La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo pidió este 25 de julio de 2025, durante su conferencia mañanera, que los representantes públicos de la Cuarta Transformación (4T) ejerzan el poder con humildad y recuerden que son constantemente evaluados por la ciudadanía.
Subrayó que, aunque cada persona es libre de tomar sus decisiones y vacacionar con recursos propios, al ser parte de un movimiento político, el pueblo siempre los evalúa. "Yo solo le doy instrucciones a mi gabinete, lo que sí digo es lo que pienso, hay que ejercer el poder con humildad", declaró.
Sheinbaum enfatizó que "el poder se ejerce con humildad", una directriz que aplica "para los que son de la Cuarta Transformación y para los que no". Para ella, "el ejercicio del poder en la Cuarta Transformación debe ser con humildad", y esta cualidad "tiene que mostrarse en cualquier acción que se desarrolle".
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La mandataria también vinculó directamente la humildad con la austeridad, afirmando que "El poder es humildad y hay que ser austeros". Aunque reconoció que no se está cometiendo "ningún delito" y que "cada quien actúa de acuerdo a su visión" en ciertos casos, recalcó que "todos están bajo evaluación de la gente".
Casos de excesos en la austeridad republicana
El llamado de la presidenta se produce en un contexto de diversas polémicas que han involucrado a funcionarios del partido oficialista, generando cuestionamientos sobre la congruencia con la política de austeridad republicana, un pilar de la Cuarta Transformación.
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Esta política, impulsada desde 2018 por el expresidente Andrés Manuel López Obrador y formalizada en 2019 con la Ley Federal de Austeridad Republicana, busca reducir el gasto público superfluo para destinar recursos a programas sociales, bajo la premisa de que "no puede haber gobierno rico con pueblo pobre".
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Uno de los casos más recientes fue el viaje a España del coordinador de los diputados de Morena, Ricardo Monreal, quien fue fotografiado en un restaurante del hotel Rosewood Villa Magna, en Madrid. Aunque Monreal aclaró que el viaje fue personal, por su aniversario de matrimonio, y costeado con recursos propios, la difusión de las imágenes generó polémica al ser contrastada con los principios de austeridad del movimiento.
Este no es el primer incidente para Monreal. En noviembre del año pasado, fue cuestionado sobre el uso de un helicóptero privado. A pesar de que aseguró que fue un favor de amigos y sin recursos públicos, Sheinbaum reiteró la importancia de mantener los principios de la 4T para evitar dudas entre la ciudadanía. Monreal incluso ofreció una disculpa pública tras la desaprobación de la presidenta.
Además, Monreal estuvo envuelto en un conflicto interno en Morena en diciembre de 2024, cuando Adán Augusto López Hernández lo acusó de actos de corrupción y servicios a sobreprecio durante su anterior coordinación en el Senado, en relación a la aprobación presupuestal. Monreal denunció ser víctima de "mala fe" de sus correligionarios.
Otro caso sonado fue el del presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, en marzo. Fue visto viajando en clase ejecutiva a París, boleto que habría pagado el Senado por al menos 33 mil 929 pesos y que coincidió con su cumpleaños, lo que desató especulaciones de un "autoregalo". Sheinbaum, al respecto, comentó que ella no viaja en primera clase, incluso si se lo ofrecen. Estos incidentes ilustran la tensión entre las acciones personales y los principios de austeridad de la 4T.
¿Por qué es relevante el tema?
La postura de la presidenta sobre los excesos de funcionarios públicos busca reafirmar los valores centrales de la Cuarta Transformación (4T), en especial la austeridad y la humildad en el ejercicio del poder, frente a casos que han puesto en entredicho la congruencia de algunos funcionarios con dichos principios.
Su llamado público, aunque sin señalar directamente a nadie, es una respuesta clara a los recientes escándalos que involucran a figuras clave de Morena, como Ricardo Monreal y Gerardo Fernández Noroña, cuyas acciones han generado críticas por contradecir la narrativa de cercanía con el pueblo.
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Sheinbaum recuerda que los representantes públicos son constantemente evaluados por la ciudadanía, incluso en sus decisiones personales, como viajes o lujos, aunque se realicen con recursos propios. La presidenta insiste en que el poder no debe confundirse con privilegio, y que la 4T debe distinguirse por su coherencia ética, más allá de la legalidad.
En un país marcado por la desigualdad y la desconfianza en las élites políticas, este tipo de posicionamientos son clave para mantener la legitimidad del proyecto político. También muestran que, para Sheinbaum, la imagen pública de los funcionarios es tan importante como su conducta administrativa.
VGB