Después de 5 años de jaloneos entre el Instituto Nacional Electoral y la Cámara de Diputados en materia presupuestal, 2024 podría ser el primer año en el que eso no ocurra. Esto, tras el relevo en la presidencia del INE después de que el consejero Lorenzo Córdova concluyó su cargo el 2 de abril y ahora se encuentra bajo la batuta de Guadalupe Taddei quien ha recibido el visto bueno del gobierno federal y la bancada oficialista en el Congreso.
Este martes el INE instalará la comisión temporal de presupuesto 2024 y en su primer mes de trabajo Taddei ha dado instrucciones para que el instituto opere con un presupuesto suficiente pero austero; incluso adelantó que reducirá su sueldo para ganar menos que el presidente Andrés Manuel López Obrador. Esta fue una de las señales que por el momento ha marcado su diferencia con su antecesor Córdova y qué ha generado diferencias internas entra las y los consejeros electorales.
Año por año
En 2017, en el último presupuesto que aprobó el Congreso en un gobierno priista previo a las elecciones presidenciales de 2018, el INE aprobó un proyecto de presupuesto de 18 mil 226.4 millones de pesos. Sin embargo, la Cámara de Diputados aprobó solo 17 mil 426.4 millones de pesos, es decir, redujo 800 millones.
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En aquel momento Córdova explicó ante el Consejo que aunque era el recorte más grande que sufrió en aquellos años, no estaba en riesgo la organización de la elección presidencial de 2018 así como el resto de las elecciones concurrentes.
En 2019, año no electoral y con Morena en el control de la Cámara baja con mayoría simple, se aprobó un presupuesto de 15 mil 263.3 millones de pesos, de los cuales 11 mil 303.2 millones de pesos fueron utilizados para la operación del instituto, y el resto para el financiamiento público a partidos. Estos reflejó una reducción de 37.4% en comparación con 2018.
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En 2020, año no relevante en términos electorales aunque implicó el inicio de la organización de las elecciones 2021, el INE solicitó 12 mil 439.3 millones de pesos y aseguró que dicho monto fue planeado bajo criterios de eficiencia y eficacia para cumplir con sus atribuciones.
Córdova detalló que también realizarían buenas prácticas para generar ahorros, en caso de imprevistos en términos administrativos; e incluso destacó que en el contexto económico del país generado por la pandemia del coronavirus "nunca antes se había solicitado una cantidad tan baja respecto al presupuesto en un año preelectoral". No obstante, los diputados recortaron 1071 millones de dicho monto y así lo autorizaron.
En aquel momento el INE destacó que estaba trabajando en apego a la publicación del Diario Oficial de la Federación el 27 de febrero en materia de racionalidad y disciplina presupuestaria. Informó que recortó el concepto de gastos en caso de viajes, utilizar contrataciones consolidadas para realizar investigaciones de mercado, reducir el número de nuevo arrendamientos de inmuebles, generar ahorros en el uso de vehículos oficiales y consumo de combustible; reducir reuniones presenciales y trabajar en mayor medida por videoconferencia, así como limitar el uso de insumos. Pero eso no detuvo el recorte presupuestal.
En 2021 en el contexto de las elecciones intermedias para renovar el Congreso (que fueron consideradas en aquel momento como las más grandes de la historia) el presupuesto aumentó y se le otorgaron 19 mil 593 millones de pesos.
El contexto fue más ríspido porque a partir de ese momento la bancada mayoritaria de Morena buscó reducir el drásticamente el presupuesto del INE por considerar que no se apegó a la política de austeridad republicana en materia salarial. Además, añadió que el Instituto contaba con dos fideicomisos que sugirió tomar para la organización de una consulta popular y revocación de mandato.
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Otro de los enfrentamientos que hubo fue que los consejeros electorales interpusieron controversias constitucionales ante la Corte para evitar la reducción de su salario en apego a la política del presidente Andrés Manuel López Obrador de que ningún funcionario público gane más que él.
Sin embargo, los consejeros plantearon a la Corte que en general esta medida no podía ser retroactiva para ellos puesto que recibieron ese salario antes de la política de austeridad republicana y que, por ende, no se podía esta modificar. La Corte les dio la razón.
Ya en 2022 Morena y sus aliados, desde el Congreso, buscaron recortar de nueva cuenta el presupuesto del instituto; y en un año no electoral se le otorgaron solo 13 mil 84.1 millones de pesos.
Bajo esta propuesta el Instituto planteó al Congreso un monto adicional de 5 mil 743 millones de pesos para el ejercicio de consulta popular y revocación de mandato, pero el Congreso no los autorizó a pesar de que el INE explicó que, en caso de no realizarse, el dinero sería devuelto a la Federación.
¿Y 2023?
En esta ocasión Guadalupe Taddei solo ha señalado en términos generales que defenderá la propuesta que envíe el INE al Congreso en septiembre. Y aunque ha argumentado que la nueva presidencia a su cargo "se mantendrá al margen de errores del pasado" esto ha generado algunos desencuentros con consejeros electorales como Claudia Zavala quien ha defendido que el instituto siempre ha justificado su propuesta presupuestal ante el Congreso.
Hasta ahora, Taddei ha perfilado que reducirá su sueldo, pero no se ha establecido un monto definitivo y tampoco se ha precisado si habrá cambios en los sueldos de todos integrantes del Consejo.
Cabe recordar que hace dos semanas la junta de coordinación política de la cámara de diputados se reunió con los integrantes del Consejo en San Lázaro. Allí el morenista Ignacio Mier, como presidente de la Jucopo, adelantó que el presupuesto del INE 2024 lo elaborarán de manera conjunta.
DJC