Seguramente más de una vez has utilizado ciertas palabras que, sólo los mexicanos entienden al momento de decirlas, sin embargo, no tienen ni idea de su verdadero origen y la relación que tienen varias de ellas con el dinero, lo mismo pasa con los significados de nombres y apellidos que, últimamente han tomado relevancia debido a que el INEGI reporta cuántas personas portan cada uno de ellos y hasta los que pronto desaparecerán.
Por ejemplo, en México existen alrededor de 34 mil apellidos debido a su diversidad cultural y muchos de ellos son de los más comunes que podemos escuchar en las personas mexicanas, sin embargo, existen otros apellidos que no son tan fáciles de encontrar debido a la rareza debido a su origen.
Vale la pena resaltar que entre los apellidos más comunes en México están los que llevan la letra “z” implícita, pese a ello hay apellidos con z que están a punto de desaparecer en el país como: Tzompole, Zeinos, Calzonzi, Chocoza y Zugasti.
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Y ya que, estamos cociendo apellidos nuevos, también es importante conocer el significado real e interesante de algunas de las palabras y expresiones que más utilizamos cuando estamos entre amigos o con la familia, pues no se escuchan muy formales que digamos, como, por ejemplo, cuando te has quedado sin dinero y lo primero que se te viene a la mente decir es: "ya no tengo ni un quinto".
Pero, esa no es la única expresión que utilizas relacionada al dinero y por eso el Museo del Banco Nacional revela los interesantes significados de ciertas palabras y expresiones mexicanas que no tienes ni idea de dónde provienen.
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Expresiones mexicanas relacionadas al dinero y qué significan
¡Me despelucaron!
El origen de esta expresión proviene de la moneda virreinal de ocho escudos con la imagen de Felipe V y Fernando Vl, las cuales eran conocidas popularmente como "peluconas" por las grandes pelucas que usaban estos reyes. Cuando alguien perdía dinero por una apuesta, solía decir "Me despelucaron".
Morralla
En México, de las palabras más usadas es morralla, que significa en el país una calderilla, una moneda de escaso valor. La palabra morralla se usa para referirse a un conjunto de cosas inservibles, por ello también se utiliza para hablar de monedas de baja denominación. En México, es común escuchar la frase "me pagaste con pura morralla".
¡Me cayó el veinte!
Esta expresión hace referencia a las monedas de 20 centavos, acuñadas de 1943 a 1974, que se utilizaban en teléfonos públicos. Las personas decían "me cayó el veinte" cuando se enlazaba la llamada, y "se me acabó el veinte" cuando la llamada terminaba por falta de monedas.
¡Va el pilón! o ¿Me da mi pilón?
En el Virreinato, se conocía como pilón a un pan de azúcar que costaba un tlaco o 1/6 de real. El pilón se obsequiaba en las tiendas cuando alguien compraba más de medio real. De aquí se quedó la costumbre de pedir o dar un pilón después de una compra.
¡Águila o sol!
Cuando "echamos un volado" siempre preguntamos "¿águila o sol?", refiriéndonos a los lados de la moneda. Esta expresión viene de las monedas de plata del siglo XlX, que llevaban un lado el Escudo Nacional (águila) y, en el otro, un gorro frigio con resplandores solares (sol).
No soy monedita de oro
"No soy monedita de oro, pa´caerle bien a todos..." de la canción del intérprete y compositor mexicano Cuco Sánchez, hace referencia a que ninguna persona le puede caer bien a todas, a diferencia del dinero; y que es mejor ser auténtico, sin pretender ser "monedita de oro".
No traigo ni quinto
Esta expresión se usa para decir que alguien no lleva nada de dinero y proviene de la moneda de 5 centavos, conocida como "quinto".
Ya enseñó el cobre
El origen de esta frase está en la falsificación de monedas de metales finos mediante piezas de cobre con cubiertas doradas o plateadas. Cuando el recubrimiento se raspaba, la moneda falsa "mostraba el cobre". Esta expresión se usa cuando una persona u objeto aparenta ser algo que no es.
Tostón
A la moneda de 4 reales se le conocía como tostón porque tenía grabado el rostro del rey de España. Esta moneda era la mitad de la moneda de 8 reales, por lo que, al cambiar el sistema monetario y surgir el peso, a la de cincuenta centavos también se le apodó tostón.