queremos es un poquito de paz, que se concientice a las autoridades que corresponda que esto es una unidad habitacional, no es un salón de eventos, no es un salón de baile, no es una pista para motos o patinetas, tampoco es un área canina, esa está más adelante”, dice la vecina del la Plaza de las Tres Culturas.
Además de las denuncias por el ruido derivadas de patinadores, danzantes y mascotas que permanecen en la Plaza de las Tres Culturas hasta altas horas de la noche, los vecinos se quejan de que las propias autoridades realizan eventos en el lugar, provocando altos niveles de ruido.
“Cada fin de semana les ha dado por realizar eventos artísticos, culturales, deportivos, danzantes de lo prehispánico toda la noche de los fines de semana, hasta eventos políticos con carpas”, dice el vecino del edificio Chihuahua, Alejandro Jiménez.
La señora Navarro pide que quienes usen la plaza y la visiten lo hagan sabiendo que la gente con departamentos aledaños puede molestarse por la contaminación del ruido y la suciedad, “¿Qué deseamos? La paz y la tranquilidad a la cual todas las personas tenemos derecho a vivir en nuestros hogares”.
“Es un área arqueológica, cultural e histórica, hay una ley que protege todas estas áreas, es la ley del INAH que protege todo esto y por otro lado les pediría que respeten, que aquí vivimos nosotros”, dice la vecina de la Plaza de las Tres Culturas.