Este viernes 25 de noviembre la CDMX y muchas otras capitales del país serán escenario como siempre de las expresiones de dolor, coraje, de exigencia de justicia y sed de cambio de miles de mujeres mexicanas que hoy ya no tienen miedo. Hoy en unidad y solidaridad pueden salir a gritar que en sus calles, sus trabajos, sus oficinas y el entorno en general se sienten agredidas, amenazadas o ignoradas.
Desde la capital del país es muy fácil hablar de esto, desde esta curul, desde cada medio de comunicación que me permite su espacio, sintonía o audiencia ¿pero se imaginan ser la mujer agredida en la calle más violenta de la colonia Guerrero, de la Agrícola Oriental o Santo Domingo, o haber sido agredida en la Sierra de Oaxaca, en una bodega del Edomex, en una carretera como a Debanhi?
Esas mujeres que hoy callan, que se despiertan un día y se sienten sucias, culpables, rotas, todas ellas que saben que les agredieron el cuerpo y buscan matarles el alma, son nuestro motor para salir a marchar todos los días. En un país donde cada una de nosotras esconde mil historias, y donde la efervescencia feminista nos ha hecho a todas sentir confianza y darnos el valor de levantar la voz para contar nuestra historia.
En la ciudad somos 4, 805, 017 mujeres ¿realmente creemos que están haciendo lo suficiente para salvarnos? Las calles iluminadas importan, tener policías mujeres importa, tener presupuesto para refugios importa, que les destinen programas sociales importa, que el agresor salga del domicilio importa, la línea de mujeres importa, pero el tener una Fiscalía fuerte, con suficiente personal, y que tenga como única prioridad castigar a los agresores importa aún más.
Hace unas semanas escuchábamos al Subsecretario Alejandro Encinas aceptar que los embarazos adolescentes van a la alta, 9000 niñas, 1000 embarazos no planeados diario ¿qué está haciendo este país para evitar que estas mujeres no sean violadas cuando aún son menores de edad o que tengan el conocimiento sexual suficiente para evitarlo y usar condón o cualquier método anticonceptivo? La respuesta es: poco, insuficiente de lo mucho que podría hacer.
Los mexicanos nos espantamos de Qatar pero en México hay 695 feminicidios desde 2022 y aquí aunque no nos golpea la policía por usar mal un velo, si nos detienen en las marchas, si nos aminoran en los mps, y sí muchas veces nos niegan un proceso judicial digno, rápido, real. Hoy estamos en deuda con 2, 421 denuncias de violencia de género en 2022 en la Fiscalía General de Justicia de la CDMX que aún no tienen solución.
Hasta que salvar la vida de las mujeres no sea una acción cotidiana de todos los actores políticos, seguiremos fallando como país, como sociedad como gobernantes y seguiremos siendo señalados como un México feminicida.