Mucho ha presumido el presidente López Obrador su gobierno austero porque viaja en vuelos comerciales y come en fondas o puestos de la calle, pero lejos del discurso el gobierno ha despilfarrado millones y la baja de presupuestos responde más a la falta de dinero que a un espíritu austero. Algunos comentarios al respecto:
- Para empezar toda medida de austeridad ha sido opaca y este nuevo ofrecimiento de “austeridad franciscana” es igual; hablan de ahorrar dos billones de pesos y entregárselos a personas de bajos recursos, pero siempre en total opacidad… quizás de esos recursos es de donde salen los “apoyos” que les dieron a morenistas que fueron a la elección interna de hace dos fines de semana…
- Se cerraron Los Pinos, pero ahora el presidente vive en un palacio cuya manutención es más onerosa, se habla de que ya no hay aviones, pero se pasó de 5,829 millones para arrendamiento de vehículos en 2019 a 8,109 millones en 2022.
- También en materia de arrendamiento de edificios para oficinas públicas, en el gasto de servicios de limpieza, en el gasto de vigilancia, pagos de celulares, agencias de manejo de redes sociales y hospedajes hay aumentos considerables.
- Lo que en realidad está pasando es que estamos entrando a una crisis fiscal por falta de recaudación del gobierno y se habla de una “pobreza franciscana” porque en rubros como educación y salud sólo están pagando la nómina, mientras recortan todo presupuesto para medicinas, reparación de aulas, material médico y educativo y hasta insumos básicos.
- Por otro lado, por mucho que AMLO insista en que no ha aumentado la deuda, este gobierno no sólo se ha endeudado de forma histórica, además ya se gastó todos los ahorros que otros gobiernos habían dejado, todos los fideicomisos y han acabado con instituciones públicas y privadas con recortes que las hacen inoperantes.
- Mientras en el sexenio pasado durante los primeros 4 años el costo financiero de la deuda fue 1,693.5 miles de millones de pesos, en los cuatros años que van de este es de 2,319.3 miles de millones de pesos… eso dice más de la deuda que cualquier opinión.
- Otro barril sin fondo es PEMEX del que intentan ocultar la realidad haciendo transferencias por miles de millones desde Hacienda, pero al paso que van no han producido más y cada vez es peor porque están pagando un subsidio altísimo a gasolinas y a Diesel (y cuando lo dejen de pagar todo subirá más).
- El martes salieron las cifras de inflación y estamos arriba del 8%, la más alta del siglo y desde que ha habido alternancias. Esto quiere decir básicamente que todo es al menos 8% más caro.
- Y la austeridad del presidente López Obrador es un mero discurso. No suelo comentar nada respecto a los hijos del presidente, pero lo que se vio hace unos días deja clara la visión “austera” de AMLO: su hijo menor documentando en “Clase Premier” y con el cuerpo diplomático cargando las maletas del adolescente… y la “Casa Gris”, y los hermanos y bueno…
Hoy la austeridad del presidente se niega en los hechos y la falta de recursos se evidencia en el sector salud, en el educativo y en cada secretaría de Estado, pero eso sí; hemos gastado miles de millones en un aeropuerto al que nadie va, en una refinería que no ha refinado ni un litro de petróleo y en un tren que hasta el momento lo único que ha generado es deforestación. A un paso de una recesión, seguimos por mal camino.