Se han escrito muchas versiones acerca de la captura de Miguel Ángel Félix Gallardo, incluso en la serie de Netlix, Narcos México, que da detalles mezclados entre ficción y realidad sobre el crimen organizado en México. Y de acuerdo con versiones de personajes involucrados, la detención del llamado "Jefe de Jefes" se llevó a cabo de una manera completamente distinta a como se ha reseñado.
El alguna vez considerado capo número uno en territorio mexicano fue detenido por el asesinado del agente de la DEA, Enrique "El Kiki" Camarena.
De acuerdo con el libro “El fiscal de hierro”, de Javier Coello Trejo, el autor desmiente la versión de que el comandante de la Policía Judicial, Guillermo González Calderoni, y quien detuvo personalmente al llamado “Jefe de Jefes”, tenía una estrecha relación, casi un compadrazgo, con Félix Gallardo, lo cual es una absoluta mentira.
—Licenciado Coello, tengo a la vista a Miguel Ángel Félix Gallardo, —dijo. —Adelante, Calderoni, proceda, —le respondí y agregué: una vez que lo aprehenda váyase con él y con sus hombres a la casa de seguridad que tenemos dispuesta y espere mis instrucciones.
“Miguel Ángel Félix Gallardo, el capo de capos ni las manos metió”, se lee en las páginas de su biografía “El fiscal de hierro”.
Describe además cómo Calderoni y sus hombres actuaron con rapidez y eficacia y lo detuvieron de inmediato, le introdujeron un trapo en la boca y no corrió la sangre, todo fue en sigilo.
“Una vez con la confirmación de que Gallardo estaba en nuestras manos le ordené de inmediato al teniente coronel Rodolfo Debernardi que enviara dos aviones de la Procuraduría a Guadalajara, pues habíamos detenido a unas ‘personas’ y necesitaba traerlos a la Ciudad de México.
Cuando Calderoni me informó que ya venían para México, le hablé al procurador don Enrique Álvarez del Castillo y le informé: —Señor, con la novedad de que capturamos a Miguel Ángel Félix Gallardo. —Coello, muy buena noticia, infórmele de inmediato al presidente, —me respondió.
FELICIACIÓN DE SALINAS DE GORTARI
Al marcarle al presidente Carlos Salinas de Gortari, éste lo felicitó. “Le dio muchísimo gusto escuchar la noticia. Me felicitó y rió a carcajadas cuando le conté de la cena que había organizado la noche anterior para mantener a los altos funcionarios ocupados”.
Posteriormente, en la Procuraduría General de la República se procedió a desarmar a toda la policía judicial de Sinaloa, así como las policías municipales y se intentó aprehender al coordinador de seguridad pública del estado, el sobrino de Félix Gallardo, sin éxito.
Una vez en la Ciudad de México, Félix Gallardo fue llevado a los separos de la Procuraduría, que se encontraban en la calle de López, a una cuadra del Eje Central. Ahí estaba la Comandancia de la Policía Federal Judicial Antinarcóticos, ahí había ministerios públicos federales y ahí estaban mis oficinas alternas.
“El interrogatorio duró horas y en todo momento imperó el respeto, no podía permitirme que surgiera algún problema con él porque era posible que se cerrara y dejara de hablar. Me contó toda su historia, cómo había iniciado, cómo movía los cargamentos de droga, como llegó a ser el jefe de jefes. Yo tenía perfectamente armado su caso, así que no había posibilidad de que saliera libre. No lo consignamos por el asesinato del agente Camarena, sino por diversos delitos contra la salud”.
En un momento del interrogatorio, Félix Gallardo me dijo: —Licenciado, nadie sabe que estoy aquí, le ofrezco 10 millones de dólares si me deja ir. Me le quedé viendo con cara de “usted está loco” y entonces me ofreció el doble: 20 millones de dólares. Le respondí tajantemente que no. —¿Qué usted no tiene precio?, —me preguntó —Mi precio es usted, Miguel. Cumplir con mi deber, ese es mi precio. Este es mi trabajo, ni siquiera es personal, — le dije.
"EL JEFE DE JEFES", MIGUEL FÉLIX GALLARDO ROMPE EL SILENCIO
A sus 75 años de edad, Félix Gallardo asegura que su familia "está haciendo un hoyo para yo ser enterrado en un árbol, no tengo pronóstico de vida ninguno", declaró para Telemundo.
"Mi salud es pésima", asegura Miguel Félix Gallardo, "El jefe de jefes", quien lleva 32 años preso en el penal de Puente Grande, en Jalisco, periodo en el que no había concedido una entrevista a medios de comunicación.
El llamado "Jefe de Jefes" y fundador del Cártel de Guadalajara cayó en abril de 1989 y actualmente ha perdido las capacidades de un oído y un ojo, además de que padece una neumonía "muy grave".
Félix Gallardo recibió una sentencia de 40 años de prisión por el asesinato del agente de la DEA Enrique, "El Kiki" Camarena.
El pasado mes de mayo, la revista Proceso publicó que Manuel Bartlett Díaz, actual titular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) podría ser detenido en cuanto llegara a poner un pie en los Estados Unidos, pues su nombre aparece en los expedientes del caso del asesinato de "Kiki" Camarena abierto en ese país, según lo dijeron funcionarios del Departamento de Justicia estadounidense a ese medio.
A finales de 1970 e inicios de 1980, una de las principales organizaciones del crimen organizado que reinaban en México estaba integrada por un grupo de personas originarias de Sinaloa: Miguel Ángel Félix Gallardo, el "Jefe de jefes"; Ernesto Fonseca Carrillo, "Don Neto"; y Rafael Caro Quintero.