La detención de Ovidio Guzmán, hijo del "Chapo" Guzmán, ha desatado olas de violencia en el norte de México y especulaciones sobre el papel que juega el mundo, y sobre todo Estados Unidos que solicita su extradición desde 2019.
Fue este jueves 5 de enero cuando fuerzas federales recapturaron a Ovidio Guzmán López, "El Ratón", quien en octubre de 2019 fue detenido por la Marina y liberado por orden de Andrés Manuel López Obrador.
Ante esta nueva detención de Ovidio Guzmán, en la ciudad de Culiacán se suspendieron clases, actividades administrativas y se cerró el aeropuerto local, en tanto, las autoridades llamaron a la ciudadanía a no salir de sus casas ante el riesgo de hechos delictivos.
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Sin embargo, a muchos les sorprendió el revuelo que causó en el mundo la detención de “El Ratón”, ya que para ellos no es tan conocido o famoso este narcotraficante, al menos, no tanto como lo fue su padre dentro de la industria, por eso aquí te explicamos el impacto que genera la recaptura de Ovidio Guzmán y si te afecta en algo a ti.
LAS 5 CLAVES DE LA DETENCIÓN DE OVIDIO GUZMÁN
- Detención e ingreso en prisión
Ovidio Guzmán fue detenido en la madrugada del jueves en el estado de Sinaloa, en un operativo de las Fuerzas Armadas mexicanas que terminó en disturbios violentos en la región.
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Posteriormente, el narcotraficante fue trasladado en avión a la Ciudad de México, donde lo pusieron a disposición de la Fiscalía Especializada en Materia de Delincuencia Organizada (Femdo) y lo internaron en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 1 Altiplano -conocido también como el penal de Almoloya-, ubicado en Estado de México, donde también estuvo recluido su padre, quien se fugó de ahí en 2015.
- Al menos 29 muertos en los disturbios
La detención de Guzmán, apodado "El Ratón", derivó en una jornada de violencia en Sinaloa, especialmente en Culiacán, Los Mochis y Mazatlán, que se saldó con al menos 29 muertos, una decena de militares y 19 miembros del crimen organizado, informó el Gobierno mexicano.
Los bloqueos de carreteras con vehículos incendiados, las agresiones armadas, el cierre de aeropuertos y la suspensión de actividades empresariales y escolares recordaron al "Culiacanazo", los sucesos violentos acontecidos en Sinaloa en 2019 tras la primera detención del narcotraficante, que fue puesto en libertad por orden del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, para evitar muertes civiles.
- La extradición a EU, congelada
El Gobierno mexicano descartó desde el primer momento extraditar por la vía rápida al Ovidio a Estados Unidos, quien tiene abierta una solicitud desde 2019.
El canciller, Marcelo Ebrard, estimó que Washington tardaría entre cuatro y seis semanas en presentar cargos penales, por lo que previó que el proceso sea lento.
Este mismo viernes un juez federal mexicano congeló temporalmente la posibilidad de que Guzmán sea entregado a las autoridades estadounidenses y le otorgó permiso para recibir comunicaciones en el penal en el que está recluido, después de que sus abogados defensores presentaran recursos de amparo.
- Delitos por narcotráfico y posesión de armas
Ovidio Guzmán enfrenta acusaciones tanto en México como en Estados Unidos, lo que enredaría todavía más las posibilidades de que sea extraditado.
En su país de origen, se enfrenta a posibles delitos contra la salud (narcotráfico) y posesión de armas de fuego de uso exclusivo del ejército, además de estar investigado por delincuencia organizada, según expuso la titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez.
Estados Unidos, que ofrecía desde diciembre de 2021 una recompensa de 5 millones de dólares por su captura, imputa al narcotraficante delitos que versan sobre la conspiración para la introducción de drogas a ese país.
- EU en la política antinarco mexicana
La detención de Ovidio Guzmán sorprendió al ocurrir días antes de la visita a México del presidente estadounidense, Joe Biden, con motivo de la Cumbre de Líderes de América del Norte, lo que abrió la puerta a especulaciones sobre la influencia de Washington en la política mexicana contra el narcotráfico.
No obstante, el Gobierno mexicano negó cualquier relación entre los dos hechos y aseguró que Estados Unidos no participó en el operativo en el que se detuvo a Guzmán.
"Actuamos con autonomía, con independencia, sí hay cooperación y la va a seguir habiendo, pero las decisiones las tomamos como gobierno soberano, independiente, y estas decisiones las tomamos en el gabinete de seguridad", aseveró López Obrador.