El precio de la plata está en su nivel más alto desde septiembre de 2011. La razón principal es el deseo de los inversores de favorecer los activos de refugio seguro en medio de la guerra comercial mundial.
Desde que asumió la presidencia de Estados Unidos en enero de este año, Donald Trump ha impuesto aranceles a las importaciones de productos de otros países. El objetivo es expandir la industria manufacturera estadounidense y proteger el empleo.
El rendimiento de la plata incluso superó al del oro. El programa de afiliado forex acerca a los inversores a los metales preciosos.
Históricamente, el oro y la plata se han considerado activos refugio para los inversores, especialmente en tiempos de incertidumbre económica. Si bien el oro concentra la mayor atención, la plata ofrece ventajas que la convierten en una alternativa potencialmente más atractiva. Desde su mayor volatilidad hasta sus diversas aplicaciones industriales, la plata posee características que pueden generar importantes rentabilidades.
Una de las principales razones para considerar la plata en lugar del oro es su mayor potencial alcista. La plata es notoriamente más volátil que el oro. Esto significa que, si bien puede experimentar caídas más pronunciadas, también tiene el potencial de registrar ganancias porcentuales mucho mayores en un corto período de tiempo. Para los inversores que buscan rentabilidades más agresivas y están dispuestos a asumir un riesgo ligeramente mayor, esta volatilidad puede ser una ventaja significativa.
Además, la plata es significativamente más asequible que el oro. El precio por onza es considerablemente menor, lo que permite a los inversores con capital limitado participar en el mercado de metales preciosos. Esta asequibilidad facilita la entrada de los pequeños inversores, pero también permite una mayor diversificación dentro de una cartera de metales preciosos, lo que permite adquirir más unidades de plata a un precio determinado.
A diferencia del oro, que se utiliza principalmente como activo de inversión y joyería, la plata tiene una demanda industrial sustancial y creciente. Es un componente crucial en una amplia gama de tecnologías. Su conductividad eléctrica y térmica la hace indispensable en electrónica, paneles solares, vehículos eléctricos y equipos médicos.
Por ejemplo, la energía solar es un importante impulsor de la demanda de plata. Los paneles fotovoltaicos utilizan plata como conductor esencial para convertir la luz solar en electricidad. A medida que el mundo busca fuentes de energía más limpias, las instalaciones de paneles solares siguen creciendo, lo que garantiza una demanda constante y robusta de plata. De igual manera, la industria automotriz, especialmente el sector de los vehículos eléctricos, es otro impulsor de la demanda. Los autos eléctricos utilizan mucha más plata que los vehículos con motor de combustión interna debido a su complejidad electrónica.
La relación oro-plata, que indica cuántas onzas de plata se necesitan para comprar una onza de oro, es un indicador importante para muchos inversores. Históricamente, esta relación ha fluctuado, pero a largo plazo, cuando es alta (lo que indica que la plata es relativamente barata en comparación con el oro), puede ser señal de que la plata está infravalorada. Muchos analistas creen que la plata tiende a apreciarse más rápidamente que el oro cuando esta relación se reduce, lo que indica un mayor potencial de rentabilidad.
Aunque la plata es más abundante que el oro en la corteza terrestre, la plata extraída se consume a un ritmo más acelerado. Gran parte de la plata utilizada en electrónica no se recupera ni se recicla eficientemente, lo que provoca escasez. En cambio, el oro se recicla ampliamente y la mayor parte de su oferta se encuentra en lingotes o joyas. Esta dinámica de oferta y demanda podría, a largo plazo, impulsar los precios de la plata a niveles más altos.
