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SISTEMA DE SALUD BAJO LA LUPA

"Mi hijo esperó 20 días para que lo atendieran"

Margarita López espera afuera del Hospital General Dr. Manuel Gea González, que desde el año pasado disminuyó el número de consultas de especialidad y de urgencias

Escrito en NACIÓN el

“Mi hijo dilató 20 días para que lo recibieran en el hospital por falta de dinero, pero ahorita sí ya lo están atendiendo. Aunque con estas broncas,  quedamos sin ningún quinto”, dice Margarita López, la tristeza y la preocupación se asoman en su mirada mientras espera afuera del Hospital General Dr. Manuel Gea González, que desde el año pasado disminuyó el número de consultas de especialidad y de urgencias.

Margarita y su esposo viven en San Gregorio Atlapulco, entre Xochimilco y Milpa Alta, y llevaban varias horas esperando afuera del hospital sentados en una jardinera. Ella se protege del frío con un rebozo, antes de relatar su historia tenía sus manos juntas y sus ojos cerrados mirando hacia el cielo, buscando ayuda divina para que su hijo Manuel se recupere pronto.

Narra que hace 20 días Manuel intentó brincar una barda porque le estaba ayudando a un albañil a hacer un trabajo, pero no se fijó bien, se resbaló de una tabla y cayó. Como resultado del accidente se fracturó la tibia y el talón, pero no  recibió atención médica inmediata porque en el hospital les dijeron que necesitaban comprar el clavo para realizarle una operación.

 

Dilató más de 20 días con el pie, pero gracias al señor Jesús no tuvo ni infección ni nada y nomás con sus medicamentos estuvo todo este tiempo. Anduvimos hasta donde está el hospital Balbuena, estuvimos en varios, buscando, pero su papel que tiene él cubre todos los gastos, pero lo que no cubría es el clavo que le van a poner, porque se fracturó la tibia y el talón

 

 

“Ahorita ya lo compramos y le trajimos a mi hija, que está con él, aunque sea un té y unos frijolitos, porque se vino muy temprano”, dice Margarita mientras levanta del piso una bolsa con dos botes pequeños de comida.

Comenta  con desesperación que su esposo es campesino, pero que actualmente no tiene trabajo, su situación económica fue lo que les impidió comprar rápido el clavo que requería su hijo para que lo intervinieran quirúrgicamente, el cual les costó 14 mil pesos.

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Mientras conseguían el dinero sólo lo mantuvieron con algunos medicamentos para que no le doliera tanto. Lo que más les preocupaba era que se complicara la lesión por la falta de atención médica.

“Nos endrogamos en un lugar donde prestan dinero y anduvimos pidiendo para comprar el clavo. Además, como a él lo conocen en las trajineras de Xochimilco, pues ahí también se pidió que el peso o los dos pesos y así como dicen en el pueblo, entre poquito y poquito se llenó el jarrito”, dice agradecida.

A sus 70 años, Margarita reza para que su hijo salga bien de la operación y cuestiona que no lo hayan atendido antes por la falta de recursos. Por esa razón, a las autoridades les pide “ser un poquito más humanos y que vean a mis hermanos, a la humanidad, no nada más aquí, yo creo que hay este tipo de problemas en todas partes. Me gustaría que nos apoyara el gobierno con un poco de material, porque sí lo requerimos. Nosotros que somos pobres que nos ayuden, yo creo que todos lo necesitamos”, enfatiza.

Gea González, con lista de espera hasta febrero de 2020

La Silla Rota obtuvo vía transparencia información sobre el funcionamiento del Hospital General Dr. Manuel Gea González, que el año pasado redujo sus niveles de atención y que en junio pasado ya tenía 990 intervenciones en espera de todas sus especialidades, la última fecha programada era para el 27 de febrero de 2020.

La División de Cirugía Plástica y Reconstructiva es el área con más intervenciones quirúrgicas en espera, ya que hasta junio tenía una lista de 330 operaciones, ocho de ellas planeadas para que se realicen en enero y febrero del próximo año, es decir, con una espera de ocho meses.

Un dato interesante es que de 2006 a la fecha este hospital perdió casi la mitad de sus camas censables, ya que pasó de 199 a sólo 107, 92 menos en los últimos dos sexenios. La principal baja fue de 2017, cuando tenía 160, a 2018, ya que se quedó sólo con 128, aunque para 2019 perdió 21. Esta situación ha afectado su operación, ya que disminuye su capacidad.

Las consultas de especialidades han ido a la baja desde 2015, ya que en ese año se realizaron 199 mil 514; en 2016 fueron 177 mil 544; en 2017 se hicieron 165 mil 543 y en 2018 la cifra fue de 153 mil 905. Hasta mayo de 2019 se habían otorgado 34 mil 240 servicios de este tipo.

Una situación similar es la que se registra en las consultas de Urgencias, las cuales se redujeron de 2017 a 2018, al pasar de 92 mil 713 a 88 mil 354, es decir, se realizaron 4 mil 359 consultas menos de un año a otro. Mientras que en los primeros cinco meses de 2019 se habían llevado a cabo 23 mil 835.

Sin embargo, la cifra de intervenciones quirúrgicas aumentó en este mismo periodo. En 2017, los especialistas del Hospital Gea González realizaron 17 mil 21 cirugías, en 2018 el número fue de 18 mil 007. Hasta mayo de este año se habían hecho 3 mil 887.

La falta de recursos es uno de los principales problemas de este hospital. Para este año se le otorgó un presupuesto de 233 millones 884 mil 357 pesos, del cual ejerció 62 millones 105 mil 789 durante los primeros meses. Esta cantidad es menor a la que se le aprobó en 2018, cuando tuvo 449 millones 429 mil 529 pesos y del cual ejerció 439 millones 167 mil 489.

La falta de recursos afectó a Carolina Gutiérrez, quien relata que no sólo ha tenido que comprar los medicamentos que requiere su hermano que está internado en este hospital, sino que también ha tenido que pagar para que le realicen estudios por fuera, ya que el hospital no los tiene.

“A él le hicieron un ecocardiograma y ése tuvimos que contratar para que se lo vinieran a hacer, no lo tenían aquí en el hospital, nos dijeron que teníamos que contratarlo. He visto también que piden que les vayan a  hacer una hemodiálisis y eso”, destaca.

Su hermano Joaquín lleva 15 días internado y Carolina estima que han gastado aproximadamente 6 mil pesos en la compra de medicamentos, materiales y estudios con los que no cuenta el hospital para atenderlo.

 

Joaquín llegó muy grave al nosocomio, con falla en sus pulmones y el corazón, permanece en Terapia Intensiva, y de acuerdo con Carolina los especialistas están haciendo todo lo posible para mantenerlo con vida.

Aunque faltan medicamentos y han tenido que pagar por estudios, ella afirma que lo han atendido muy bien, ya que en cuanto llegaron lo entubaron y han reaccionado rápidamente cuando ha entrado en paro.

Sin embargo, Carolina dice que le gustaría que el hospital tuviera todo lo necesario, ya que “mi hermano no trabaja, ya tiene tiempo enfermo y mi mamá, pues ya está muy grande y hay veces que no todos los hermanos ayudan. Entonces sí es muy difícil y más estar llevando estudios y comprando medicamentos”.

 

MJP