Puebla -La creciente inseguridad en Puebla ha provocado que tanto exgobernadores como autoridades municipales soliciten esquemas especiales de protección, en un contexto donde el estado acumula 148 víctimas de violencia político-criminal entre el 1 de enero de 2018 y el 30 de octubre de 2025, según el reporte Votar entre Balas.
Estas agresiones, que incluyen amenazas, asesinatos, ataques armados, atentados y secuestros contra candidaturas, autoridades electas, integrantes de partidos, familiares, funcionarios y fuerzas de seguridad fuera de combate, representan el 5.65% de todas las víctimas del país en ese periodo.
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Exgobernadores bajo resguardo especial
En medio de este escenario, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Puebla confirmó que tres exgobernadores cuentan con un total de 10 escoltas asignados. La distribución es la siguiente:
- Melquiades Morales Flores (1999-2005): 2 escoltas
- Guillermo Pacheco Pulido (enero–julio 2019): 4 escoltas
- Sergio Salomón Céspedes Peregrina (2022-2024): 4 escoltas
La dependencia aclaró que inicialmente se había difundido una cifra distinta, pero se corrigió tras una revisión interna. Actualmente, Sergio Salomón se desempeña como director del Instituto Nacional de Migración.
El titular de la SSP, Francisco Sánchez González, explicó que quienes han ocupado la gubernatura pueden recibir entre 2 y 16 elementos de seguridad, aunque esa asignación no es automática ni obligatoria. El número final depende de un análisis de riesgo, de las condiciones particulares de cada exmandatario y del estado de fuerza disponible.
Alcaldes también solicitan protección por amenazas
La presión sobre las corporaciones de seguridad estatal no proviene únicamente de los exgobernadores. A principios de noviembre, los alcaldes de San Salvador Huixcolotla y Eloxochitlán pidieron protección personal tras recibir amenazas directas presuntamente de grupos delictivos que operan en la región.
El secretario de Gobernación estatal, Samuel Aguilar Pala, confirmó que ambas solicitudes fueron atendidas de inmediato y que los ediles ya cuentan con esquemas de seguridad implementados por la Policía Estatal.
Puebla se consolida como un foco de riesgo político
Las 148 víctimas registradas en menos de ocho años reflejan la creciente vulnerabilidad de quienes detentan cargos públicos o participan en la vida política en Puebla. En este contexto, la solicitud de escoltas por parte de exmandatarios y autoridades municipales deja de ser una medida excepcional y se convierte en un indicador del deterioro de la seguridad pública.
Mientras el estado concentra más del 5% de la violencia político-criminal del país, la demanda de protección a funcionarios continúa en aumento, poniendo a prueba la capacidad operativa del Gobierno estatal y evidenciando la urgencia de fortalecer las estrategias de seguridad en todos los niveles de gobierno.