Por fuga de información en los vuelos de aeronaves del Ejército, el traslado de materiales u objetos ilícitos, así como por gastos excesivos (comidas), el secretario de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval, ordenó crear un programa para que funcionarios públicos y militares acaten las medidas durante los vuelos realizado en aeronaves de esa institución.
Uno de los miles de correos obtenidos por los hacktivistas Guacamaya, clasificado como confidencial, menciona las instrucciones del secretario de la Defensa Nacional para garantizar los vuelos y evitar la vulneración de información de la Sedena.
Enviado por la Subdirección de Logística del Ejército, el correo, enviado el 30 de julio de 2022, detalla las instrucciones a seguir del alto mando de la institución.
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A 25 Jul. 2022, el Alto Mando, ordenó se elaborara el ´P.S.O para regular el servicio de seguridad y comisariato que se ofrece a los funcionarios de la S.D.N., al emplear aeronaves de la F.A.M (Fuerza Aérea Mexicana) en comisiones del servicio’, con el propósito de establecer lineamientos donde se detallen los conceptos, responsabilidades, medidas de seguridad y aspectos técnicos del servicio de intendencia”.
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En el documento se detalla que la FAM dispone de aeronaves para el traslado de personal del Ejército, así como, “previa autorización para el transporte de diferentes servidores públicos de la Administración Pública Federal”.
En el mensaje se instruye a los Mandos Territoriales garantizar el uso de las aeronaves, e implementar las medidas necesarias para evitar “dispendios y gastos excesivos” durante el traslado de funcionarios públicos.
En ocasiones debido a los horarios y distancias en las que se realiza la comisión es necesario proporcionar servicio de alimentación para atención a los funcionarios que son trasladados. Existen grupos de interés desafectos que pueden aprovechar la estancia de las aeronaves en tierra en instalaciones civiles para obtener información susceptible de ser explotada en forma tendenciosa y/o causar daños al material de vuelo”.
Para evitar que se sigan presentando riesgos y dispendios, se ordenan distintos lineamientos, sin distinción de militar o civil, entre ellos, abordar la aeronave cuando se dé la autorización, evitar la presencia de civiles ajenos a la institución antes, durante y finalizado el vuelo, así como la obligación de no ingresar con maletas o bolsas sin autorización de los militares responsables del vuelo.
“Designar personal de inteligencia y otro que estime necesario con la finalidad de verificar que la tripulación y pasajeros no transporten materiales ilícitos; así como que se aplique la ‘Directiva para regular el uso de las redes sociales por parte del personal Ejército y F.A.M”.
Para regular los dispendios por el servicio de comida, el Secretario de la Defensa Nacional, ordenó proporcionar los alimentos, a través de tres distintos menús (a elegir por el militar o civil) durante la mañana, tarde o noche, dependiendo la hora de vuelo.
En el desayuno, como comida principal se proponen “mini burritos de chile california con queso, tortilla de huevo con papas, jamón y chicharos; omelette de huevo con jamón de pavo y queso o tamal veracruzano o oaxaqueño, así como claras de huevo.
En la tarde, como plato principal se servirán (a elegir), ravioles de espinacas con queso, filete de res con espárragos y puré de papá; lasaña de champiñones, pechuga rellena con tres quesos cubierta con salsa de jitomate y camote al horno; así como pechuga de pollo a la plancha con verduras o arrachera con verduras.
Para la cena mini chapatas de chilorio o jamón de pierna, sincronizada o torta de cochinita y pan de cazón.
Todos estos alimentos van acompañados de pan, tortillas, sopa, agua, café, té, agua, dependiendo del gusto de cada militar o civil.