Los coordinadores de las bancadas de Morena en la Cámara de Diputados y el Senado, Ricardo Monreal y Adán Augusto López respectivamente, sostuvieron una reunión y tomaron una fotografía, luego de la disputa que tuvieron a finales del año pasado.
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"El momento que vive México requiere de unidad nacional, y la agenda legislativa próxima debe incluir las prioridades del gobierno de la presidenta @Claudiashein para beneficio de la población. De eso hablamos el senador @adan_augusto y yo, reiterando nuestra amistad y respeto", escribió Monreal a través de su cuenta de X.
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El pasado mes de diciembre se llevó a cabo una reunión entre la presidenta Claudia Sheinbaum, Ricardo Monreal y Adán Augusto López Hernández, para revisar agenda, aseguró la mandataria en su conferencia de prensa matutina. "Nos reunimos en la noche para ver la agenda legislativa que tenemos, este periodo de sesiones tiene resultados", dijo la mandataria y reconoció a los legisladores por las reformas aprobadas en el Congreso.
Sheinbaum aseguró en su conferencia mañanera del 17 de diciembre que los adversarios de su movimiento engrandecen estos asuntos. "Son nuestros adversarios que hacen grandes todo esto", dijo sobre la reunión por el conflicto entre los coordinadores de Morena en el Legislativo.
Ante la pregunta de si llamó la atención a Adán Augusto y a Ricardo Monreal, la mandataria dijo que hablaron de lo que representa el movimiento de la llamada Cuarta transformación. "Hay mucha unidad entre nosotros", reiteró.
El pleito
Las acusaciones de corrupción y manejo irregular de recursos lanzadas por López contra Monreal generaron un ambiente de tensión que podría tener repercusiones significativas tanto en la unidad del partido como en su imagen pública.
La controversia se encendió durante la última sesión del periodo ordinario del Senado. Adán Augusto López, actual coordinador del grupo parlamentario de Morena en la cámara alta, subió a la tribuna para denunciar presuntas irregularidades en contratos firmados durante la gestión de su predecesor, Ricardo Monreal. Entre las acusaciones destacaron dos casos específicos:
Contrato de administración de archivos: López señaló la existencia de un contrato anual con la empresa Full Service de México, que recibía más de 60 millones de pesos anuales para la gestión de archivos. Según el senador, el servicio consistía en almacenar papelería en una bodega en Hidalgo, sin mayor beneficio para el Senado. Además, denunció que no existe información clara sobre la empresa, más allá del contrato firmado.
Contrato de elevadores: También acusó irregularidades en la asignación de un contrato multianual de 90 millones de pesos para la instalación de elevadores por parte de la empresa Grupo Piasa. López mencionó que los elevadores no funcionan correctamente y, de hecho, legisladores quedaron atrapados en uno antes de la sesión, evidenciando la deficiencia del servicio.
Adán Augusto anunció la rescisión de ambos contratos y adelantó que se presentarán denuncias ante las autoridades correspondientes. Asimismo, aseguró que en la próxima sesión se darán a conocer más contratos sospechosos que simularon la prestación de servicios.
Ricardo Monreal, actualmente coordinador de Morena en la Cámara de Diputados, no tardó en responder a las acusaciones. A través de sus redes sociales y el sistema de comunicación institucional de la Cámara, calificó las denuncias como "infundios" y "perversidades políticas". Monreal negó irregularidades y aseguró que existen auditorías sobre los contratos para respaldar su transparencia.
El legislador zacatecano también señaló que durante su gestión no dispuso de un fideicomiso de más de mil millones de pesos que posee el Senado, recurso que calificó como "el origen de los ataques" en su contra. Monreal lamentó que las críticas provengan ahora de correligionarios de Morena y no de la oposición, como sucedía en el pasado. Además, recordó que Adán Augusto estaba al tanto de los ajustes presupuestales aprobados por los diputados y que había expresado su conformidad con ellos.
“Casi siempre los ataques provenían de la oposición; hoy vienen de parte de correligionarios”, afirmó Monreal, subrayando lo que consideró una "mala fe" dentro del propio partido.
La disputa se produjo en un contexto de tensión por la asignación de recursos. Mientras la Cámara de Diputados aprobó un presupuesto de 9,600 millones de pesos sin reducciones, el Senado quedó con 5,100 millones, lo que generó molestia entre los senadores. Gerardo Fernández Noroña, presidente de la Mesa Directiva del Senado, denunció que los recortes fueron hechos sin aviso previo ni posibilidad de revisión.