PORFIRIO MUÑOZ LEDO

Porfirio Muñoz Ledo, su legado

El legado de Muñoz Ledo fue relevante para la historia del país. | Marco Adame

Escrito en OPINIÓN el

Porfirio Muñoz Ledo fue un actor central en la vida política de México por más de seis décadas. Su influencia y su legado fue relevante en los gobiernos priistas y en momentos cruciales del cambio democrático, luego de la ruptura al interior del PRI, del grupo político que conformó el Frente Democrático Nacional en 1988.

Sus ideas políticas, fuertemente influenciadas por la social democracia, enarbolaron la libertad, la democracia, el estado de derecho y la razón política como ejes para la defensa de la republica -tarea a la que dedico su vida- frente a los excesos y el abuso del poder de una sola persona. La discrepancia y la crítica certera a la deriva autoritaria del régimen actual, del que formó parte, lo consagran como un demócrata liberal de gran influencia, en especial,  en el largo proceso de cambio político que ha vivido el país en los últimos años.

Su oposición a favor de una transición pactada, fue un antecedente muy valioso en la formación del bloque opositor que hizo posible la instalación de la Cámara de  Diputados en 1997. Ante la resistencia del gobierno de Ernesto Zedillo para aceptar el funcionamiento de la primera Cámara plural, Carlos Medina Plascencia y Porfirio Muñoz Ledo, encabezaron las negociaciones  para su instalación, apoyados por el llamado G4, un bloque legislativo de oposición formado por el PAN, PRD, PT y PVEM.

La LVII Legislatura fue un parteaguas para la democratización de nuestro país, ya que por primera vez el PRI perdió la mayoría absoluta del Congreso. Muñoz Ledo fue electo presidente de la Mesa Directiva y le correspondió responder el informe presidencial, sus palabras aún resuenan en todas las referencias sobre ese momento histórico y sus consecuencias hasta nuestros días.

En su respuesta al presidente de republica, utilizó la fórmula -adaptada- del juramento de los reyes de Aragón, para hacer valer la soberanía popular, la división de poderes y la dignidad del Congreso. Con la elocuencia que le caracterizaba dijo: “Nosotros que somos y valemos tanto como vos, pero que todos juntos somos más que vos…” En esa sesión histórica, remató su intervención asumiendo el sentir nacional previo a la alternancia que sucedería en el año 2000… “a partir de ahora, y esperemos que para siempre, ningún poder quedará subordinado a otro, en la defensa de los derechos de los ciudadanos y de la democracia”.

En la LXIV Legislatura -luego de las elecciones del 2018 y el triunfo del presidente López Obrador- como presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados luchó por la división de poderes, por el valor del diálogo y de las instituciones al exigir, dentro y fuera del Congreso, el respeto a la dignidad parlamentaria y al valor de la palabra, sobre todo ante los atropellos de la Junta de Coordinación política, encabezada por sus correligionarios de Morena.  En todos los casos busco el diálogo y la negociación, aún en momentos en que la Cámara fue sitiada y no se contó con el apoyo del gobierno de la Ciudad de México, encabezado por su propio partido.

De cara a las elecciones del 2024, la firme posición que asumió hasta sus últimos días frente a la deriva autoritaria del gobierno lopezobradorista, debe ser parte indispensable del debate y de la exigencia de miles de ciudadanos, organizaciones y partidos políticos, para defender la democracia y las libertades, deseando que, como recordaba Muñoz Ledo, “la discusión de las ideas agote las diferencias, no a los interlocutores”.