VERACRUZ, VER.- Domingo Muñoz, quien sobrevivió luego de que le clavaron un cuchillo en el ojo durante una pelea ocurrida en el estacionamiento de un supermercado en la ciudad de Veracruz, habló por primera vez ante medios de comunicación de lo ocurrido la mañana del 10 de julio del 2019.
Ese día, se enfrascó en una discusión con Alejandro Barragán Mora por un cajón de estacionamiento afuera de la tienda Soriana ubicada en el fraccionamiento Floresta de la Ciudad de Veracruz, después vinieron los golpes y terminó con un cuchillo táctico clavado en el ojo.
Alejandro Barragán fue sentenciado en febrero de este año a cinco años de prisión por lesiones simples. La decisión de la jueza que dictó la sentencia fue apelada por representantes legales de Domingo Muñoz, quien considera que durante el desarrollo del juicio se falsearon declaraciones y no se presentaron pruebas suficientes.
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Andrés Mier López Castro, representante legal de Domingo, señaló que se presentó una apelación a la decisión de la jueza, para que la sentencia sea revisada, así como el tipo penal del que se le acusa, ya que –desde su apreciación- no se consideró el dolo con el que se cometió la agresión, ni las secuelas que causó a la víctima la pérdida de un órgano vital.
Secuelas morales y físicas
Domingo Muñoz afirmó que aquella agresión le cambió la vida de manera drástica. Su caso se dio a conocer en aquel entonces primero en redes sociales, ya que las fotografías y videos del hombre con el cuchillo clavado en el ojo se viralizaron rápidamente.
Con el cuchillo en el ojo ingresó a una cirugía en el Hospital Regional de Alta Especialidad de Veracruz. Fotografías suyas mientras se practicaba la intervención fueron filtradas a medios y también se difundieron en redes sociales.
Perder el ojo le causó secuelas en la salud física y moral; además de generar afectaciones en la economía de su familia, pues asegura que a las complicaciones para seguir trabajando le siguió la falta de empleo por la pandemia de covid-19.
Domingo compartió que sufre dolores permanentes debido a que el hueso quedó expuesto en donde antes estaba su ojo. Además, la medicación que tomó en un inició para atender la herida, le causaron secuelas que debe superar con otros medicamentos.
“Me cambió la vida en todo, en lo moral, ayer no dormí nada porque me venía a la mente todo, al principio no quería dar estas entrevistas porque se me venía a la mente todo y duele; monetariamente yo he pagado todo, yo he gastado todo, los ahorros, lo que se tenía, se viene la pandemia, peor tantito, no hay trabajo”.
En lo moral, asegura que se trata de un momento que le afecta mentalmente cada que lo recuerda; además, las complicaciones por perder parte de la visión. “Me cambió moralmente, a veces me vienen los recuerdos, cuando me duele es cuando más vienen los recuerdos, si hace calor duele y si hace frío duele más, me duele el hueso porque quedó vacío en donde tenía mi ojo, lo que traigo ahora es una prótesis de acrílico”.
“Estamos en estudios de que no me haya dado diabetes porque bajé hasta 30 kilos, todas las medicinas que tomé me causaron otras secuelas y tomo medicinas para combatir esas secuelas."
¿Por qué está inconforme con la sentencia?
Andrés Mier López Castro representante legal de Domingo Muñoz, afirma que la sentencia de la jueza Ludivina García Rosas benefició al agresor, ya que se varió el tipo penal para imponer una sanción mínima. El abogado detalló que, aunque se presentaron pruebas del dolo con el que se cometió el ataque, estas fueron desechadas y se le sentenció por lesiones simples.
El abogado detalló que se presentó una apelación ante el Primer Colegiado de Circuito en materia Penal de Boca del Río, para que la sentencia sea emitida por el delito de lesiones dolosas y se aumente la pena.
Por su parte, Domingo Muñoz afirmó que durante el desahogo de las pruebas se presentaron testigos que afirmaron que el cuchillo que tenía clavado en el ojo era suyo y él mismo se lo enterró, lo que rechazó en el juicio.
“Mi inconformidad es primero la sentencia que le dieron, esa sentencia no se me hace correcta siendo que atentó contra mi vida, a pesar de que digan que sobreviví atentó contra mi vida, a parte las mentiras que se dijeron, hagan de cuenta que le dieron un libreto a los testigos que sacaron de no sé dónde, como si lo hubieran estudiado… para mi es una inconformidad porque dicen que yo traía el cuchillo, que yo me lo enterré, el mismo acusado dice que se defendió con todas sus fuerzas, casi casi es Superman para doblegarme y que yo me enterrara el cuchillo”.
Domingo señala que no está inconforme con los años de prisión que se dieron en la sentencia, sino que se esté emitiendo un castigo por un delito que considera que no es el adecuado a su caso, ya que considera que se beneficia al agresor.
“Otra cosa es por qué no le han sacado huellas al cuchillo, yo nunca toqué ese cuchillo, debe tener las huellas de él y si yo lo toqué y lo traía debe traer mis huellas, debe estar en ese cuchillo si traía cadena de custodia desde el principio, al día de hoy me pregunto por qué no han sacado el cuchillo”.
mb