El discurso del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ante la Asamblea General de la ONU el 23 de septiembre de 2025 se convirtió en una puesta en escena con fines domésticos, utilizando el foro internacional para proyectar una imagen desafiante y cuestionar la totalidad del orden multilateral, de acuerdo con el especialista en análisis del discurso, Carlos Hernández Torres.
A nivel internacional, el mensaje fue interpretado como una señal de aislamiento global y un endurecimiento en temas sensibles como migración, Medio Oriente y Ucrania.
Para el analista de discurso, el acto ante la ONU fue menos un giro diplomático estratégico y más un guion simbólico dirigido al público estadounidense. En ese escenario, la tribuna global sirve como vitrina para reafirmar una versión autoritaria de liderazgo: firmeza externa, rechazo de la globalización y apelación directa a su base política.
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Carlos Hernández Torres sostiene que Trump buscó proyectar la narrativa de que Estados Unidos no debe adaptarse, sino exigir respeto, y que el multilateralismo funciona sólo si sirve sus intereses domésticos. En ese sentido, cada tópico abordado —clima, migración, política exterior— fue estructurado para reforzar identidades internas más que para construir consensos globales.
Su mensaje, de acuerdo con el experto, se articuló como un acto simbólico destinado a movilizar a su base política estadounidense.
A continuación, los ejes temáticos y las posturas más polémicas del discurso:
1. Negación del Clima y Apoyo a los Combustibles Fósiles
Uno de los puntos más confrontacionales fue el tema ambiental, que generó críticas a nivel internacional.
- Trump calificó el cambio climático como un "engaño global". Algunas fuentes también lo catalogan como un "timo".
- El expresidente criticó duramente los esfuerzos de Europa por reducir emisiones, afirmando que las políticas verdes dañan la economía.
- Manifestó su fuerte preferencia por los combustibles fósiles, incluyendo el petróleo, el gas y el carbón, como fuente de energía.
- Esta postura choca con el consenso científico internacional y podría aislar a Estados Unidos en foros climáticos.
2. Ataque al "globalismo" y agenda migratoria
El discurso se alineó con la narrativa "America First", atacando directamente al sistema multilateral y a las políticas de fronteras abiertas.
- Trump propuso que los países cierren sus fronteras y expulsen extranjeros.
- Acusó a la ONU y al sistema internacional de promover una agenda migratoria que, a su juicio, "arruina a las naciones".
- Denunció a la ONU por supuesta corrupción y la acusó de financiar la migración incontrolada.
- Calificó a la organización como un ente globalista que pone en riesgo la soberanía nacional.
3. Conflicto Ucrania-Rusia: promesa de recuperación total
Respecto a la guerra en Europa del Este, Trump adoptó una postura que busca reposicionar a Estados Unidos como actor influyente.
- Sostuvo que ahora considera que Ucrania tiene la capacidad de recuperar la totalidad del territorio perdido, incluida Crimea, siempre y cuando cuente con el apoyo de la OTAN y de Europa.
- Calificó el esfuerzo militar ruso como ineficaz.
- Planteó que, si Rusia persiste en negarse a negociar, los países deben imponer sanciones adicionales.
4. Oposición al Estado Palestino y condiciones de Paz
- En el conflicto de Medio Oriente, Trump endureció su postura, oponiéndose a las iniciativas de reconocimiento estatal.
- Se opuso activamente al reconocimiento de un Estado palestino por parte de miembros de la ONU.
- Argumentó que dicha acción solo alentaría a Hamas y sería percibida como una concesión al terrorismo.
- Exigió la liberación de los rehenes israelíes como condición indispensable para cualquier avance hacia la paz.
5. Cuestionamiento y desfinanciamiento de la ONU
Trump reiteró su estrategia de deslegitimación del orden multilateral existente.
- Cuestionó la relevancia de la ONU, sugiriendo que la institución se ha vuelto irrelevante o disfuncional.
- Reafirmó su política de desvinculación estadounidense de ciertos organismos y los recortes a las contribuciones presupuestarias de Estados Unidos a la organización.
- Esta estrategia busca debilitar el sistema multilateral que funge como contrapeso al poder estadounidense, dándole a Estados Unidos más margen de acción unilateral.
El discurso, según el análisis, funcionó como un guion calculado para proyectar firmeza y confrontación, reforzando la narrativa de que Estados Unidos no necesita adaptarse a las agendas globales. Sin embargo, esta postura genera riesgos de aislamiento global y tensiones diplomáticas con aliados europeo.
