Paulina Rubio acudió este 22 de mayo a una audiencia en una corte de Florida debido a una disputa legal relacionada con la custodia de su hijo mayor, fruto de su relación con el español Nicolás Vallejo-Nájera. Durante la sesión, se revelaron tensiones familiares, entre ellas un conflicto reciente entre Paulina y su hijo, Andrea Nicolás, de 14 años, ocurrido al intentar quitarle el teléfono móvil.
Según imágenes difundidas por el periodista Javier Ceriani, la representante legal del menor, Amber Gasper —designada por las autoridades— expuso que la situación se tornó tan complicada que fue necesario contactar a los servicios de emergencia.
Paulina Rubio: su hijo Andrea Nicolás la acusa en la corte de haberlo golpeado
Amber Gasper detalló que el conflicto surgió cuando Paulina intentó retirar el celular a su hijo como medida disciplinaria.
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“Nico depende mucho de su teléfono. Me ha expresado que no está conforme con cómo se maneja la situación en casa. Siente que su madre está molesta con él y que esto lo hace sentirse agredido”, comentó la especialista.
La representante explicó que el teléfono representa para el niño un vínculo directo con su padre, por lo que al perderlo se generó una fuerte reacción. Incluso, el menor llegó a enviar una imagen de su espalda mostrando una marca roja, aunque se desconoce su origen exacto.
Durante la audiencia también se mencionó que el menor, ante la tensión con su madre, contactó tanto a su padre en España como a la policía. El niño expresó su deseo de vivir con su progenitor, lo que puso en evidencia la gravedad del conflicto familiar.
Gasper subrayó que ha recomendado en repetidas ocasiones que se inicie una terapia familiar, medida que hasta el momento no ha sido implementada.
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Por otro lado, Nicolás Vallejo-Nájera, conocido como Colate, reaccionó con molestia ante la reciente aparición de su hijo en la portada de la revista ¡Hola! junto a Paulina Rubio. En declaraciones a medios de comunicación en España, expresó que no fue consultado ni se le solicitó autorización para que el menor participara en dicha publicación.
Colate recalcó que cuando comparte imágenes de su hijo en redes sociales, siempre cuenta con su consentimiento, pero consideró inapropiado que se usara su imagen en un medio comercial sin un acuerdo previo.
“Una publicación en Instagram no es comparable con una portada de revista que implica beneficios económicos”, enfatizó.
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Finalmente, afirmó que, a su parecer, el niño no estaba cómodo durante la sesión fotográfica, señalando.
“Basta con observar su expresión para notar que no se siente a gusto”.
LCM
