El senador de Grupo Plural, Emilio Álvarez Icaza, remarcó que no le extraña el espionaje del que fue víctima en el gobierno de Enrique Peña Nieto y que esta práctica continuara en la administración de Andrés Manuel López Obrador.
A través de su cuenta de Twitter, Álvarez Icaza respondió a la nota publicada por La Silla Rota sobre su aparición en los documentos hackeados de la Secretaría de Defensa Nacional que reveló el grupo Guacamaya.
“¿Quién es el hipócrita y falsario?”, cuestionó el senador de Grupo Plural ante la revelación de espionaje en su contra.
“Que el Ejército haya espiado mis actividades como defensor de #DDHH y acompañar a Javier Sicilia en el gobierno de @EPN, no me extraña. Tampoco que @lopezobrador_ prosiga con esta actividad ilegal ahora como Senador de la República”, tuiteó.
Emilio Álvarez Icaza consideró que el presidente López Obrador sigue traicionando las luchas que antes apoyaba, al tiempo que remarcó que tiene motivos para seguir en los temas por los que pelea en la vida pública.
“El presidente no se detiene en seguir traicionando sus luchas. Mi actividad es pública. Ni me callará, ni me pararán. Como toda mi vida, seguiré luchando… Hoy hay más motivos para ello”, lanzó.
LOS ACTIVISTAS QUE INVESTIGA LA SEDENA
En una nota de La Silla Rota, se encontró que de acuerdo con la base de correos y datos obtenida por los hacktivistas Guacamaya, el titular de la Sedena recibió un reporte del riesgo que representa que Javier Sicilia, por lo que piden permiso para realizar “inteligencia” (espionaje) contra él, así como a Servicios y Asesoría para la Paz (SERAPAZ).
Las cinco cuartillas entregadas al titular de la Sedena, mencionan la fundación del “Movimiento por la paz y la justicia”, por Miguel Álvarez Gandaria, Javier Sicilia y Emilio Álvarez Icaza.
La petición incluye fichas con datos personales de Javier Sicilia, el politólogo y activista Pablo González Casanova, así como del senador Emilio Álvarez Icaza Longoria.
EL SEGUIMIENTO A JAVIER SICILIA
Un documento fechado en enero de 2020, el cual llegó al escritorio de Luis Cresencio Sandoval González, titular de la Sedena, detalla el seguimiento a un activista quien exigía resultados por la muerte de su hijo en Cuernavaca, Morelos.
se redactaron los detalles de supuestos desencuentros entre los fundadores del movimiento, hasta el momento en que Javier Sicilia tomó la decisión de separarse de ellos.
“Una vez fue deslindado de las decisiones de referido movimiento, intentó integrarse a otras organizaciones sociales como: firma de un pacto en Cd. Juárez, EZLN, marchas en diversos estados, entre otros; donde dejó entrever su deseo para ser propuesto a un cargo de elección popular y/o proyectarse como candidato independiente”.
Según la información que obtuvo el Ejército, después de separarse del “Movimiento por la paz y la justicia”, Javier Sicilia continuó realizando activismo. El mismo camino siguió Miguel Álvarez Gandaria. Los reportes señalan que alguno de ellos recibió dinero proveniente de los Estados Unidos.
“Si bien es cierto, que Javier Sicilia se ha consolidado como una figura emblemática en algunos temas de DD.HH, también lo es, que utiliza esa cobertura para proyectarse de manera mediática con la finalidad de obtener beneficios personales como en el caso del ‘Movimiento por la paz con justicia y dignidad’, donde obtuvo recursos económicos y pretendiendo conseguir un cargo de elección popular”.
Por esos motivos, menciona el reporte: “es posible que Sicilia trate de aprovechar los decesos de la familia LeBarón con el propósito de posicionarse en la presente administración bajo el argumento de ser un defensor de los DD.HH, sin que se descarte que busque el apoyo de otras organizaciones como SERAPAZ”.
Las advertencias que llegaron al escritorio de Luis Cresencio Sandoval, incluyen una recomendación.
“Se autorice iniciar actividades de inteligencia a Javier Sicilia Zardaín y SERAPAZ, para poder identificar algún tipo de acción que trate de dañar y/o desvirtuar las investigaciones en torno a la familia LeBarón”.