Xyoli Pérez Campos, investigadora del Instituto de Geofísica (IGEF) de la UNAM, fue designada como directora del Sistema Internacional de Vigilancia, de la Organización del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (CTBTO, por sus siglas en inglés), con sede en Viena, Austria.
Pérez Campos será la tercera mujer en estar al frente de esa instancia, cuyo primer director fue el universitario Gerardo Suárez Reynoso, exdirector del IGEF, excoordinador de la Investigación Científica de la UNAM y encargado del diseño de la red de vigilancia, y también de efectuar la gestión con los países para construir las estaciones de monitoreo.
La científica expuso que la designación se realiza mediante una convocatoria abierta a los países miembro de la CTBTO, para que expertos en el área se postulen; la invitación estuvo vigente de abril a mayo de este año. Se presentaron 50 candidatos provenientes del orbe.
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La también doctora en geofísica por la Universidad de Stanford representará a la región de Latinoamérica y a las mujeres; respecto a esto último señaló que en la Organización se busca la paridad de género, sobre todo en los puestos directivos.
Xyoli Pérez dijo que porta en lo alto la bandera de la UNAM. “A donde vaya llevo la ‘sangre azul y la piel dorada’. Soy egresada del plantel 5 de la Escuela Nacional Preparatoria y de la Facultad de Ingeniería. Es importante que las nuevas generaciones vean lo que se puede lograr graduándose de esta Universidad, que nos da tanto”.
Objetivo de la CTBTO
El propósito de ese organismo es el monitoreo y vigilancia del cumplimiento del acuerdo adoptado por la Organización de las Naciones Unidas, cuya finalidad es evitar que los países efectúen pruebas nucleares, por el impacto que tienen en el mundo, para el medio ambiente y el ser humano.
El sistema se conforma por 321 estaciones y 16 laboratorios distribuidos en 89 países en el mundo. Fue diseñado cuando surgió la Organización, en 1997, para monitorear de manera global la posibilidad de una prueba nuclear y ser detectada.
México, detalló la universitaria, participa con una estación de radionúclidos, en Guerrero Negro, Baja California Sur; y con tres estaciones sísmicas auxiliares que pertenecen al Servicio Sismológico Nacional, a cargo de IGEF, del cual fue jefa.
Como parte de CTBTO, “mis funciones serán coordinar el Sistema Internacional de monitoreo, lo cual implica velar por la operación de las estaciones, su mantenimiento y, sobre todo, la sustentabilidad del sistema”, explicó.
