Según reportes del diario estadounidense New York Times y la revista alemana Wirtschaftswoche con sede en Düsseldorf, ambos basándose en información de tres servicios de inteligencia occidentales, afirman que Rusia ha desplegado drones para labores de espionaje no solo en Alemania, sino también en otros países europeos.
Según Wirtschaftswoche, una de las principales metas de estos vuelos es rastrear las rutas de transporte militar que cambian constantemente. También buscan identificar qué armas llegarán pronto a Ucrania y cuándo habrá munición disponible en el frente de batalla.
¿Qué riesgos enfrentan empresas y directivos vinculados con Ucrania?
Los servicios secretos occidentales consideran que Moscú está bien informado sobre qué empresas armamentísticas producen para Ucrania. Esto coloca a sus directivos en una situación vulnerable frente a posibles ataques rusos.
Un ejemplo claro se vivió el año pasado, cuando se evitó por poco un atentado contra Armin Papperger, director general de Rheinmetall, uno de los conglomerados de defensa más importantes de Alemania.
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¿Qué tan frecuentes son los vuelos de drones rusos en Alemania?
De acuerdo con la revista alemana, los drones espías han sobrevolado bases militares alemanas, incluidas instalaciones donde soldados ucranianos reciben entrenamiento. También las bases estadounidenses en Alemania han estado en la mira.
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En lo que va del año se han registrado cientos de vuelos. El ejército alemán ha confirmado estos incidentes, aunque sin ofrecer cifras concretas. Desde la invasión rusa de Ucrania, la actividad aérea no tripulada se ha incrementado de manera significativa.
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Para contrarrestar estas operaciones, Alemania ha encargado docenas de drones en red destinados a interceptar los aparatos espías. Además, se discute la posibilidad de que los soldados puedan derribar drones con armas de fuego. Sin embargo, la medida genera preocupación, ya que los aparatos al caer podrían ocasionar daños materiales o incluso alcanzar zonas residenciales.