La América Latina y El Caribe no tiene un consenso sobre pronunciarse por el despliegue militar de Estados Unidos frente a Venezuela. A pesar de que el presidente de Colombia, Gustavo Petro, difundió un “comunicado” a nombre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), en el cual una veintena de los 33 países que conforman este organismo manifiestan preocupación y rechazo, algunas naciones salieron a desmentir el supuesto apoyo al rechazo.
El pasado 1 de septiembre Colombia convocó a una reunión virtual extraordinaria de cancilleres, de la Celac, para tratar el tema de Estados Unidos y su despliegue militar en inmediaciones de las costas de Venezuela. Pero no hubo acuerdo alguno. En aquél momento, la convocante del encuentro, la canciller colombiana, Rosa Yolanda Villavicencio, pidió a los cancilleres que asistieron a la cita pronunciarse “con firmeza” en rechazo del despliegue de buques de guerra estadunidenses en la región y de “cualquier eventual intervención militar en un país miembro de la Celac”, en alusión a Venezuela.
Pero no hubo pronunciamiento alguno, lo que sí, es que las naciones manifestaron la necesidad de que las naciones mantengan el diálogo a nivel multilateral, para alcanzar acuerdos, y buscar la solución pacífica de controversias, esto en estricto apego al derecho internacional.
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Rosa Yolanda Villavicencia expresó que existe amplia preocupación por la presencia de buques militares de un actor extrarregional en el mar Caribe, y que toda acción debe ajustarse estrictamente a los principios del derecho internacional, en particular, al derecho a la soberanía, la integridad territorial y la no injerencia en los asuntos internos de los Estados.
La posición de México
El gobierno de México ha sido claro en su manifestación. Si bien el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum no ha manifestado apoyo a las acciones emprendidas por Estados Unidos, tampoco ha brindado su total respaldo a Nicolás Maduro, como lo hizo su antecesor, Andrés Manuel López Obrador.
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La autoridad mexicana ha dejado claro, en todos los encuentros, que su postura se sustenta en los principios constitucionales de política exterior, en el respeto al derecho internacional y a las convenciones y tratados internacionales vigentes sobre conflictos.
México defiende: la autodeterminación de los pueblos, la no intervención, la solución pacífica de las controversias, la igualdad jurídica de los estados, la cooperación internacional y la lucha por la paz.
De acuerdo con fuentes diplomáticas, en la reunión de Celac, México simplemente expuso lo que está estipulado en la Constitución Política, sobre política exterior, y ello es lo que defiende. Pero no se ha signado ningún documento, porque no existe un consenso total
Brasil neutro
En el caso de Brasil, el ministro de Defensa, José Múcio, puntualizó que su país sigue de cerca la escalada de tensión que se vive entre Estados Unidos y Venezuela, pero no tomará partido en el conflicto. Las Fuerzas Armadas brasileñas, expresó, mantienen operaciones constantes en la frontera, toda vez que le preocupa que la región se convierta en una trinchera.
El presidente de Chile, Gabriel Boric, criticó la medida desplegada por Estados Unidos.
Países como Argentina, Ecuador, Perú, Costa Rica, El Salvador, Paraguay, Trinidad y Tobago, Jamaica, Guyana, han manifestado su posición de que es necesario “restaurar la democracia” en Venezuela y combatir a los cárteles de la droga.
El comunicado de Petro
Pero este fin de semana el presidente de Colombia, Gustavo Petro, difundió un supuesto comunicado avalado por una veintena de países de la Celac, para rechazar el despliegue militar de Estados Unidos.
Petro indicó que los países manifestaron una "profunda preocupación" ante estas acciones, subrayando que América Latina y el Caribe han sido declaradas "zona de paz".
El pronunciamiento, que no fue formalizado debido a la oposición de una "minoría" de países, se sustenta en principios fundamentales como el rechazo al uso de la fuerza, la resolución pacífica de conflictos, el diálogo, el multilateralismo y la no injerencia en los asuntos internos.
Entre los 21 países que, según Petro, apoyaron la declaración se encuentran naciones clave como Chile, Brasil, Nicaragua y México. Sin embargo, la lista de opositores incluye a Ecuador, Perú, Costa Rica y El Salvador. El gobierno de Guatemala, por su parte, aclaró en un comunicado que no suscribió el documento, a pesar de haber sido incluido inicialmente en la lista de partidarios.
República Dominicana también se desmarcó de dicho comunicado. El canciller Roberto Álvarez dijo, en un mensaje a través de cuenta de X, que su país “nunca” dio el consentimiento para que lo adhirieran a ese comunicado.
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