En treinta de los 32 estados de México se consume fentanilo de acuerdo con el informe 2023 del Sistema de vigilancia epidemiológica de las adicciones (SISVEA), elaborado por la Secretaría de Salud.
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El informe sigue la línea del discurso gubernamental en el sentido de que el consumo de esa droga sintética no es un problema en nuestro país, sin embargo, se consideró necesario documentar su incidencia.
“Cada vez más usuarios mencionan su consumo, cosa que no se había observado en años previos en estos (privados) Centros de Tratamiento. Del total de registros recabados (120 mil 488) por SISVEA en 2023 en todo el país, en 922 (0.8 %) se reporta el consumo ‘alguna vez en la vida”.
Inicialmente los reportes de consumo de ese opiáceo que ha causado miles de muertes en Estados Unidos y los reproches del gobierno de ese país al de México, sólo reportaban el uso del fentanilo entre consumidores de la frontera norte.
“Sin embargo, al término de 2023 rebasaron por mucho esta zona geográfica, de estos 922 reportes las mayores proporciones se concentran en Baja California, Sonora, Chihuahua y Nuevo León. Solamente los estados de Tamaulipas y Oaxaca no han reportado ningún usuario que haya consumido fentanilo alguna vez en la vida”.
Las personas que declaran haber consumido fentanilo de origen ilegal (ni médico) son hombres en su mayoría (9 de cada 10) y el grupo de edad que más demandó fue el de jóvenes entre los 15 y 29 años de edad.
El SISVEA recopila y analiza la información de cuatro fuentes: los Centros de tratamiento y rehabilitación no gubernamentales, Centros de tratamiento para adolescentes, Servicio médico forense y Servicio médico de urgencias.
Metanfetamina desplaza a la mariguana
La metanfetamina fue la segunda droga más consumida en México durante 2023 y la primera durante los primeros seis meses del 2024, de acuerdo con el más reciente Reporte de Información Epidemiológica del Consumo de Drogas elaborado por los Centros de Integración Juvenil, A.C.
De acuerdo con ese informe, en 2023 cinco mil 505 personas solicitaron tratamiento por consumo de esa sustancia, mientras que los datos correspondientes al primer semestre de 2024 arrojan que tres mil 601 pacientes declararon que era la droga que consumen.
Este martes, el gobierno federal anunció el lanzamiento de una campaña contra el consumo de drogas, enfocada a combatir el uso de fentanilo.
Sin embargo, los datos disponibles en el reporte del CIJ, así como del Sistema de vigilancia epidemiológica de las adicciones elaborado por la Secretaría de Salud federal, no se incluyen datos sobre el consumo de fentanilo.
El reporte de los CIJ señala que en 2023 fueron atendidas 18 290 personas por el uso de diferentes drogas, desde alcohol, cannabis (mariguana), inhalables, cocaína, hasta drogas sintéticas como el crack, la metanfetamina y el éxtasis, entre otras.
El informe establece que la droga más consumida en 2023 fue la mariguana, con 5 mil 852 pacientes, mientras la metanfetamina ocupó el segundo sitio. En tercero aparece la cocaína con 950 personas, luego viene el crack con 767, mientras 164 usuarios de heroína solicitaron atención.
En el primer semestre de 2024 (última información disponible) 8 mil 796 personas requirieron atención en los CIJ y ahí se nota un cambio en la tendencia respecto a 2023 ya que el mayor número de usuarios se presentó en metanfetamina, con 3 mil 61 personas.
¿Por qué se ha popularizado la metanfetamina?
La metanfetamina es tan consumida debido a su bajo precio, ya que para fabricarlas se requieren precursores de fácil acceso y se pueden preparar en una cocina de grado habitacional con buena ventilación para filtrar los gases, dijo el doctor Carlos Faudoa Mendoza, responsable de la Clínica de Atención Integral para las Adicciones de la UNAM en entrevista con La Silla Rota.
Faudoa señaló que hoy en día la edad promedio de los consumidores es de 15 años, mientras que en 2020 era de 18 años.
Las razones por las que estos jóvenes de 15 años prefieren las metanfetaminas a cualquier otra droga ilícita es por la sensación placentera que les otorga, les ayuda a bajar la borrachera y aumenta el placer sexual.
Otra particularidad es que las metanfetaminas son bastante fáciles de esconder, ya que con la dosis del tamaño de un grano de sal las personas tienen suficiente para drogarse; también tiene poco olor a diferencia de la marihuana y puede consumirse fumada, inyectada, inhalada y comida.
El grueso de las personas que consumen metanfetamina prefiere fumarla o inyectarla vía intravenosa, debido a que de este modo los efectos como “golpe” y “subidón de energía” son más potentes.