Delfina Gómez puso fin a un centenario PRI en el Estado de México. Arrinconado, con un liderazgo cuestionado como el de Alejandro A(m)lito Moreno, el PRI se reduce a Durango y Coahuila. A ese paso se acerca peligrosamente a ser quinta fuerza, por detrás de Movimiento Ciudadano o el Partido Verde. Y Morena se alza con más de 20 gubernaturas, sumadas con sus aliados.
Lo que llamó la atención, pese a los resultados obtenidos, fue el persistente nerviosismo en los cuarteles de Morena. Ni parecía que iban 20 puntos arriba de Alejandra del Moral en el Estado de México. Y el caso de Coahuila está para el diván: el Partido Verde y el Partido del Trabajo postularon candidatos, Lenin Pérez y Ricardo Mejía Berdeja… para que a unos días de la elección los desconocieran. En el paroxismo, Lenin Pérez y Mejía Berdeja también los desconocieron.
El presidente Andrés Manuel López Obrador es la gran locomotora que jala vagones y vagones. Pero el norte siempre lo ha despreciado. Incluso en los tiempos de su otrora Partido de la Revolución Democrática. Hoy los estados norteños de Chihuahua, Coahuila y Nuevo León han desdeñado a los enviados de la autodenominada 4T. Los casos de Sonora y Tamaulipas merecen una lectura aparte.
Pero el bajío, incluido Jalisco y algunas otras partes como Yucatán, López Obrador realmente no arrastra multitudes. Así que la más desastrosa derrota del PRI en el Edomex apenas va a servir para poner un poco de pegamento a la alianza rumbo al 2024 entre el PRI, PAN y PRD. ¿Qué podría despegarla? Una eventual unión entre el PAN y MC de Dante Delgado. Lo que vaya a suceder en los próximos meses aún es de pronóstico reservado.
No hay mayor garantía de que no ocurra un cisma en el seno de Morena. Aunque López Obrador le regaló 12 minutos de plática a Ricardo Monreal, sólo ellos dos, el pasado 29 de abril, no implica que no haya rupturas. Hasta donde se sabe, el presidente López Obrador les ha dicho que de entre Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard, Adán Augusto López Hernández y Ricardo Monreal saldrá quien le suceda en la presidencia. Otros señalan que el rol de Adán Augusto sólo es para colarse al segundo lugar en las encuestas para reafirmar el empujón a Ebrard. Ya se verá hasta dónde es real todo esto.
Y en medio está Movimiento Ciudadano de Dante Delgado. El enigma del veracruzano en torno a cuál es su verdadero juego lleva a pensar que su juego es en realidad en favor de Morena. Todo su entorno en MC lo niegan. Incluso hay quien aventura que el propio Dante Delgado y su MC vayan por la gubernatura de Veracruz en el 2024.
Por lo pronto hay 30 aspirantes a suceder a AMLO. Aunque algunos suman más, en realidad algunos de esos nuevos y de los 30 no jalarían a sus mítines a nadie, tendría más mirones un atropellado.
Lo que sigue ahora es ver la metralla interna por la candidatura presidencial en Morena, con sus aliados costosísimos el Partido Verde y el Partido del Trabajo. Y en la acera de enfrente las cosas no están mejor, al contrario, también están en el jaloneo.
Este domingo apenas pasadas las 18 horas las candidatas salieron en conferencia de prensa. Alejandra del Moral lo hizo antes. Ella misma se autoproclamó ganadora. Pocos minutos después lo hizo Delfina Gómez, pero quien habló fue Mario Delgado, el dirigente. Después lo haría ella leyendo un discurso para agradecer el voto en su favor.
Punto y aparte. En la CDMX las cosas se están moviendo de manera interesante. Sandra Cuevas anuncia que no buscaría ser candidata y se inclina en favor de panistas como Santiago Taboada.
Punto final. Descanse en paz Ricardo Rocha.