Amadeo Llados tiene 1.4 millones de seguidores en Instagram. Se ha convertido en un influencer que, de acuerdo con los videos y fotos que comparte, ha ayudado a miles de personas transformar su vida: “del hostal al Bugatti” es uno de los lemas de este influencer y coach de vida que promete ayudar a la gente a ganar su primer millón.
Sin embargo, detrás de su apariencia de éxito, popularidad y altruismo hay una acusación de estafas, racismo y violencia que se han formalizado con una demanda colectiva presentada por más de mil personas.
Daniel Esteve, un empresario español decidió declararle la guerra de Llados mediante una campaña que comenzó con u video publicado en redes sociales donde explica las acusaciones en contra del influencer.
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“Recibí hace unos días la llamada de la mamá de un niño que se llama Ricardo que cayó en la red de esta secta, porque para mí esto es una secta. Se engancha y entonces comienza a alejarse de su familia, sus amigos, de todos. Perdió 34 kilos, apenas dormía y luego tuvo dos tentativas de homicidio”.
De acuerdo con Esteve, el método de Llados es enganchar a personas vulnerables emocionalmente para venderles sus productos de coach de vida. Pero antes de eso, los humillas y los despoja de su autoestima.
“Lo que hace es acerase que la gente vulnerable que cae en sus redes y las humilla. Los pisotea, les dice que no son nadie y que la única solución es él, que además se presenta como lo más cercano que hay a dios”.
¿Por qué demandan a Amadeo Llanos?
La demanda en contra de Llados fue presentada a través del abogado Xaime da Pena e incluye acusaciones de estafa, estafa piramidal y delitos de odio. La denuncia pretende recuperar el dinero invertido además de un monto de indemnización por los daños sufridos.
De acuerdo con el empresario Daniel Esteve, detrás de las estafas de Llados hay también actitudes de racismo y clasismo. En su cuenta de redes sociales, Llados suele presumir viajes y lujos, siempre en compañía de algunas modelos e influencers.
Esteve señala: “El verdadero Llados es otra cosa. Lo que hace es que una vez que humilla a las personas, les abre una puerta que es: yo tengo la solución. Y entonces habla cosas absurdas como mainset, del fucking panza, del bro”.