Trínitas S.A. de C.V., una Sociedad Financiera de Objeto Múltiple (SOFOM) con operaciones en Nuevo León, irá a concurso tras ser señalada por un presunto fraude de más de 2,500 millones de pesos.
Una jueza federal aceptó la demanda interpuesta por acreedores para iniciar el proceso legal.
Contexto: en Monterrey, varias empresas han sido señaladas por presuntos fraudes financieros y estafas de inversión, destacando casos como Trinitas SOFOM, Geofirmus y NCF Financial Services, investigadas por captar dinero del público con promesas de altos rendimientos o financiamientos irregulares.
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¿Qué pasa con la Sofom Trínitas?
El 16 de octubre, la jueza Ruth Haggi Huerta García, del Segundo Juzgado de Distrito en Materia de Concursos Mercantiles en la Ciudad de México, aceptó la solicitud para declarar a Trínitas en concurso mercantil en etapa de conciliación, con base en los artículos 21, 22 y 23 de la Ley de Concursos Mercantiles.
Los acreedores acusan a la empresa de incumplir con los pagos de capital e intereses desde noviembre de 2024.
Como parte del proceso, la jueza ordenó una serie de medidas precautorias que restringen las operaciones financieras de la empresa, como:
- Prohibición de pagar obligaciones vencidas.
- Prohibición de vender o gravar sus bienes.
- Prohibición de transferir recursos o valores a terceros.
Las acciones buscan proteger los intereses de los acreedores y evitar el vaciamiento de activos de la financiera mientras se determina si es viable que llegue a acuerdos.
Rendimientos de hasta 19.5% anual
Desde 2010, Trínitas atrajo a inversionistas al ofrecer tasas por encima del mercado.
Según el medio El Horizonte, los clientes que invertían más de 10 millones de pesos a 24 meses recibían rendimientos de hasta el 19.5% anual.
Muchos de los contratos incluían pagarés de 12, 18 o 24 meses, con liquidaciones mensuales, semestrales o anuales, pero a partir de finales de 2024 los pagos comenzaron a retrasarse o desaparecer por completo, reportó el periódico Reforma.
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Denuncias y carpetas de investigación
Según declaraciones de abogados del despacho Guerra y Asociados, que representa a los afectados, el esquema operado por Trínitas podría constituir un “megafraude”.
La Fiscalía General de Nuevo León ha abierto doce carpetas de investigación y ha realizado cateos en las oficinas de la financiera.
Versiones de prensa indican que Jorge Olvera Rodarte, fundador de Trínitas, estaría prófugo y fuera del país.
Cabe añadir que las SOFOMES no están autorizadas a captar dinero del público, por lo que los depósitos no están protegidos por el seguro del Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB).
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¿Por qué esto es importante?
El caso expone los riesgos de invertir en instituciones no reguladas como las SOFOMES, que operan fuera del sistema bancario tradicional, sin ser reguladas por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores y sin respaldo del IPAB.
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Además, puede ser un precedente legal sobre la vigilancia y consecuencias para este tipo de entidades financieras en México.
JL