El Foro Económico Mundial (FEM), a través de su reporte “Datos para un propósito común: Aprovechando el consentimiento para generar confianza”, subrayó que las personas son cada vez más conscientes de los malos usos de los datos en el ecosistema digital. En este informe se indica que, experiencias tales como el uso de la información sin el consentimiento explícito u obtenida a través de medios poco transparentes y la fuga de los datos, son cada vez más comunes y crean un entorno de incertidumbre y desconfianza. Asimismo, indican que la erosión de la confianza en el tratamiento de los datos se encuentra vinculada a lo que denominan como “patrones obscuros”, es decir, prácticas que dificultan la capacidad de las personas para gestionar y controlar el uso de sus datos personales, entre las que se citan: avisos de privacidad muy complejos, uso deliberado de lenguaje difícil para desalentar la acción individual, y falta de mecanismos para retirar el consentimiento.
De acuerdo con esta organización no gubernamental internacional, la confianza digital está compuesta de seis elementos principales: seguridad, responsabilidad, rendición de cuentas, equidad, ética y transparencia. Por ejemplo, en el caso de la transparencia, se definió a este elemento como la disponibilidad permanente de información clara, oportuna y accesible sobre los usos y tratamientos que se dará a los datos personales. La información sobre los posibles riesgos y beneficios del servicio, las obligaciones de los responsables y los derechos de las personas son indispensables para concientizar y empoderar a los usuarios, es condición para consentir y decidir con conocimiento de causa.
La privacidad es un tema de alta relevancia al tener alcances tanto para los individuos, como para los grupos de población y las sociedades en su conjunto. Pues, las vulneraciones en la seguridad de la información personal tienen implicaciones en el ejercicio de otros derechos, y libertades, están ligados a riesgos para la intimidad, seguridad personal y patrimonial de las personas. Así mismo, debe considerarse, en un nivel más amplio que, el uso ilegitimo y deliberado de herramientas tecnológicas que hacen uso de una recolección masiva de los datos, por ejemplo, podría tener un impacto considerable en la participación, el ejercicio de la libertad de información y expresión, y podría acentuar las desigualdades, injusticias y la discriminación. En ello, reside la prioridad de considerar a la diversidad de las partes involucradas para el análisis y configuración de estrategias que, garanticen los derechos humanos de todas las personas, y aseguren el cumplimiento de los principios y deberes en la protección de los datos personales y la garantía de la privacidad.
Ante este escenario, que se vuelve mucho más complejo por las constantes innovaciones tecnológicas, resulta prioritario encontrar un equilibrio entre la tecnología y la protección de los datos personales. Sobre estas temáticas, versó la 44° Asamblea Global de la Privacidad 2022 en la que representantes de 140 autoridades de protección de datos personales y privacidad, analizaron la necesidad de configurar y adoptar nueva normativa con un enfoque proactivo basado en los principios éticos. Asimismo, en este foro global se reconoció la importancia de impulsar esquemas de cooperación internacional y de intercambio de buenas prácticas para emprender acciones que permitan un balance entre las promesas y beneficios de las innovaciones tecnológicas y la protección de los derechos fundamentales.
México, a través del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales, preside la Asamblea para el periodo 2021-2023. Los esfuerzos y el trabajo mexicano en esta materia ha consolidado un liderazgo que suma a esta Asamblea. La labor para coordinar y adentrarnos en el análisis y deliberación de los grupos de trabajo especializados ha detonado en mayor conocimiento y profesionalización de los recursos humanos, y ha facilitado un intercambio constante de buenas prácticas y el aprendizaje mutuo. Indudablemente, esta labor del INAI se verá reflejada en resoluciones de alto nivel sobre temáticas de amplio interés para la sociedad, mismas que serán claves para la actualización de los marcos normativos y las interacciones en la materia de más de 70 naciones.
Celebro el papel que despeñó México en el alcance de los acuerdos, y aprovecho este espacio para reconocer y agradecer los resultados alcanzados por la labor del Pleno del INAI. Así mismo, a las áreas del Instituto que han intervenido en la realización y consecución de los trabajos de la Asamblea Global de la Privacidad 2022, esto bajo el liderazgo y coordinación de mis colegas Josefina Román Vergara, Francisco Javier Acuña Llamas, y la participación de Adrián Alcalá Méndez.