La pizza llegó a México a principios del siglo XX con la inmigración italiana, pero no fue hasta las décadas de 1950 y 1960 que comenzó a ganar popularidad entre los ciudadanos. Con una receta algo sencilla y usando una gran variedad de ingredientes fue como las primeras pizzerías abrieron en la capital.
ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP. EL PODER DE LA INFORMACIÓN EN LA PALMA DE TU MANO
Sin embargo, a diferencia de otros platillos, la pizza necesitaba forzosamente de dos claves para su éxito: la levadura y el horno, provocando que la gente que no los tuviera no pudiera preparar un clásico plato italiano con queso derretido, hasta ahora.
Te podría interesar
Aquí te damos una receta casera, para que puedas cocinar una pizza sin usar levadura y el horno, así que, ¡toma nota!
TE PUEDE INTERESAR: La petición que le hizo Sheinbaum a Rogelio Ramírez de la O
TE PUEDE INTERESAR: Bolsas a la baja: El temor a una recesión hunde los mercados
La receta para preparar una pizza casera sin usar el horno o levadura
INGREDIENTES
MASA
- 1 ½ tazas de harina oooo
- 11 cucharas de agua
- 1 cucharadita de polvo de hornear
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharada de aceite de oliva
PIZZA
- Salsa de tomate (cantidad necesaria)
- Queso mozzarella (cantidad necesaria)
INSTRUMENTOS ADICIONALES
- Tazón
- Palo de amasar
- Sartén
- Hornilla
SÍGUENOS EN EL SHOWCASE DE GOOGLE NEWS
PREPARACIÓN
- Mezcla todos los ingredientes para la masa en un tazón hasta que estén bien unidos. Debe quedarte una masa suave que no se pegue en las manos. Si hace falta, agrega más agua o más harina.
- Amasa la mezcla por alrededor de 2 minutos para que se unan bien los ingredientes. Déjala reposar tapada unos 10 minutos.
- Aplasta la masa y moldéala con un palo de amasar hasta que te quede redonda. También puedes cortarla a la mitad y hacer dos pizzas pequeñas.
- Termina de armar la pizza en la sartén, apenas aceitada, formando con el dedo un borde más grueso para que no se salga la salsa ni el queso.
- Cocina a fuego mínimo y, mientras se hace, cúbrela con la salsa y los trozos de queso.
- Tras unos minutos, tapa la mitad de la sartén y déjala así hasta que el queso se derrita, siempre teniendo el fuego al mínimo.
- Una vez que esté dorada, puedes sacarla y añadirle los toppings que desees: jamón, tomate, aceitunas, pepperoni y muchos más.