Por décadas, López Obrador presumió una presunta superioridad moral que, en los hechos, no era más que una patraña “engañabobos”.
Y es que sus alardes de honestidad nunca coincidieron con su ambición desmedida, con sus habilidades como corrupto y corruptor y menos con sus probadas mañas como extorsionador de grandes ligas.
Así, por ejemplo, engañaba a todos con discursos facilones como el de “la honestidad valiente”, de “barrer la casa de arriba para abajo”, el “no somos iguales” y extremos estultos como “solo traigo 200 pesos en la bolsa”.
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Es decir, López Obrador pregonaba y presumía una supuesta honestidad que, sin embargo, nunca cuadró con su holgada forma de vida y la nada probable y menos probada capacidad de trabajo remunerado.
Lo cierto, sin embargo, es que el actual presidente mexicano siempre vivió del chantaje, del moche y de la extorsión; lacras que hoy, desde Palacio sigue ejercitando a su antojo y a los ojos de todos.
Y los mejores ejemplos son la rifa del avión presidencial, el robo de los fondos del Seguro Popular una veintena de fideicomisos oficiales y el intento por despojar al Poder Judicial de otro millonario paquete de fideicomisos.
En pocas palabras, resulta que el presidente mexicano es uno de los más depurados ladrones de todos los tiempos; pillo que lo mismo estafa a sus camaradas de partido, que roba a empleados públicos y hasta chantajea a los hombres de empresa.
Y por eso las preguntas obligadas: ¿hasta cuando, una sociedad como la mexicana, seguirá tolerando y solapando a un pillo confeso como López Obrador? ¿Qué tiene que pasar para que los atolondrados mexicanos abran los ojos sobre el ladrón al que llevaron al poder presidencial?
Pero vamos a las pruebas.
En efecto, el señor López Obrador, su pandilla criminal y sus fanáticos pueden mentir y engañar todo lo que quieran sobre las corruptelas de la prole, la claque y la corte de AMLO, sin embargo, los datos duros son implacables.
a).- Si López Obrador no oculta nada, por qué la obsesión por destruir el Instituto Nacional de Transparencia y Acceso a la Información (INAI).
b).- Sí el presidente mexicano no tiene nada que ocultar, por qué la SCT reservó por 5 años los audios del accidente de Martha Erika Alonso y Rafael Moreno Valle, en febrero de 2019.
c).- Sí AMLO es honesto, por qué reservó por 5 años el Plan Maestro, los Planos de Construcción y los Expedientes de Gastos del AIFA, en 2019, 2020, 2021 y 2022.
d).- Si el gobierno de López Obrador no tiene nada que ocultar, por qué reservó por 5 años el Informe del caso Ovidio Guzmán.
e).- Si el presidente AMLO no oculta nada, por qué reservó por 5 años el informe del homenaje en Bellas Artes al pederasta Naason Joaquín García.
f).- ¡Si López Obrador no tiene que ocultar, por que su gobierno reservó por 7 años la investigación de las corruptelas de su amigo Carlos Lomelí, en 2019?
g).- Si el mandatario no tiene nada que ocultar, por qué reservó por 5 años el expediente Tepochica, donde murieron 14 civiles, en 2019.
h).- Si AMLO nada oculta, por qué reservó por 5 años la agenda de Lozoya cuando era director de Pemex.
i).- Si el presidente no esconde nada, por qué la FGR reservó por 5 años el expediente del caso Odebrecht.
j).- Si no tienen nada que ocultar, por que el gobierno de AMLO reservó por 5 años el caso Fertinal, que significó la compra de una empresa quebrada.
k).- Si todo es honestidad, por qué razón, Pemex y la FGR, reservaron por 5 años los contratos de inversión de la empresa Nitrogenados.
l).- Si nada ocultan, por qué reservar por 5 años las bitácoras de vuelos de funcionarios federales en helicópteros de la Marina, durante 2022 y 2023.
m).- Si no son corruptos, por que el gobierno federal ordenó reservar por 5 años la información sobre el mantenimiento de la L12 del Metro.
n).- Si son honestos, por qué reservaron por 5 años todos los contratos para la compra de las vacunas contra el Covid-19.
o).- Si no espían a nadie, por qué la Sedeña reservó por 5 años los contratos de Pegasus, el sistema de espionaje.
p).- Por que la SEP reservó, por 5 años, el expediente del Colegio Rébsamen, en donde murieron 26 personas, incluidos 19 niños.
q).- Y si AMLO y su gobierno no son corruptos, por qué entonces pudimos recopilar 50 pruebas de las raterías oficiales, publicadas en el Itinerario Político del pasado 13 de diciembre, titulado: “AMLO: 50 pruebas del robo institucional”.
Sí, a querer o no, el de López Obrador es el gobierno más corrupto de la historia y López Obrador es uno de los presidentes más ladrones.
Al tiempo.