NARCOTRÁFICO

¿Cuánto fentanilo se consume en México y en qué estados del país?

Las cifras pueden parecer insignificantes, empero, es momento de que las autoridades de salud, en compañía de las de seguridad pública, eviten una epidemia de opioides

Créditos: LaSillaRota
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La llamada "epidemia de opioides" que azota a los Estados Unidos, y que causa más de 100,000 muertes anuales, parece ser un escenario bastante lejano en México, sin embargo, esto podría estar cambiando. México, como país productor, tiene más facilidades de acceder a este tipo de opioide aunque el precio sea elevado; de acuerdo con cifras de la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic) de la Secretaría de Salud (SSA), el consumo de esta droga en el país tuvo un crecimiento significativo en 2021; se contabilizaron 184 casos. Aunque las cifras no son iguales a las de los Estados Unidos, es un buen momento para evitar ser el "próximo país infectado". 

El fentanilo es un opioide sintético altamente potente y adictivo que ha causado una creciente preocupación en la sociedad debido a su impacto en la salud pública y la seguridad nacional. Este narcótico se utiliza con frecuencia en la medicina para aliviar el dolor, especialmente en pacientes con cáncer. Sin embargo, su uso indebido y abuso recreativo ha llevado a una creciente ola de sobredosis y muertes.

La razón principal detrás del auge del fentanilo en México es el aumento de la demanda en los Estados Unidos, donde la adicción a los opioides se ha convertido en una epidemia nacional. Los traficantes de drogas mexicanos han visto una oportunidad lucrativa en la producción y distribución de fentanilo para satisfacer la demanda estadounidense, ya que es mucho más barato y fácil de transportar que la heroína u otros opioides más tradicionales.

El problema es que el fentanilo es extremadamente peligroso, incluso en pequeñas dosis. Los usuarios pueden experimentar efectos secundarios graves e incluso mortales, como depresión respiratoria, pérdida de conciencia y coma. Además, el fentanilo es altamente adictivo, lo que aumenta el riesgo de dependencia y sobredosis.

A medida que el tráfico de fentanilo sigue creciendo en México, las autoridades en ambos países están intensificando los esfuerzos para combatir su distribución ilegal. La lucha contra el fentanilo no es solo una cuestión de seguridad nacional, sino también de salud pública, ya que muchas personas están muriendo innecesariamente debido al uso indebido de este narcótico.

¿Qué estados son los más consumidores y cuánto consumen?

A diferencia de otras drogas, como los son los clasificados como anfetamínicos (ETA), el alcohol, marihuana, cocaína y tabaco, al fentanilo se le clasifica como una "droga" nueva o también llamada emergente. Al respecto, y como ya se mencionó anteriormente, cada vez es más sencillo que las personas en México tengan acceso a este tipo de drogas sin importar su costo ni tampoco su letalidad. 

Al respecto, la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic) de la Secretaría de Salud reveló en su estudio del 2021 que las drogas emergentes están ganando terreno en México y una de ellas es el Fentanilo, una sustancia que ha sido de gran interés en los últimos años. La oferta de esta droga ha crecido y por lo tanto, también su demanda. Esto ha llevado al Observatorio a seguir de cerca los casos en los que se demanda atención por el uso de estas sustancias, encontrando un número creciente en los últimos años

Créditos: Conadic

Llama la atención que la mayoría de estos casos se presentan entre hombres y en los Estados de Baja California y Sonora. Esto nos indica que es necesario que se tomen medidas para combatir el uso y abuso de esta droga, sobre todo en estas zonas del país. Como puede observarse, desde inicios del periodo presidencial de Enrique Peña Nieto el consumo de esta droga ha tenido un auge importante. Y cada año que pasa desde el 2018 la cifra aumenta al doble de la anterior; como muestra de ello, en el 2020 se reportaron 72 casos mientras que para 2021 la cifra llegó a 184.

El aseguramiento de fentanilo se ha incrementado en un 528% en los primeros tres años del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, al incautar tres mil 500 kilogramos, en comparación con los 559 kilos durante los últimos tres años del gobierno de Enrique Peña Nieto, de acuerdo con reportes de las áreas de seguridad del gobierno federal.

En México, el consumo de fentanilo ha ido en aumento en ciudades fronterizas como Tijuana y Mexicali, donde se registraron 29 muertes relacionadas con su consumo entre 2021 y 2022, según datos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). También se ha identificado su consumo en centros turísticos como Cancún, Mazatlán, Puerto Vallarta, Los Cabos y Puerto Escondido.

El consumo, visto en perspectiva con otras drogas legales e ilegales, es menor, sin embargo, el país más contagiado por la "epidemia de opioides" es nuestro vecino del norte. 

Tanto Baja California como Sonora son las ismas zonas donde se han dado detenciones de capos, guerras territoriales y, por supuesto, donde se encuentran muchos de los laboratorios de fentanilo; pese a que la Conadic no está capacitada para establecer correlaciones, es evidente que existen debido a la cercanía con la droga. 

El fentanilo es un opiáceo sintético que tiene un poder analgésico muy fuerte, incluso mayor que la morfina. Es utilizado para tratar dolores agudos, como los que se presentan después de una cirugía, pero también puede ser muy peligroso si se consume de manera recreativa. Esta droga es altamente adictiva y su consumo puede llevar a la muerte en dosis relativamente bajas. Además, puede ser mezclada con otras sustancias, lo que aumenta su potencial letal.

¿Dónde se produce y dónde se consume más?

Aunque el primer caso de muerte por sobredosis se reportó en 1979 en Estados Unidos, en la actualidad se ha convertido en la principal amenaza para la población de entre 15 y 45 años, causando la muerte de cerca de 70 mil personas solo en ese país durante el 2021. Según datos de centros de salud y seguridad de Estados Unidos, la droga fentanilo ha sido identificada en los 50 estados del país, aunque su consumo se registra principalmente en ciudades como Los Ángeles, Columbia, Nueva York, Alaska y Arizona.

Por ello, los gobiernos de México y Estados Unidos están buscando implementar políticas conjuntas para parar la producción, traslado y venta de esta droga en ambos países. De acuerdo con el reporte más reciente del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), se documentaron 108 mil muertes por sobredosis de distintas drogas en Estados Unidos en el 2021, de las cuales cerca del 70% están relacionadas directamente con el consumo de fentanilo.

 

La droga de “diseño” se fabrica a partir de precursores químicos exportados de países como China, India, Pakistán y Corea del Norte. En México, es elaborada principalmente en laboratorios clandestinos ubicados en los estados de Colima, Michoacán, Jalisco y Sinaloa a través de los cárteles Jalisco Nueva Generación (CJNG), Sinaloa y Familia Michoacana o Caballeros Templarios.

El fentanilo se encuentra en forma líquida y en polvo e incluso en pastillas, y las autoridades han detectado que es mezclado con otras drogas como cocaína, heroína o metanfetaminas, lo que incrementa su peligrosidad y adicción. De acuerdo con estudios realizados por instituciones de salud de ambos países, el fentanilo es 50 veces más potente que la heroína y 100 veces más que la morfina.

 

El fentanilo y los problemas que causa en la relación México- Estados Unidos

Debido a los problemas que causan en ambos países el consumo de esta y otras drogas, como la cocaína en los años 80, las relaciones entre ambos países han experimentado momentos tensos. Por una parte, Estados Unidos, acusa de que México es el causante, por su negligencia y la presencia de cárteles de la droga, el principal motivo de las más de 100,000 muertes por fentanilo. Empero, para que exista un productor, debe existir un consumidor, en este caso las personas de los Estados Unidos. La corrupción está en ambos lados de la frontera y esa es solo una causante del porqué el fentanilo está en las calles del vecino del norte. 

Ante estas situaciones por el fentanilo y el recién secuestro de 4 ciudadanos estadounidenses, figuras políticas de aquel país acusan de que es necesario que el Ejercito de los Estados Unidos entre a México a combatir a los cárteles. Esto, más allá de sonar como una película de Hollywood, violaría tratados entre los dos países, internacionales y, evidentemente, la soberanía del país. Al respecto, Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores, AMLO y Ricardo Monreal, presidente de la Jucopo en el Senado, se han posicionado al respecto. 

Claro ejemplo de estos dimes y diretes es el ex fiscal de los Estados Unidos durante la administración de Donald Trump, William Barr, quien ha propuesto recientemente que se permita al presidente Joe Biden utilizar al ejército estadounidense contra los cárteles mexicanos como solución a la crisis del fentanilo. Barr escribió en un artículo en The Wall Street Journal que los cárteles han florecido debido a la falta de acción por parte del gobierno mexicano, excepto por el presidente Felipe Calderón, quien intentó combatirlos durante su mandato de 2006 a 2012. Barr también sugiere que los cárteles mexicanos sean considerados como grupos terroristas.

En respuesta, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo que México es un país libre y soberano y que su gobierno no permitirá la intervención extranjera en su territorio. El presidente Biden ha anunciado recientemente que aumentará la cantidad de máquinas de detección de drogas y revisará más minuciosamente los paquetes y cargas que pasan por la frontera para evitar el cruce de fentanilo y otros opioides.

Otro de los personajes que han hablado sobre este tema tan polémico es el actual fiscal general de los Estados Unidos, Merrick Garland, ha destacado la necesidad de la colaboración del gobierno mexicano para combatir a estas organizaciones. Clasifico a las personas de los cárteles como las personas más horribles del mundo. 

El tema de la propuesta de Barr sigue siendo polémico y de debate entre ambos países. El senador mexicano Ricardo Monreal condenó la iniciativa presentada en enero pasado por el representante republicano Dan Crenshaw, por considerar que es un ejemplo del uso político del combate al narcotráfico y significa una regresión a las épocas del intervencionismo estadounidense. El fiscal general de Estados Unidos ha expresado su opinión sobre el gobierno mexicano liderado por López Obrador, sugiriendo que podrían hacer más para combatir el tráfico de fentanilo.

El presidente López Obrador ha dicho que su gobierno se enfoca en atender las causas que llevan a la violencia y el crimen, así como en la creación de empleos y el bienestar social. Señaló que su gobierno no aceptará la militarización de la política y que la solución a los problemas debe ser mediante la cooperación y el diálogo.

DJC