El presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo este martes 9 de mayo una llamada telefónica que duró alrededor de una hora con su homólogo de Estados Unidos, Joe Biden, para conversar sobre migración, fentanilo y cooperación económica en el marco de la crisis del tráfico de fentanilo y el fin del Título 42, que puso mayores restricciones a la migración indocumentada hacia Estados Unidos.
Durante la llamada los mandatarios también hablaron de la buena vecindad entre ambos países y los lazos de amistad que los unen, según expuso López Obrador a través de su cuenta de Twitter. “Reafirmamos el compromiso de seguir trabajando juntos en temas como la migración con dimensión humanista”, aseguró.
“El tráfico de drogas y armas y, sobre todo, en cooperación para el bienestar de los pueblos más pobres de nuestro continente. Somos buenos vecinos y amigos”, agregó el presidente mexicano.
Detalló que México ha aceptado recibir mensualmente al menos a 30,000 migrantes expulsados de Estados Unidos a cambio de un programa para otorgar visas de trabajo y motivar una migración ordenada.
La llamada de ambos mandatarios se dará a dos días de que el Título 42 llegue a su fin, por lo que Estados Unidos ya no expulsará “fast track” a los migrantes que lleguen a su país como sucede desde marzo de 2020.
La conversación entre ambos presidentes ocurrió a las 09:30 horas del martes, al término de la conferencia matutina del presidente López Obrador.
“Hemos estado buscando comunicarnos pero no se había dado la posibilidad porque vamos viajando, pero ahora ya se acordó esto. Vamos a seguir hablando este sobre la cooperación que tenemos que es muy buena, mucho, mucho, mucho muy muy buena”, dijo.
Migración y Título 42
En un comunicado, la Casa Blanca explicó que ambos líderes hablaron sobre la "estrecha" y "continua" colaboración entre las autoridades fronterizas estadounidenses y mexicanas, así como de las "fuertes medidas" que implementarán para evitar cruces irregulares.
El jueves 11 de mayo dejará de estar vigente el Título 42, una medida que adoptó el expresidente republicano Donald Trump (2017-2021) con el argumento de que era necesario aislar a Estados Unidos por motivos sanitarios en medio de la pandemia de la covid-19 y que luego siguió aplicando Biden.
Según la Casa Blanca, Biden y López Obrador hablaron de la importancia de mejorar la cooperación entre Estados Unidos y México con el fin de "gestionar" la migración "sin precedentes" de la región y que se espera que desborde la frontera entre ambos países con el fin del Título 42.
Al respecto, los dos líderes hablaron de la "urgencia" de reducir el número de migrantes que se aglomeran actualmente en ciudades del norte de México a la espera de cruzar a Estados Unidos y que, en algunos casos, tienen que dormir en la calle o vivir en improvisados campamentos.
Las tres llamadas AMLO-Biden
El 23 de enero de 2021 se llevó a cabo la primera llamada entre López Obrador y Joe Biden. "López Obrador felicitó al presidente Biden por su reciente toma de protesta, al tiempo que le expresó sus mejores deseos para su gestión, así como la voluntad de su gobierno de trabajar conjuntamente en la amplia agenda bilateral", dice la nota.
La segunda llamada o reunión virtual, se llevó a cabo el 1 de marzo de 2021. "Vemos a México como un igual, no como alguien que está al sur de nuestra frontera", afirmó Biden al comienzo de la reunión con su homólogo mexicano, Andrés Manuel López Obrador, que se produjo de forma telemática debido a la pandemia, con ambos presidentes comunicándose a través de pantallas; una conversación que el mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador calificó de amistosa y benéfica para el bien de ambos pueblos.
En su reunión a distancia, acordaron trabajar y cooperar en materia de migración, cambio climático, economía y respuesta a la covid-19.
El 19 de octubre de 2022 se llevó a cabo la tercera llamada entre López Obrador y Joe Biden. En la llamada estuvo presente el canciller Marcelo Ebrard. “Nosotros no queremos pleito y tan es así que ayer me comentó Marcelo Ebrard que lo buscaron de la Casa Blanca porque quiere hablar conmigo el presidente Biden. Si fuesen mal las relaciones pues no se procurarían estos encuentros y conversaciones”, dijo el presidente.