Un video difundido en redes sociales, donde una joven estudiante de preparatoria denuncia entre lágrimas y con firmeza el acoso sexual que sufrió por parte de un docente, ha sacudido a la opinión pública y obligado a las autoridades de Chiapas a reconocer y enfrentar de manera directa el alarmante incremento de casos de violencia sexual en instituciones escolares del estado.
El testimonio de la joven, espontáneo y cargado de indignación, en la ceremonia de fin de cursos en la Escuela Preparatoria Felipe Carrillo Puerto, municipio de Pijijiapan, Chiapas, se volvió viral en cuestión de horas, generando una ola de solidaridad y presión social.
De inmediato, el jueves 17 de julio, al día siguiente de que se difundió el video, Jorge Luis Llaven Abarca, fiscal general de Chiapas, informó que José “N”, maestro de ese plantel, había sido detenido por su presunta responsabilidad por los delitos de hostigamiento y acoso sexual.
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Sin embargo, Lourdes Ovando Wong, integrante de la Red Nacional de Abogadas Digna Ochoa, señaló que la joven había presentado una queja formal ante la escuela desde el año pasado y luego, en abril de 2025, interpuso una denuncia ante la Fiscalía de Distrito Istmo – Costa, pero no recibió respuesta hasta que el caso se hizo visible con el video viral.
Este caso también ha evidenciado el incremento de los casos de acoso sexual en Chiapas: 129 % según el reporte del Observatorio Ciudadano en 2024. Una escalada que no sólo revela un crecimiento alarmante de la violencia de género, advirtió el abogado Rodolfo L. Chanona, sino también “la profunda ineficacia institucional para frenarla, sancionarla o, siquiera, documentarla con rigor”.
Durante su discurso en la ceremonia de graduación, y frente a padres de familia, docentes y compañeros –señala la crónica de Christian González, corresponsal de La Silla Rota en Chiapas–, la joven estudiante tomó el micrófono y comenzó con una declaración contundente: “Es agotador y realmente triste que le tengan tanto miedo a las palabras y a la verdad. Trataré de ser breve”.
La joven relató que durante años ha habido profesores prepotentes, groseros y discriminatorios. “La mayoría de los maestros son hombres, y además de eso, son acosadores”, afirmó con voz firme. Señaló que el acoso va desde miradas y mensajes insinuantes hasta intentos de establecer relaciones sexuales. Lamentó no haber denunciado antes, pero recalcó que no podía callar más: “Lamento que me haya tocado a mí alzar la voz. Lamento decirlo hasta hoy”.
El video se volvió viral en redes sociales y ese mismo día se difundió en los noticieros radiofónicos y televisivos. La denuncia se publicó el viernes 18 de julio en la primera plana de El País: “El discurso de una joven en Chiapas destapa una trama de acoso sexual en una escuela”, fue el encabezado.
Sólo la presión mediática movilizó a las autoridades chiapanecas ante la denuncia que había presentado la adolescente desde el 5 de abril ante la Fiscalía de Distrito Istmo – Costa, confirmó la licenciada Ovando Wong, integrante de la Red Nacional de Abogadas Digna Ochoa.
“La alumna hizo pública su denuncia porque las autoridades escolares y judiciales fueron omisas. Incluso se intentó responsabilizarla de los hechos que denunció”, señaló la abogada en sus redes sociales.
Se presentó una queja ante la Secretaría de Educación de Chiapas, el 9 de abril, dirigida a su titular Roger Adrián Mandujano Ayala, sin que hubiera respuesta institucional antes de que el caso estallara en medios digitales, indicó.
Los datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública, así como de organismos locales como el Observatorio Ciudadano, señaló el abogado Chanona en un artículo publicado en diario Ultimátum, muestran que el acoso sexual y otros delitos contra la libertad y seguridad sexual –como el abuso, hostigamiento y violación– han mantenido una presencia constante, aunque muchas veces invisibilizada, en Chiapas.
En el primer trimestre de 2025 ya se habían abierto 251 carpetas de investigación por delitos sexuales, y para mayo de ese año la cifra había ascendido a 421. Es decir –indicó Chanona–, cada semana se presentan decenas de denuncias por actos que vulneran la integridad física y emocional de mujeres principalmente en espacios públicos, laborales e incluso institucionales. Pero el dato más inquietante lo proporciona el Observatorio Ciudadano de Chiapas: en 2024, el acoso sexual creció más del doble respecto a 2023, con una concentración particular en municipios como Tuxtla Gutiérrez, donde la tasa pasó de 24.5 a 30.4 casos por cada 100 mil habitantes.
A pesar del aumento de denuncias, señaló el abogado, las sentencias firmes siguen siendo una excepción. De acuerdo a cifras federales, en el país menos del 10% de las denuncias por acoso sexual en dependencias públicas llega a una sanción. En Chiapas, el panorama no es diferente.
La entidad, según la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH, 2021), registró un 96.3% de mujeres que sufrieron algún tipo de violencia a lo largo de su vida y no solicitaron apoyo ni presentaron quejas o denuncias, ocupando el segundo lugar a nivel nacional.