XALAPA, VER.- Familiares, amigos y representantes de la agrupación Artículo 19 marcharon en el centro de Xalapa para recordar el asesinato del fotoperiodista, Rubén Espinosa quien fue asesinado el 31 de julio en la Ciudad de México.
El grupo que colocó una pequeña ofrenda en la Plaza Regina, lugar donde Rubén daba cobertura a las manifestaciones sociales, reprochó la impunidad que prevalece en el caso y que las autoridades se nieguen a abrir una línea de investigación que incluya su profesión como la causa de su muerte.
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Rubén desapareció el viernes 31 de julio en la Ciudad de México, a donde se había autoexiliado ante amenazas de muerte. El domingo 2 de agosto la policía encontró su cuerpo junto con el de cuatro mujeres, la activista Nadia Vera, la modelo Mile Virginia Martín, la maquillista Yesenia Quiroz y la trabajadora doméstica Olivia Alejandra Negrete, en un departamento de la colonia Narvarte.
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Todos recibieron impactos por arma de fuego y, en varios casos, los peritajes demostraron posibles actos de tortura en las víctimas. La versión oficial fue que Rubén y Nadia, activista de Veracruz, estaban en el lugar y la hora equivocados.
Esté sábado Patricia Espinosa, hermana de Rubén, reprochó que como parte de la conmemoración de la muerte del fotógrafo persista la presencia de policías vestidos de civil que, en lugar de apoyar en la investigación del asesinato, toman fotos y graban a los asistentes a la plaza, como una forma de intimidación.
“La línea Veracruz y la línea de la labor periodística de mi hermano no ha sido considerada en estos nueve años. Lamentablemente, seguimos en la impunidad. Después de tanto tiempo, seguimos esperando respuesta de un gobierno opresor".
“Si bien Veracruz abrió las puertas para hacer algunas investigaciones, pero bien sabemos y lo hemos dicho día a día que, Rubén jamás hizo una denuncia a las autoridades porque justamente no confiaba en ellas y, porque justamente las autoridades, la policía de este lugar, es quien lo perseguía, lo acosaba y lo intimidaba. Obviamente, ningún periodista que se siente intimidado por la misma autoridad va a tener confianza en hacer una denuncia. Es por ello que las autoridades consideran que no hay una relación con el tema Rubén Espinoza”.
Expuso que, del análisis de contexto del caso de su hermano, se ha documentado que Javier Duarte de Ochoa, gobernador de Veracruz del 2010 al 2016, y Arturo Bermúdez Zurita, secretario de Seguridad Pública (SSP) intimidaban a los periodistas, los asesinaban y los desaparecían.
“Pero para ellos no fue el mismo modus operandi que ocurrió en el caso de Rubén, además de que no fue asesinado aquí, sino fue asesinado en la Ciudad de México".
“Pero es importante recordar que Rubén fue perseguido desde aquí, fue amenazado e intimidado y que por eso él tuvo que irse de este lugar. No fue porque él haya querido irse, se vio obligado a irse a la Ciudad de México, en donde obviamente después las garras de este gobierno fueron a alcanzarlo para asesinarlo”.
Patricia Espinoza recordó que Nadia, quien murió con Rubén, fue perseguida y acosada en Veracruz. “No vamos a creer esa situación, sí tenemos mucha claridad de que las autoridades ahora están pretendiendo, intentan o quieren cerrar esta línea de investigación y no lo vamos a permitir” denunció.
“Tampoco creemos que sea coincidencia que Rubén fue torturado de la manera en que fue y que él haya estado en un lugar equivocado. Entonces bueno, esto es lamentablemente, seguimos abonando a la impunidad”.
La joven lamentó que después de 9 años, la familia siga presentándose en la Plaza Lerdo para exigir que se esclarezca el caso de Rubén. “Nuevamente personas vestidas de civil aquí alrededor de nosotros, grabándonos, tomando fotografías, así como lo hacían con mi hermano. Qué lamentable que este estado siga teniendo esta represión hacia las personas”.
Cuitláhuac acumula 199 agresiones a periodistas
Por su parte, el representante de Artículo 19, explicó que en lo que va del sexenio de Morena (2018-2024), Veracruz es el quinto estado con más agresiones a periodista, acumulan 199 casos.
“Cuántos casos más van a permitir las autoridades, pues al no investigarse las amenazas, intimidaciones y actos de hostigamiento se vuelve permisible seguir agrediendo a la prensa ya sean particulares, el Estado o el crimen organizado”, se dijo.
Se expuso que, independientemente de quién jale el gatillo, el Estado está obligado a que se investigue quién es el autor intelectual de las agresiones contra los comunicadores y se sancione a los responsables.
fm