Se actuó de manera rápida, debido a que eran norteamericano. Tenemos muchos secuestros y duermen el sueño de los justos...
El secuestro a mano armada de cuatro ciudadanos norteamericanos en Matamoros, Tamaulipas, abrió los programas noticieros de todas las cadenas de televisión de Estados Unidos (EU) la tarde noche del lunes 6 de marzo: ¡una bomba! Inédito, quizá sólo comparable con el deceso del ex agente de la DEA Enrique Camarena Salazar en febrero de 1985, cuyos costos seguimos pagando como país.
Los medios transmitieron una y otra vez el video donde de manera impune y a la vista de todos los sicarios subieron los cuerpos de tres hombres, presuntamente sin vida, y una mujer herida a una camioneta para luego escapar, sin que ninguna autoridad hiciera nada.
Días después supimos que las personas secuestradas eran Latavia McGee, Shaeed Woodard, Zindell Brown y Eric James Williams, ciudadanos afroamericanos originarios de Carolina del Norte.
Ese día la autoridad de Tamaulipas enmudeció, emitieron confusos comunicados de que nadie saliera de sus casa;
No explicaron si ambos eventos estaban relacionados.
La autoridad local, de hecho evadió hablar de la violencia y cuando por fin lo hizo se debió a presiones a la alerta que emitió el Buró Federal de Investigaciones (FBI) la noche del domingo 5 de marzo. A partir de ahí hubo una gran movilización de elementos del Ejército, la Guardia Nacional, las policías locales, la Fiscalía e incluso la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas.
Poco a poco empezamos a tener información… Según el FBI, el viernes cuatro ciudadanos estadounidenses viajaron desde Brownsville, Texas, a Matamoros, a bordo de una camioneta blanca con placas de Carolina del Norte, y momentos después de ingresar a México fueron agredidos a tiros. Hay imágenes de una persecución de casi media hora, después los balazos y el secuestro.
Reacción en la Casa Blanca
El lunes 6, Karine Jean-Pierre, vocera de la Casa Blanca alzó la voz y dijo que estos ataques son inaceptables. El presidente Joe Biden fue informado del secuestro.
El tema llegó a la mañanera del lunes
El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) indicó que el FBI estaba ya trabajando con Rosa Icela Rodríguez: "La información que tenemos es que cruzaron la frontera para comprar medicamentos en México y hubo una confrontación entre grupos y fueron ellos detenidos (…) Todo el gobierno está trabajando en eso”, declaró AMLO.
Horas después llegó a Palacio Nacional el embajador Ken Salazar y permaneció largo rato, no sabemos qué comentaron, pero era evidente que la orden de Washington era presionar duramente a López Obrador por el asunto Matamoros. La web de la embajada de EU emitió un comunicado “No tenemos mayor prioridad que la seguridad de nuestros ciudadanos. Éste es el papel más fundamental del gobierno estadounidense”.
¡La presión de EU fue dura!
Y es que además, este incidente ocurre en medio de fuertes presiones para clasificar a los cárteles mexicanos con la categoría de terroristas con lo que ello implique.
Por fortuna cuatro días después los cuatro ciudadanos fueron encontrados, pero en condiciones lamentables, y no sabemos cómo fue, si fue gracias al trabajo coordinado o a que el crimen organizado dijera donde estaban para calmar las cosas. La plaza se había calentado.
"Los encontramos! dijo el gobernador a través del celular en la mañanera
En la mañana del martes todo mundo se enteró de manera directa gracias a una "casual" llamada telefónica del gobernador Villareal a Rosa Icela Rodríguez, justo cuando Adriana Flores, reportera de IMER preguntaba al presidente por el caso, eran poco antes de las 9 horas...
AMLO le pasó la pelota a Rosa Icela: "A ver (...) informales”.
– "Es que estoy con el gobernador, y que ya los encontraron", respondió en voz baja...
– “¡Pues informa!”, le ordena AMLO.
– “¿Lo quiere oír, mientras yo le voy informando aquí?”, le dice la secretaria con timidez.
– "A ver, espérate, vamos de una vez", dice AMLO, “(Américo ) te están escuchando aquí en la conferencia. ¿Puedes informarnos?”, le pide el presidente.
– "Pues, señor, siguiendo sus instrucciones (SIC, ¿puede el presidente darle instrucciones a un gobernador?) y el trabajo conjunto, no hemos dejado desde el día viernes de estar atentos de este problema, y hoy, aproximadamente hace una hora, nos notificaron que había indicios de haber visto a los cuatro ciudadanos norteamericanos, y hace 35 minutos (pasados de las 8 horas) ya fue plenamente confirmado por la fiscalía".
Ahí quizá hubiera quedado la llamada, para luego hubo una conferencia para informar los detalles. Pero agregó, como si fuera reportero que transmite para un canal al aire y no quiere perder rating
– "De los cuatro, hay dos de ellos fallecidos, una persona herida y la otra con vida. Y ahorita van las ambulancias y el resto del personal de seguridad a dar el apoyo".
– “Muy bien, Américo. Muchas gracias”, le responde AMLO.
– “¡A sus órdenes!”, le responde al gobernador como si fuera subalterno.
Patético.
Minutos después el fiscal Irving Barrios Mojica, quien no acostumbra a usar la red social y nada informó de los hechos de Matamoros, emitió un par de tuits pasadas las 9 horas, comentando que fueron encontradas las personas “Derivado de las acciones de búsqueda conjunta…”
En efecto, horas después hubo conferencia de prensa sin ofrecer más detalles de los que circularon en la red.
El fiscal Barrios señaló que el ataque parece ser producto de una confusión y no una agresión directa, debido a que "no hubo rescate, no tenemos un número determinado de participantes exacto" (y) el grupo delictivo que se tiene conocimiento que opera ahí es el grupo delictivo del Cártel del Golfo y los heridos son los que tenemos al momento, lamentablemente hubo la pérdida de una connacional en estos hechos", dijo.
Error en la comunicación por el tema de las víctimas.
Creemos que haber informado tan crudamente en la mañanera fue un error, hay formas de trato a las víctimas; quizá Rosa Icela debió haber pasado una tarjeta al presidente y éste informar que se habían encontrado a las personas secuestradas, sin decir si estaban muertas o vivas.
Incluso podemos ver como en EU cuando le preguntan a John Kirby vocero del Consejo de Seguridad Nacional evadió dar detalles sobre los fallecidos, porque el deseo de Washington, añadió, es “respetar la seguridad y la privacidad” de las familias supervivientes”.
Las reacciones fueron muchísimas
El gobierno de EU prometió que buscará hacer justicia "Vamos a trabajar de cerca con el gobierno de México para que se haga justicia en este caso", dijo John Kirby, al hacer un primer pronunciamiento.
La presión sobre México con el tema de los republicanos con el posible aval de la Casa Blanca para clasificar a los cárteles mexicanos con la categoría de terroristas empieza a permear lamentablemente (comparto un comentario difundido en la red)
Los cárteles son delincuencia organizada y hay muchos mecanismos nacionales e internacionales para combatirlos eficazmente, no hay necesidad de colocarlos en una categoría que no corresponde.
Ahora, no es aplicar la Ley Patriota, pero sí tomar medidas más duras que incluso podrían violentar el derecho internacional.
¿Lo puede hacer Washington? ¡Lamentablemente si! Pero los costos serían altísimos, no creo que Biden se atreva, pero en 2024 hay elecciones y el tema da votos.
AMLO se lanzó contra los medios de EU
En ese contexto, en la misma mañanera del martes 7 y sin conocer los detalles el C. Presidente lamentó los hechos y envió condolencias a las víctimas, al pueblo y al gobierno de EU "Y vamos a seguir haciendo nuestro trabajo para garantizar la paz y la tranquilidad”.
Pero aprovechó para criticar el manejo del caso en medios de comunicación a quienes acusó de amarillistas, y se atrevió a lanzar mensajes de “cómo en EU también matan mexicanos y los medios no hacen escándalo, como en esta vez”.
¿Cómo fue?
Dijo que "hay gentes que opinan distinto y además hay también intereses partidistas, yo diría politiqueros, hay gente muy hipócrita que, por ejemplo, lamenta estos hechos, los utiliza con propósitos políticos, trafican con el dolor humano, con el dolor de la gente, pero sus propósitos son otros".
Y agregó: "Llama mucho la atención que se dan estos hechos lamentables, y todos los medios en EU manejan de manera amarillista la información, no así cuando asesinan a mexicanos en EU, callan como momias".
Y se fue contras los cárteles en EU "Nosotros no nos metemos a ver qué hacen las bandas en Estados Unidos que distribuyen el fentanilo o cómo se distribuye la droga en Estados Unidos. ¿No hay redes? ¿No hay cárteles? ¿Quién vende la droga?”, pregunta AMLO, y señala que "ese es un asunto que tienen que resolver las autoridades estadounidenses".
Y tiene razón el presidente, pero creemos que la mañanera no es el foro para decirlo, ni el momento; es echarle más leña al fuego.
El presidente debe moderar sus comentarios, no le habla solo a sus seguidores, sino a todos...
Las relaciones con Washington no están en su mejor momento. La presión es fuerte. ¡Mesura señor presidente! quien pierde en este tema es México, no es Andrés Manuel López Obrador, usted se va en un año y medio.
El caos de Kiki Camarena fue muy mal manejado y han pasado 38 años y los costos siguen ahí...