En 1823 el Ministro de Guerra, General José Joaquín de Herrera, expidió el decreto por el que se crea el Colegio Militar y ordena que se establezca en la Fortaleza de San Carlos en Perote, Veracruz. En el año de 1841, después de varios cambios de instalaciones, se trasladó al castillo de Chapultepec y fue en 1847 cuando se enfrentaron al ejército invasor de Estados Unidos. Todos conocemos la historia de los niños héroes, ganando en ese momento la categorización de Heroico Colegio Militar. En 1920 después de nuevamente varios cambios de instalaciones se restablece el Heroico Colegio Militar en Popotla, y es hasta el 13 de septiembre de 1976 que se inauguran las nuevas instalaciones en donde actualmente se encuentra el Heroico Colegio Militar en Tlalpan, Ciudad de México.
La vida de los cadetes que aspiran a ser oficiales del Ejército Mexicano no es nada parecida a la que tratan de hacer creer sus críticos o películas difamatorias, por lo que les compartiré mi experiencia como estudiante de este plantel.
Mi experiencia en los años 90´ tenía su peculiaridad, porque éramos jóvenes de 15 años en su mayoría, todos sabíamos que al lograr entrar al Colegio Militar nuestra vida daría un giro de 180 grados, la cual sería dura, porque en comparación a la vida normal de un estudiante civil, todo sería muy diferente. Mientras los de mi generación de la vida civil estaban en fiestas, con calificaciones de panzazo y sin estar internados, yo y mis contemporáneos estábamos haciendo caminatas de 20 kilómetros con equipo todos los días viernes.
En forma muy general las actividades que se realizaban en aquellos días eran los siguientes:
1. Al toque de diana deben levantarse, tender su cama, vestirse y prepararse a la instrucción desde las 05:00 horas, con uniforme de diario y botas.
2. Después pasan al comedor y al salir tienen de 10 a 15 minutos para llegar al área de las aulas, donde se reciben las materias civiles en la mañana.
3. A las 12:00 horas ya deben estar listos para realizar educación física, mediante una tabla de calentamiento físico y una tabla de Tae Kwan Do diariamente; se organizan en grupos pedagógicos o compañías para integrar grupos deportivos o para correr o realizar acondicionamiento físico en forma colectiva.
4. Una vez que termina el acondicionamiento físico, se preparan para el segundo tercio del comedor, para pasar al turno vespertino para recibir las materias militares.
5. Después había que prepararse para la instrucción de la tarde pasar lista, efectuar un desfile, pasar a desarmarse a las compañías para finalizar hacia el comedor.
6. Una vez que pasabas al tercer tercio, los cadetes tienen de las 19:00 a las 21:00 horas para realizar sus tareas y actividades como lavar, planchar y bolear sus uniformes, etc.
7. A las 2100 horas se da el toque de silencio, se establece el servicio de vigilancia de la cuadra y se apagan las luces, el personal que requiere más tiempo, se traslada a la parte de los mezanines de cada compañía y podía estar hasta las 23:00 horas para terminar sus tareas, en el mes de septiembre se puede extender el horario para la preparación del desfile. Cabe señalar que en 1992 el Colegio Militar recibió una Mención Honorífica por la forma de marchar durante este desfile y que quedó como un hecho histórico del Colegio Militar.
Como pueden observar, las actividades de un cadete son bastantes y cada día se avanza con sus materias. En comparación con otros planteles civiles, aquí si repruebas te dan de baja, si acumulas puntos de mala conducta te dan de baja, si cometes un delito te abren tu carpeta de investigación y te dan de baja, luego entonces, no puedes darte el lujo de cometer errores. Por esta razón muchos no logran adaptarse y la mejor justificación es decir que hubo abusos (que no fueron denunciados), por lo tanto, son dichos de oídas que carecen de valor. Con estas palabras, no busco justificar los abusos, porque al contrario, yo he denunciado en tiempo y forma a quienes han violado las leyes y reglamentos militares. Esa es la gran diferencia de quien solo difama pero que no denuncia formalmente.
Todos aquellos que buscan ingresar al Colegio Militar es porque tienen vocación de servicio y desean abrazar la carrera de las armas, obtener el día de hoy el grado académico de una licenciatura y poder aspirar a ascender en los diferentes grados dentro del ejército. Una vez que han conocido las actividades de un cadete, lo que no dicen los desertores, los que se dan de baja o los que quedaron traumados y resentidos, es que cuando incumples una norma o rompes la disciplina, los cadetes antiguos, algunos toman buenas o malas decisiones. Estas prácticas no están autorizadas, pero sin embargo, se realizaban bajo su propia responsabilidad, en aquellos días se le conocía a estas prácticas como la famosa “pócima” o “ladilla” para que el cadete aprendiera que tenía que cumplir.
Dentro de estas prácticas también hubo excesos, como lo fue en 1993 cuando falleció un cadete en el comedor debido a un golpe que recibió y le provocó una Bronco-aspiración, el cadete novel falleció y el cadete infractor se enfrentó a la justicia militar por los hechos, siendo dado de baja por el delito que cometió.
Ahora bien, dentro de los castigos oficiales que había en ese tiempo, por ejemplo, era el famoso metro, en donde bajaban a correr de las 21:00 a las 23:00 horas las compañías que no marchaban bien o los grupos pedagógicos que incumplían a las normas, además del arresto, que provocaba que el cadete no pudiera salir a disfrutar de su descanso (franquicia) de fin de semana.
El cadete que incumple es porque no se adapta, y por eso muchas veces provocaba que los miembros de su antigüedad en el pelotón tuvieran problemas, lo que provocaba disgusto entre sus compañeros porque no lograba cumplir y, en algunas canciones eran ellos mismos los que le daban “pócima”, por lo que muchos preferían desistir. Esto es lo que la mayoría de estas personas nunca quiere aceptar, que no pudieron adaptarse, que no pudieron cumplir con lo mínimo, y por lógica se la pasaban cometiendo error tras error.
Debido a esta situación la temática de algunas películas no reflejan una realidad, sino más bien, dicen verdades a medias. La opinión del productor de “Heroico” provoca una gran falta de respeto por los que sí lograron graduarse, ya que la opinión ha sido subjetiva y le faltan muchos elementos. Por ejemplo, se observa una escena en el tráiler de la película, donde se ve un grupo de jóvenes que están desnudos y son golpeados con una tabla, este adiestramiento es parte de la fase de prisioneros de guerra del curso básico y especializado de Fuerzas Especiales, que al día de hoy, se imparte como parte del adiestramiento básico militar y que en mis tiempos solo se impartía a los oficiales recién egresados, en un curso de ambientación, en donde se les indicaba cuál es la conducta a seguir cuando cae prisionero de un enemigo, tal como sucedió en la Primera y Segunda Guerra Mundial.
Hoy por ejemplo, tenemos el orgullo de que en México se celebre anualmente un concurso a nivel internacional denominado “Competencia Internacional Chimaltlalli”, el cual congrega a estudiantes de los planteles militares de nueve países del continente, en un torneo que medirá los avances en su capacitación física, táctica y ética. Los jóvenes cadetes ponen todo su empeño para poner en alto el nombre de México.
Por otro lado; los reglamentos militares son muy claros, por ejemplo:
“…Ley de Disciplina del ejército y FAM.
Artículo 14.- Queda estrictamente prohibido al militar dar órdenes cuya ejecución constituya un delito; el militar que las expida y el subalterno que las cumpla, serán responsables conforme al Código de Justicia Militar…”
Esto que quiere decir, que antes de ser militar somos hombres y el reglamento establece de forma clara y precisa que todo aquel que dicte o cumpla órdenes que constituyen un delito, serán sancionados conforme al Código de Justicia Militar, la ignorancia no los exime de la responsabilidad entre el superior y el subalterno.
Se imaginan por que hoy hay tanto civil que desobedece las propias leyes reglamentarias, toda la corrupción y burocracia que existe en las dependencias, en todos aquellos políticos que se venden al mejor postor por el voto que representa a los ciudadanos, todas aquellas autoridades civiles que abusan de su poder, de la dilación en la persecución del delito y la impartición de la justicia,
Por todo lo anterior, porque tendría que tener una validez la opinión de algunos desertores, dados de baja y traumados, ¿porque no fueron hombres de honor y denunciaron en su momento? Como lo he dicho, existen bastantes casos en donde muchos fueron sancionados y dados de baja por mala conducta o haber ejercido algún tipo de abuso, entonces ¿quiénes son los cobardes?, ¿Quiénes son los que viven esclavos de su frustración al no haber podido lograr graduarse del Colegio Militar, de donde han salido los Generales, Jefes y Oficiales que hoy conforman los cuadros del Ejército Mexicano y hoy también Guardia Nacional?
Hoy esta película, es una falta de respeto a quienes han luchado en cada promoción, en cada curso de especialización, en cada operación a donde sale el personal militar, en cada militar caído en el cumplimiento de su deber, en cada familia que queda en espera de aquel padre, hermano o hijo que cumple con su misión con la patria.
Hoy el tejido social está tan descompuesto, resulta que quienes sí cumplen son juzgados y los delincuentes liberados.
No puede pasar desapercibido el hecho de que en la celebración por los 200 años del Heroico Colegio Militar, estuvieron presentes el Secretario de la Defensa Nacional y la plana mayor de la SEDENA, pero también los ex secretarios de la defensa nacional que aún siguen con vida. Muy a pesar de los críticos y de quien escribe esta columna, ellos forman parte de la plana mayor de la Secretaría de la Defensa Nacional, como asesores del alto mando. Esto de acuerdo al decreto presidencial emitido por el ex presidente Luis Echeverría del 30 de enero de 1976, que además establece que no obstante que los secretarios de la defensa que terminen su encargo no pasaran a la situación de retiro para que sean aprovechados sus servicios y experiencia como asesores de quien sea secretario de la defensa nacional, lo que les da de facto un manto de impunidad vitalicia.
Por último, esta semana la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México emitió la recomendación 007/2023 en contra de la Secretaria de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México por tortura y detención ilegal contra el Subteniente del Ejército Mexicano Luis Ángel, reconociendo que mas allá de la investidura militar un elemento de la institución tiene derechos humanos; distinto a lo que opinan los pseudo luchadores de derechos humanos de nuestro país que prefieren defender a delincuentes que a policías, marinos o militares. Es un triunfo histórico el que se reconozca que la policía de la Ciudad de México utilizó la tortura, falsos testimonios, allanamiento de morada, abuso de autoridad, rendir falso testimonio y falsear declaraciones ante la autoridad judicial, por querer imputar un delito falso a un oficial del ejercito mexicano, que además fue absuelto por un tribunal de enjuiciamiento de la Ciudad de México. En próximos días veremos al secretario Omar García Harfuch pronunciarse respecto a esta recomendación emitida por la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad.