¿No hay llenadera en el Instituto Mexicano del Seguro Social? Aquí ya les he contado del oscuro e interminable túnel de anomalías en los procesos de licitación de bienes y servicios: medicamentos, equipo médico, uniformes, ambulancias y hasta consultorías externas para ayudarlos –es obvio que no saben cómo– a “combatir la corrupción”, además de muchos etcéteras.
Prepárense para otra historia sospechosa en la dependencia que dirige Zoé Robledo, esta vez con la adquisición de anestesia para los próximos dos años. ¿Ya tomaron aire? Bueno, pues ahí les va.
Apenas hace unos días, para ser exactos el 8 de agosto por la tarde, la Unidad de Adquisiciones del IMSS emitió el fallo correspondiente a la licitación número LA-50-GYR-050GYR988-T-9-2023, documento en mi poder, para asignar qué creen: nada más y nada menos que el servicio médico de anestesia en todas las instalaciones del Seguro Social por los próximos dos años. Ahí nomás.
Pónganme atención:
Estamos hablando de 23 partidas diferentes relacionadas con los servicios de anestesia médica, por un monto total de entre 2 mil 355 millones de pesos y 5 mil 884 millones de pesos, de acuerdo con los límites máximos y mínimos establecidos en las bases de la licitación. Una barbaridad, entre 515 mil y 1.2 millones de unidades entregables de bienes y servicios que tienen que ver con la anestesiología.
De siete propuestas que llegaron al final del procedimiento, fueron asignadas dos para ocuparse de estos contratos gigantescos: CBH+Especialistas de Innovación Médica, SA de CV, que participó junto con DMN Distribuidora Médica Ninnus, SAPI de CV, y por otro lado GNK Logística del Bajío, SA de CV.
Hasta aquí todo bien. El problema es que una de las empresas contratadas tiene relación patrimonial con el polémico empresario Adrián Cervantes, cuya marca propia, Plarre, fue descalificada, no así CBH, donde participa su exesposa, Samantha Bárcenas. ¡Todo en familia, pues!
Cervantes padre e hijo son los mismos que han sido proveedores estrella del otro instituto, el ISSSTE, a pesar de haber enfrentado inhabilitaciones y de ser materialmente vetados por la ‘4T’. Como lo oyen, estos hombres, con su empresa holding llamada Vitalmex, superaron investigaciones y multas por prácticas anticompetitivas y lograron un supercontrato por adjudicación directa de 2 mil 700 millones de pesos, apenas en abril pasado, con la dependencia del innombrable Comandante Z, Pedro Zenteno, para proveer de insumos para cirugía cardiovascular. Sin embargo, se sabe que han llegado instrucciones palaciegas para apartarlos.
O sea, mientras que los quieren echar del ISSSTE los contratan en el IMSS. ¡Quihúboles! ¿Qué pretende Zoé con brincarse las trancas? Ya lo sabremos.
Por lo pronto, la empresa de la familia Cervantes puede alegar que no le falta experiencia para ser proveedora de servicios anestesiológicos (ya había sido favorecida el sexenio anterior con contratos para anestesia en el mismo ISSSTE). El problema, agárrese, es que los amigos del Seguro Social le validaron en esta última licitación de hace unos cuantos días, cotizaciones que están un promedio de 35% por arriba de lo que presentaron otras empresas en el proceso. Menos mal que sacaron pañuelito blanco, ¿o no?
La corren por grabar ratón
Por si fuera poco, hay indignación en contra de la Dirección General del ISSSTE por una gran injusticia. ¿Recuerdan que les di a conocer en mis redes sociales imágenes de un ratón (literal, pero de cuatro patas) rondando en instalaciones hospitalarias del instituto en Santa Rosalía, BCS?
¡Pues resulta que la enfermera que grabó tales escenas fue despedida! La servidora pública se llama Berenice Camarillo Zambrano y fue fulminantemente separada de su labor por supuestamente haber incurrido en “falta de probidad”.
Y yo le pregunto a Pedro Zenteno: ¿es falta de probidad documentar que, aunque digan lo contrario todos los días, las condiciones hospitalarias públicas de este país distan mucho de considerarse parecidas a las de Dinamarca? Espero que la Función Pública tome cartas en el asunto y la enfermera Camarillo sea reinstalada de inmediato.
¿Y Zulma? El colmo de Zenteno
Para cerrar estas historias de terror, deberán tomarse un calmante fuerte. ¿Recuerdan el reciente atentado en Iguala en contra de Zulma Carvajal Salgado y de su esposo, Humberto del Valle, que lamentablemente falleció?
Bueno, pues debo recordarles que la señora Carvajal, sobrina del oscuro Félix Salgado Macedonio, y quien, sin pruebas, acusa al actual alcalde de Iguala (puesto que añora) del ataque del 6 de agosto, trabaja en el mismísimo ISSSTE, donde fue inhabilitada por corrupción cuando fue administradora en el Hospital 1 de Octubre y lucró con la pandemia, pues no sólo se llevó tapabocas para revenderlos, sino también hizo negocios con los proveedores. Así pues, con esta ética y moral, fue rescatada por el Comandante Z, nada más y nada menos que como su secre privada, con un sueldo de 80 mil pesotes mensuales.
Con amistades y familia ligadas a barbaridades criminales en Guerrero, la reina cobra en el ISSSTE y en el DIF guerrerense como aviadora. ¡Quihúboles!
La columna de Lourdes Mendoza Peñaloza se publicó originalmente en El Financiero, reproducida aquí con autorización de la autora.a
* Lourdes Mendoza Peñaloza es una periodista mexicana especializada en finanzas, política y sociales, con más de 20 años de experiencia en medios electrónicos, impresos, radio y televisión.