En la recta final de su gobierno, el presidente Andrés Manuel López Obrador está ejerciendo un mayor gasto público con miras al triunfo de la candidata presidencial del partido en el poder, Claudia Sheinbaum, el cual representa el mayor déficit presupuestario desde la década de los 80, destaca una publicación del sitio especializado en finanzas Bloomberg.
Destaca que ese incremento de gasto público destinado principalmente a reforzar programas sociales e inyectar recursos a la paraestatal Petróleos Mexicanos (Pemex), así como a concluir con obras emblemas de su gobierno, como lo son el Tren Maya y la refinería de Dos Bocas, también pueden representar un problema financiero y económico a quien lo sustituya en el poder. Pero todo eso para tratar de que su partido Morena conserve el poder.
ÚNETE A NUESTRO CANAL DE WHATSAPP. EL PODER DE LA INFORMACIÓN EN LA PALMA DE TU MANO
Te podría interesar
"La agenda popular parece destinada a ayudar al partido de López Obrador a retener la presidencia con una victoria aplastante en las elecciones de junio", indica la publicación.
De ganar Claudia Sheinbaum, candidata presidencial por la alianza Sigamos Haciendo Historia, tendría serios problemas para lograr los fondos necesarios para llevar a cabo sus proyectos de gobierno, entre los que se encuentran inversiones en atención médica, ya que se estima que este año los costos del servicio de la deuda llegue al 3.7 por ciento de la producción económica, lo que representa la mayor cifra en los últimos 30 años, de acuerdo con el sitio.
Los gastos públicos a final del sexenio de AMLO
Y no solo eso, sino que alerta de los riesgo de aumentar más compromisos del gasto público, ya que estaría en riesgo la calificación crediticas de grado de inversión de México. Y aumentar los impuestos no le conviene al gobierno de AMLO, pero tampoco recortar gastos, lo que derivaría en problemas para la próxima administración.
A pesar de la situación, para el economista Carlos Serrano, economista en jefe para México de BBVA, México puede afrontar el presupuesto final de la actual administración, destaca el reportaje.
"Cada año tenemos que gastar más en pensiones y en el servicio de la deuda, lo que deja al país sin margen", indicó el especialista.
Recursos para obras emblema de AMLO
De acuerdo a lo publicado, el gobierno de López Obrador reservó alrededor de 43,000 millones de dólares para destinarlos a los programas sociales, de los cuales más de la mitad es para las pensiones de Bienestar de adultos mayores, que se ha convertido en el principal botín electoral.
La otra parte del presupuesto final para el final del sexenio son para las obras de infraestructura como son el Tren Maya, la refinería de Dos Bocas, y el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA).
Un factor que ha jugado a favor de México, es que el peso mexicano es la principal moneda de los mercados emergentes, incluso las calificadoras S&P, Fitch y Moody´s estiman estable la calificación soberana de México, pese al incremento del gasto.