Como lo marcan las leyes de la coyuntura política y reza el refrán popular “a río revuelto, ganancia de pescadores” y es que cuando el triunfo de la Dra. Claudia Sheinbaum está más que perfilado para el 2024, son muchos los que se acercan con la finalidad de “sumarse” al esfuerzo para hacerse de un espacio en el panorama político actual.
Oaxaca fue el escenario en el que días pasados le acercaron a la doctora Sheinbaum a expriistas rancios, corruptos, manchados y cuestionados. Estos expriistas redentos, han ocupado cargos de primeros órdenes federales, estatales y municipales. También fueron parte de momentos oscuros de la política local y nacional.
Doctora, no los necesitas, hoy estás en condiciones de ganar bien sin meter personas sin lealtades, ni principios. Eviel Pérez, exdiputado, exsenador, exsecretario de desarrollo social, y exsubsecretario de desarrollo cuando la estafa maestra, es uno de los que quiere aprovechar la coyuntura para lavar su mal nombre. Mariana Benítez, que también fue abucheada durante el evento oaxaqueño, quiere que se borre de la memoria que fue parte del equipo peñanietista, cercana a Murillo Karam y una de las defensoras de la llamada “verdad histórica” sobre los 43 estudiantes normalistas de la Escuela Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa.
Doctora Claudia, no dejes que te engañen. Estos personajes no te suman nada; es más, te traerán problemas, conflictos, rencillas, odios, mentiras. Porque así son estos personajes. Hoy es Oaxaca, pero seguramente te querrán ir sumando este tipo de “políticos” por el resto del país. No te dejes, no dejes que se te suba el muerto.
Dra. Sheinbaum, recuerda lo que decía Marco Aurelio: "La opinión de 10,000 sujetos no tiene ninguna importancia cuando no saben de lo que hablan". Lo mismo pasa con las adiciones, el que sumes 10,000 sujetos no tienen ninguna importancia cuando van contra tus principios y estos que sumaste, roban, mienten y engañan al pueblo.
Es el momento de mantener los ojos bien abiertos y las puertas vigiladas. En Oaxaca y en todo el país habrá intentonas por aprovechar el momento político e integrar a su campaña a oscuros personajes que están urgidos de “purificarse” y no hay mejor oportunidad que ésta.
Haga caso al sentir popular que bien conoce a personajes como estos, que sin poca ni más vergüenza hoy se presentan como si en el pasado no hubieran sido azote de la democracia y de la sociedad, deje que expíen sus culpas políticas.
Desde este espacio mi llamado a no recibir “escombro político”, usted Doctora no lo necesita para hacerse del triunfo, que esta segunda etapa de transformación se distinga por no dar cabida a oportunistas que apelan a la desmemoria de la ciudadanía y que asaltan con politiquería barata las estructuras del proyecto que encabeza. Lo firmo y lo confirmo, no los necesita ni para ganar ni para gobernar.